[Video] Orrea­ga 778‑2010.…el gri­to por la sobe­ra­nia de Eus­kal Herria resur­ge, don­de se pudo derro­tar al mayor ejer­ci­to de la epoca

p012_f01_199x104.jpg
Han trans­cu­rri­do 1.232 años des­de que el 15 de agos­to del 778 las tri­bus vas­co­nas se enfren­ta­ron en Orrea­ga al todo­po­de­ro­so ejér­ci­to de Car­lo­magno, des­de que l@s vasc@s derro­ta­mos al mayor ejer­ci­to de la epoca.
Noti­cia de Gara

Los irrin­tzis resur­gen en Orrea­ga y ani­man a recu­pe­rar la soberanía

La Bata­lla de Orrea­ga sim­bo­li­za «el dere­cho que posee todo pue­blo a man­te­ner su inde­pen­den­cia nacio­nal, su len­gua, sus leyes y cos­tum­bres». Así lo dejó escri­to el his­to­ria­dor nava­rro Artu­ro Cam­pión, y éste es el espí­ri­tu que ani­mó a Orrea­ga Fun­da­zioa y Etxe­ba­rren­goa Elkar­tea, de Garral­da, a reme­mo­rar unos hechos que alcan­za­ron la cate­go­ría de míticos.

La cita era a las 12.30 en Orrea­ga, y para esa hora nume­ro­sas per­so­nas se encon­tra­ban ya espe­ran­do el comien­zo de los actos. El soni­do de la txa­la­par­ta y la actua­ción de ber­tso­la­ris y txis­tu­la­ris, así como los irrin­tzis de Kar­me­le Galar­tza, deja­ron paso a los dan­tza­ris, inclui­do un aurres­ku en home­na­je a quie­nes com­ba­tie­ron en aque­lla bata­lla tan impor­tan­te para su épo­ca y para la his­to­ria del pue­blo vas­co. «Esta bata­lla fue un hito en la his­to­ria de Eus­kal Herria y el embrión del pri­mer esta­do vas­co, el Rei­no de Pam­plo­na, que pos­te­rior­men­te se con­vir­tió en Rei­no de Nava­rra. Lue­go fue cer­ce­nán­do­se por la acción del Rei­no de Cas­ti­lla sobre los terri­to­rios de Ara­ba, Gipuz­koa y Biz­kaia, y cul­mi­nó con la inva­sión y con­quis­ta del sur de Nafa­rroa en 1512, aun­que el rei­no nava­rro y su sobe­ra­nía sub­sis­tie­ron un siglo más en Ultrapuertos».

Así lo expli­ca­ba un miem­bro de Orrea­ga Fun­da­zioa antes de ini­ciar la subi­da a Iba­ñe­ta. Unos lo hicie­ron en coche, otros cami­nan­do por la vie­ja ruta jaco­bea, y a las 13.30 unas 300 per­so­nas se reu­nie­ron en el puer­to. Allí, a más de mil metros de alti­tud y con un tiem­po fres­co y nubla­do, se repi­tió el aurres­ku de honor y se escu­cha­ron los ber­tsos de Laka y del gas­teiz­ta­rra Ricar­do González.

Fue pre­ci­sa­men­te duran­te su inter­ven­ción cuan­do varios agen­tes de la Guar­dia Civil irrum­pie­ron en el acto, entre la indig­na­ción de los asis­ten­tes. Poco des­pués die­ron lec­tu­ra al pre­gón Ana Kolo­mo y Xabier Errea, miem­bros de Etxe­ba­rren­goa Elkar­tea. «Orrea­ga siem­pre ha sido un lugar de encuen­tro recu­rren­te de rei­vin­di­ca­ción de la sobe­ra­nía de Nava­rra. Sitio de fero­ces bata­llas, mon­ta­ñas de recuer­do en los rela­tos de nues­tros gran­des his­to­ria­do­res, coli­nas y valles gene­ra­do­res de bellí­si­mos poe­mas como la Can­ción de Rol­dán, pos­ta y trán­si­to de pere­gri­na­ción y, hoy en día ‑añadieron‑, pun­to de encuen­tro del recuer­do de nues­tros derechos».

«El vigor de un pueblo»

En el pre­gón no fal­ta­ron las citas de cro­nis­tas e his­to­ria­do­res que glo­sa­ron la impor­tan­cia de la Bata­lla de Orrea­ga y, en espe­cial, las que deja­ron escri­tas el Prín­ci­pe de Via­na o Artu­ro Cam­pión, quien evo­có «el vigor de un pue­blo» por ser soberano.

Tam­bién recor­da­ron al maris­cal Pedro de Nava­rra, «sím­bo­lo de la resis­ten­cia de los nava­rros» y muer­to, «pro­ba­ble­men­te ase­si­na­do», cuan­do esta­ba pre­so en el cas­ti­llo de Simancas.

«Es aquí, en estos valles, don­de fue hecho pri­sio­ne­ro en 1516 cuan­do era el encar­ga­do de diri­gir una colum­na del ejér­ci­to nava­rro que inten­ta­ba una vez más, des­de la Baja Nava­rra y el Bear­ne, recu­pe­rar el rei­no para los legí­ti­mos reyes Juan de Labrit y Cata­li­na de Foix». En el pre­gón entron­ca­ron el sig­ni­fi­ca­do de aque­lla his­tó­ri­ca bata­lla con la actual situa­ción de Eus­kal Herria, recor­dan­do que «Orrea­ga es un lugar de lucha por la sobe­ra­nía, de unión y divi­sión entre las dos Navarras».

Anjel Ain­zi­bu­ru, de Luzai­de, inter­pre­tó por pri­me­ra vez en eus­ka­ra la can­ción «Nava­rra tie­ne cade­nas», con­clu­yen­do el acto con nue­vos irrin­tzis, que se repi­tie­ron des­pués en la comi­da que reu­nió a 215 per­so­nas en Garral­da. Fue el últi­mo pre­si­den­te fran­quis­ta de la Dipu­tación Foral, Ama­deo Mar­co, quien dijo aque­llo de «ya no se escu­chan los irrin­tzis de los vas­co­nes». Kar­me­le Galar­tza y otros asis­ten­tes al acto, entre ellos Xabier Mar­tí­nez, de sólo 7 años de edad, demos­tra­ron ayer que el soni­do de los irrin­tzis no se ha apa­ga­do, sino que resur­ge con más fuer­za que nun­ca. Su eco sigue pro­pa­gán­do­se por las mon­ta­ñas vas­cas, ani­man­do a recu­pe­rar la sobe­ra­nía arre­ba­ta­da hace casi cin­co siglos.

Con este acto, los orga­ni­za­do­res qui­sie­ron «man­te­ner vivos unos hechos que otros igno­ran y nos ocul­tan, pre­ten­dien­do así el olvi­do de una his­to­ria que es herra­mien­ta impres­cin­di­ble para cons­truir el futu­ro». Un futu­ro que, según dije­ron, pasa por «deci­dir libre­men­te y sin impo­si­cio­nes, por­que es un dere­cho democrático».

Artikulua gustoko al duzu? / ¿Te ha gustado este artículo?

Twitter
Facebook
Telegram

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *