Como informa el corresponsal de Pravda en Vilna, Vladas Vikulichius, las dos principales formaciones de izquierda lituanas, el Partido Socialista Lituano y “Frontas”, han celebrado su congreso de unidad que ha dado lugar a la nueva formación denominada Frente Popular Socialista de Lituania. En declaraciones de uno de sus líderes, nieto del primer presidente soviético de Lituania, Algirdas Paletskis, los partidos de izquierda deben decidir entre reformar el capitalismo salvaje, decorándolo, o encontrar la vía al socialismo.
El nuevo FPSL no lo va a tener nada fácil y su futuro no dependerá solo de la unidad de sus filas. Cada “valiente” que se afilie sabe que será convenientemente registrado por el gobierno, sus familiares chantajeados, perseguido en el trabajo, vigilado abiertamente.
Recordemos que a iniciativa de Lituania, este pasado verano, en la asamblea de la OSCE fue adoptada una vergonzosa resolución que equiparaba al fascismo y al comunismo. Como declaró en esa asamblea el representante de los comunistas griegos, K. Alisandrakis: “Aquí gobiernan los herederos de los colaboracionistas de los nazis, gobierna un régimen fascista, dónde el partido comunista está prohibido”.