Para estar realmente viva es necesario pensar, moverse en el espacio y el tiempo, A cada minuto activar las neuronas y reaccionar a cada situación del entorno de acuerdo a pensamientos elaborados por una misma. Eso es difícil.
Desde tiempos antiquísimos la gente ha sido manipulada por ciertos grupos que quieren mantenerse en el poder. Nos estudian la mente, nos venden fuegos fatuos de distintos calibre para encandilarnos y mantener nuestra atención ocupada, y caemos redondos en la trampa, víctimas de nuestra ignorancia y el exceso de egoísmo e individualismo.
Ahora muchos zombies caminando chocándose entre sí, cada quien metido en su burbuja mental, respondiendo positivamente a la guerra psicológica con que EE.UU y su hija la U.E nos bombardea.
Pocos verdaderamente conscientes. Para mantenerse consciente es necesario sentir. Hacer caso a lo que el alma y eso que conocemos como buenos sentimientos nos indican, estos siempre derivan del conocimiento que se tenga de lo que es la justicia.
Conozco un pueblo que siempre escucha lo que le dice su corazón, un pueblo que tiene claro lo que es justo y tiene un entendimiento más amplio de lo que es el ser humano. Es decir, que desarrolla muchísimo más su capacidad de pensar por sí mismo. Por eso, por buscar un sistema de convivencia justo, es decir, más humano, por sacar a la luz los entripados, las corrupciones, la ineptitud de los que los gobiernan. Por hacer tambalear el sistema capitalista a los ojos de quienes descubrimos este escondido pero fuerte pueblo que lucha cuando nos demuestra que es posible evolucionar este planeta tierra con acciones derivadas de la verdad: la justicia.
Ociosidad, debilidad y estupidez. Tres características que el Capitalismo se esfuerza en meternos continuamente. Las personalidades se van formando según estos tres pilares. Así somos más manipulables. Simples cucarachas aplastables pidiendo a gritos ser aplastadas porque nos hemos acostumbrado a la dominación. La apatía.
Pero este pueblo, Siente, Piensa y Lucha. Por eso resulta tan peligroso para EE.UU y U.E, es el mal ejemplo, para los demás países de Europa. Lo mismo que en América Latina es Ecuador, Bolivia y Venezuela. Es criminalizada, acusada de terrorista, ocultada por los medios, para el mundo es totalmente desconocido. Cuando alguien dice que es del País vasco, le afirma el interlocutor “Ahhh España” o los medios digitales, impresos o de cualquier otro tipo hablan de los vascos con un enfoque manipulador, mentiroso y cruel para ensuciar su imagen frente al mundo. Otra vez, como lo hizo el asesino Franco, otra vez quieren hacer que los vascos tengan que esconder su cultura, su lengua y su dignidad como pueblo distinto: más humano. ¿Qué pretenden los Francos actuales? que Euskal Herria agache la cabeza, se calle y siga trabajando para una España y Francia que se dicen democráticas cuando lo que hacen es matar lentamente a su gente con los recortes salariales, encarecimiento de la vida, echándola a la calle por defender los intereses de unos banqueros que se lucran de la necesidad de la gente, y después de haberles quitado el piso siguen lucrándose y alimentándose del pago que ésta debe seguir haciendo.
Euskal Herria, el País de los vascos, tiene la fuerza de la madera, del hierro, de la tierra. Siente con pasión y lucha. Levanta la voz, se revuelve y se intenta sacudir de la contaminación parásita de este capitalismo que cada vez nos carcome más rápido. Saber de los euskaldunes, enterarse de su modo de ver la vida como dinámica que no acepta quedarse tontos frente a las disposiciones vomitivas de la élite que domina el mundo, nos alienta a unirnos a ellos en su anhelo de independencia, a decirle a la gente de nuestro entorno que Euskal Herria no es España ni Francia, que los vascos no son terroristas, como se cree.
Ahora que estoy en Venezuela, un país que tiene el deseo de ser socialista desde que Chávez entró en 1998 como presidente, veo la situación de un pueblo continuamente maltratado por los gobiernos anteriores que elegían a algún burgués títere de EE.UU como Carlos Andrés Pérez, por ejemplo. Venezuela fue desangrada por ser petrolera, desangrada como suele pasar con los países de América latina. Pero la diferencia es que actualmente Venezuela cuenta con Maduro, el presidente que trabaja en seguir la linea de revolución socialista. Lamentablemente muchos venezolanos se visten de socialistas solo para recibir los beneficios, cuando la gente que realmente necesita esa ayuda, esa intervención que el gobierno destina para ellos, no la recibe nunca porque se queda a mitad de camino, acaparado todo por los falsos socialistas que hablan de revolución pero que les cambia la cara cuando se enteran de los refugiados vascos en este país y dicen que no están de acuerdo con que venga gente de otros países a pasarla bien aquí.
Esa gente que, desinformada por los medios, ha creado la idea equivocada de que luchar por la dignidad es ser terrorista. Esa gente que se aprovecha de sus compatriotas negándoles, escondiéndoles y arrebatándoles los beneficios que Chávez y Maduro envían a los venezolanos de todos las zonas para que aprendan a empoderarse, y no me refiero a alimentos o un modelo populista como sí lo hay en muchos países que se dicen “democráticos”, estoy hablando de que se dota a las comunidades de equipos técnicos con tecnologías avanzadas para que produzcan contenidos desarrollando su capacidad de pensar y su independencia personal. Pero este tipo de gente, estos burgueses vestidos de revolución se apropian y no lo sueltan y dan falsa imagen de que todo va bien y logran engañar.
Esa misma gente, la que le cierra las puertas de la libertad de pensamiento y acción, de conocimiento, a sus propios compatriotas, esa misma se golpea en pecho pidiendo revolución y diciendo que no apoyan el que vengan de otros países a vivir aquí porque les quitamos las oportunidades.
Aquí en Venezuela hay vascos, unos viven bien, otros mal. La existencia de refugiados que no reciben atención, y que cuando la reciben se ven condicionados a unos cuantos minutos y a unas disposiciones que para nada toma en cuenta la situación del afectado. Sepan que aquí las condiciones son pésimas para algunos refugiados.
Pese a la dureza del día a día que deben pasar los invisibles, se lanzan a vivir, a luchar cada minuto como verdadero euskaldun, a contracorriente y llevando siempre la verdad en los ojos y el entusiasmo que es lo que tanto me atrae de ustedes los euskaldunes de corazón, los justos, los alegres, los “terroristas” como nos quieren hacer creer EE.UU y U.E para meternos miedo y que dejemos de apoyarlos. Cuando son el Estado Español y Francés los que ejercen el verdadero terrorismo desde todas sus trincheras: con la cárcel, con las ilegalizaciones, con sus medios servilistas como ABC., El País y El Mundo y otras malas hierbas que deambulan por allí con la única misión de embotar de mentiras el cerebro de muchos, de miles.
Afortunadamente siempre habrá una Euskal Herria despierta, mila esker zuri!!!
Porque ustedes nos dan fuerza, nos acompañan y nos enseñan que la vida es trabajar para lograr hacer realidad un sueño, el de la libertad.