Nestor Dipaola – Luis Otero
Esto es Tucuman
En la denuncia interpuesta ante la Justicia de esa provincia ‑junto con la presentación de las evidencias correspondientes- , la trabajadora de prensa manifiesta haber sido acosada y amedrentada reiteradamente por el responsable local de la empresa, Esteban Migliazzo, quien la habría presionado para que le entregara todos los meses la mitad de su sueldo ‑de sólo $ 2.000‑, imposición a la que Bazán se negó.
Migliazzo, quien al mismo tiempo se desempeñaba como secretario de Prensa y Difusión de la Municipalidad de Yerba Buena, habría manifestado explícitamente que ésas eran las “condiciones” que debían cumplir todos los periodistas que trabajan para esa repetidora, y en forma reiterada habría instado a nuestra colega a renunciar en caso de no aceptarlas. El funcionario- empresario finalmente cumplió la amenaza, ya que Bazán recibió un telegrama de despido el 8 de enero pasado, sin previo aviso ni explicación de los motivos.
Por esa razón, PAR se solidariza plenamente con la colega Roxana Bazán, se siente orgullosa de su ejercicio activo de la dignidad, y aplaude su coraje para denunciar presuntas prácticas corruptas que no sólo dañan a las y los periodistas, sino también a toda la sociedad, que necesita más que nunca de la transparencia, la honestidad y la justicia social.
No podemos soslayar el hecho de que por segunda vez en las últimas semanas, una mujer periodista de Argentina denuncia ser el blanco de maniobras extorsivas que atentan directamente contra su trabajo y su subsistencia, quebrantando el derecho de igual remuneración por igual tarea o función (en este caso a través de la retención indebida de la mitad de su salario), lo que a nuestro juicio incurre en la figura de violencia laboral, tipificada en el inciso c) del artículo 6 de la Ley de Protección Integral para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres en los ámbitos en que desarrollen sus re¬laciones interpersonales.
PAR adhiere a las acciones emprendidas en apoyo de la colega por la Asociación de Prensa de Tucumán y por la Federación de Trabajadores de la Cultura y la Comunicación, y expresa su anhelo de que a la brevedad posible, la Justicia desentrañe la veracidad de las supuestas prácticas puestas de manifiesto por Esteban Migliazzo y eventualmente por la empresa Cadena 3 y ‑en caso de comprobarse la configuración de un delito- establezca la pena correspondiente, así como el resarcimiento que por daño moral y psicológico pudiera corresponderle a la víctima.
Por último, la Red PAR reclamará a los dirigentes políticos y a las autoridades de Tucumán que, por la responsabilidad ética y social que les cabe, extremen los recaudos para evitar la reiteración de actos de corrupción entre sus funcionarios, máxime cuando éstos se apoyan en la vulnerabilidad de las trabajadoras, lesionando en paralelo el ejercicio de la libertad de expresión, lo que lesiona el derecho de la ciudadanía a estar informada.