El mediador internacional Brian Currin confirma la iniciativa de Batasuna, opina que es «encomiable y potencialmente innovadora» y que «la izquierda independentista debe hacer este viaje con ETA»
Diligencias previas 141. Juzgado Central de Instrucción número cinco: La «Comisión de Coordinación» o «Bateragune» está relacionada con ETA. El auto sitúa en la base la coincidencia de criterios en relación a la articulación de un polo soberanista. La mayoría social vasca observa la maniobra asumiéndola como un ataque frontal contra los presupuestos independentistas y contra su pretensión de dinamizar una nueva fase hacia el cambio político. La masiva manifestación unitaria contra las detenciones evidencia el déficit democrático con el que se maneja la cuestión vasca. La movilización ha «insuflado fuerza y moral a nuestras convicciones», explican los encarcelados. Arzallus: «Otegi y los demás son patriotas».
Las bases de Batasuna debaten. «Clarificación de la fase política y de la estrategia». La negociación política sirve al proceso democrático. Euskal Herria se halla en fase de superar el marco constitucional-estatutario y dar paso a un nuevo escenario que respete la voluntad de «todos» los ciudadanos vascos. Para ello, el MLNV impulsará la acumulación de fuerzas independentistas y desarrollará simultáneamente la resolución del conflicto y la «construcción nacional». Fases: recomposición de la Izquierda Abertzale, convergencia independentista, muro popular contra el «estado de excepción» y reconstrucción del proceso de negociación. Rufi Etxeberria: El documento busca un nuevo ciclo de «confrontación únicamente por vías democráticas». «Es tiempo de recoger el fruto». El mediador internacional Brian Currin confirma la iniciativa de Batasuna, opina que es «encomiable y potencialmente innovadora» y que «la izquierda independentista debe hacer este viaje con ETA». Rodolfo Ares, indignado, le rebate afirmando que, por el contrario, es ETA la que arrastra a los «radicales abertzales». Batasuna cuelga en Internet el documento y aclara las filtraciones interesadas. La propuesta de movimiento se difunde por el espacio sociológico de la izquierda abertzale y de las fuerzas soberanistas.
«Papel mojado» para Eguiguren. A su entender, la sociedad vasca ha interiorizado «con absoluta normalidad» el Gobierno de Patxi López. «Han pasado los tiempos de lehendakaris que hablaban en tono mayestático como el Papa». Basagoiti se adelanta al PNV en la foto con López «para demostrar quién dirige Euskadi y quién le ayuda». Los medios repiquetean sobre el mito de la unidad abertzale y sobre la hegemonía del PNV como posible atractor de algunas de las escisiones de lo que Azkuna denomina «nacionalismo institucional».
Pero son los hechos del presente ‑y no sus quimeras- los que hacen la historia. Segunda propuesta: la Asamblea Nacional de EA aprueba la unidad de acción soberanista y se compromete a la «agrupación de las fuerzas» independentistas para constituir un «espacio sociopolítico» sobre «vías políticas y pacíficas». ELA ve legítima la suma soberanista de EA. 21‑N, Conferencia Política.
Las rachas de viento y los chaparrones nos arrojan sin transición al otoño. Faltan muchas propuestas y aportaciones y hay reticencias y contradicciones, pero el deseado debate soberanista sobre la estrategia común a adoptar parece que está en marcha.
Jakue Pascual