¿No cree usted en esta conclusión? Los hechos le obligarán a creer en ella. Ensaye a hacer una apreciación de la situación política o dar orientación a la lucha sin hacer investigaciones sobre la realidad, y verá si es cierta o no la afirmación de que tales apreciación y orientación son vacías e idealistas, y si conducen o no a errores de oportunismo o putchismo. La respuesta sin duda será afirmativa. Ésta no se debe a que haya habido negligencia en la elaboración del plan antes de actuar, sino a que ha habido descuido en el estudio de la situación real de la sociedad antes de elaborar el plan, como sucede con frecuencia en las unidades guerrilleras de nuestro Ejército Rojo. Oficiales del tipo Li Kui1 castigan a ciegas a sus hombres una vez que éstos son cogidos en falta. Como resultado de ello, los castigados se quejan, surgen muchas discordias y los jefes pierden todo su prestigio. ¿No ocurre esto a menudo en el Ejército Rojo?
Sólo desechando el idealismo y previniéndose contra la aparición de cualquier error de oportunismo y putchismo, podremos ganarnos a las masas y derrotar al enemigo. Y sólo investigando esforzadamente la situación real lograremos desechar el idealismo.