La caverna ha acusado el golpe terrible de ver pasar ante la opinión pública la manifestación más grande de los 30 últimos años en Euskal Herria; de las dimensiones de la que se desarrolló contra Lemoiz y que llevó con la combinación de otras formas de lucha a su paralización. Ayer balbuceó unas palabras Egibar tratando de lavar la imagen de la secta empresarial que se esconde tras las históricas siglas PNV. Pero ni el PNV ni IU estuvieron allí. Lo cierto es que no se les hecha de menos a sus dirigentes, pero sí es un dato que sus desorientadas bases no comprenden.
El peligro está aquí ya. El zipayo PNV y la ínfima IU se han retratado y la prensa del regimen, el nuevo neofalangismo ha acusado el golpe y señalan a la propia Audiencia Nacional acusándola de ¡tibia!. Son los alaridos deseperados de los que añoran cualquier respuesta a Euskal Herria, incluyendo la vía policial y judicial, son los que jaleaban a los GAL y arrojaron a los pies de los caballos al PSOE cuando fue preciso para deshacerse de su gobierno. Este pueblo va derrotando al fascismo español y en breve el llamado «tribunal constitucional» tiene que hacer público un atentado contra el pueblo de Catalunya en forma de «sentencia» .
Cuidado con el neofranquismo: sus nervios le convierten en muy peligroso. Y los media del régimen tratan de excitar a la fiera. la solución es la movilización. Enhorabuena a quienes se movilizaron y seguro que veremos nuevas citas en defensa de nuestro pueblo y del proyecto político de Euskal Herria. Los media españoles han dado un paso al frente en su infame criterio de distorsionar la realidad mintiendo y calumniando. Pero se acaba la fiesta. Regocigémonos: cada día venden menos libelos y anuncian a gritos la crisis en que están sumidos. Que se pudran con las mentiras que intentan colarnos, antes lo hacían por por indicación de sus jefes de opinión y ahora babean por voluntad propia.
Merece la pena ver el reproche a los suyos del diario amarillo decano de las fantasmadas y las estupideces. Si, el Movimiento Popular Vasco ha derrotado a la esperpéntica ultraderecha española. Del enemigo el aullido.
El mundo
Miles de personas participaron ayer en Bilbao en una manifestación en favor de los presos de ETA. La marcha, además de un nuevo escarnio para las víctimas de la banda y para el conjunto de la sociedad, supuso una auténtica burla para la Justicia. Porque la Audiencia Nacional había prohibido una manifestación idéntica para evitar que se produjera un acto de exaltación del terrorismo. Y, sin embargo, la misma Audiencia permitió la concentración de ayer con el argumento de que estaba convocada por varios partidos y que se trataba de una manifestación distinta a la anterior, convocada por la asociación de familiares de presos etarras Etxerat. Pues bien, bastó que arrancara la marcha para que se produjera lo que todo el mundo sabía: Etxerat se hizo con el protagonismo, y una gran pancarta con sus reivindicaciones encabezó todo el recorrido. Si inaceptable es que partidos como EA o Aralar sigan respaldando y ofreciendo su altavoz a Batasuna y al entorno etarrra, resulta más que frustrante la candidez de la Justicia, que no acaba de entender que acabar con ETA pasa por terminar con su impunidad en las calles.
