Las prisas del Gobierno navarro para acelerar las obras del TAV, a costa de un fuerte endeudamiento, contrastan con el parón impuesto por el Ministerio de Fomento en los tramos de su competencia exclusiva: así, acaba de confirmar que no hay plazos para el tramo Castejón-Zaragoza, aplazado ya desde 2012 a 2015. De esta forma, todo el coste asumido por la parte navarra podría ser en balde. Además, Madrid no devolverá las cantidades adelantadas hasta 2017.
Ayer, justo el mismo día en que el Gobierno navarro seguía expresando su satisfacción por el acuerdo para iniciar las obras del TAV, «El Heraldo de Aragón» confirmaba algo que era un secreto a voces: el Ministerio de Fomento no tiene garantizada la ejecución del tramo entre Castejón y Zaragoza, con lo que las prisas mostradas por el Ejecutivo navarro para construir la vía desde Iruñea a Castejón podrían no servir para nada.
La intención inicial de Fomento era que el TAV llegara hasta Castejón para 2012. Sin embargo, «El Heraldo de Aragón» explicaba ayer que no se construirá antes de 2015 debido a las dificultades económicas del Ministerio por la crisis, que han hecho que ya se hayan paralizado otros proyectos del TAV como la conexión entre Santander y Bilbo. En Portugal ha ocurrido otro tanto.
Miguel Sanz, presidente navarro, fue preguntado expresamente por esta cuestión en su comparecencia del martes, y optó por una respuesta con tintes absurdos: «Si no se hace ese tramo, ¿cómo vamos a empalmar con el Tren de Alta Velocidad?», dijo encogiéndose de hombros.
De momento, los calendarios todavía cuadran dado que Iruñea y Madrid han pactado que las obras se inicien en 2011 y concluyan en 2015, que es la última fecha dada por Fomento para el tramo a partir de Castejón. Sin embargo, tanto las penurias económicas del Ministe- rio de José Blanco como las paralizaciones ordenadas en otros puntos del Estado llevan a pensar en nuevos retrasos o cancelaciones, que harían que el crédito asumido por Nafarroa para acelerar el proyecto no sirviera para nada. Fuentes de Fomento indicaron a «El Heraldo» anteayer mismo que ellos «nunca» han dado plazos.
Se da la circunstancia de que previamente Blanco también intentó implicar al Gobierno aragonés en una operación similar a la navarra. Pese a tratarse de dos ejecutivos del mismo color político (PSOE), no hubo pacto: el Ejecutivo de Aragón se negó a adelantar la financiación.
El grado de implicación de la Hacienda navarra en el proyecto, anticipando todo el dinero durante dos años y asumiendo en exclusiva los 45 millones correspondientes de intereses, no tiene parangón en el ámbito estatal. Por ejemplo, el Gobierno de Lakua sólo aceptó adelantar el dinero durante tres meses. Miguel Sanz pidió expresamente anteayer que no se entre en este tipo de comparaciones.
Devoluciones, tarde
Además, ayer se supo que Nafarroa no sólo adelantará el dinero estos dos años, sino que no le será totalmente devuelto por Madrid hasta 2017. Según el calendario que firmarán Miguel Sanz y José Blanco, Madrid apenas reintegrará 20 millones de euros en 2013; en 2014 serán 145; en 2015, 187; en 2016, 170; y en 2017, 152.
Para el 2014, por contra, la Hacienda navarra ya habrá tenido que abonar el total de los 387 millones de euros calculados oficialmente para este tramo (estudios técnicos de AHT Gelditu! preven mucho más).
La incertidumbre en torno a la financiación se agudiza además al incorporarse ADIF al acuerdo de financiación, que ha sido la fórmula hallada por Sanz y Blanco para que Fomento quedara exento de compromisos durante unos años.
A las cuentas de ADIF se le cargan 287 millones de euros de gasto (al contrario de lo que ocurre con Nafarroa, casi todo en la parte final de las obras: 2014 y 2015). ADIF depende teóricamente de Fomento, pero el convenio introduce una enigmática coletilla que Sanz tampoco supo aclarar, y que dice que usará para ello «fondos propios o de terceros».
La CEN se sumó a la euforia oficial por el acuerdo. Su nuevo presidente, José Antonio Sarría, dijo que el TAV ofrece una opción «magnífica» de acercarse rápidamente, «sobre todo a los puntos importantes de este país como Madrid, Barcelona o el País Vasco».
Txentxo Jiménez denunció que el acuerdo «tapa el incumplimiento de una responsabilidad que corresponde a Madrid» e indicó gráficamente que «durante dos años, Navarra va a pagar dos Convenios Económicos».
La noticia del compromiso adoptado para acelerar el TAV ha coincidido en el tiempo con los recortes impuestos por el Gobierno de UPN, con el apoyo del PSN, en diversos departamentos. El caso que más escándalo ha provocado es el de Osasunbidea. Ayer mismo, los sindicatos AFAPNA, CCOO, ELA, LAB, SATSE, SPA, UGT y USAE mostraron su protesta de modo conjunto, lo que muestra el impacto de la cuestión.
Informaron a la opinión pública de que si bien la consejera, María Kutz, aseguró que se iba a preservar la calidad del sistema sanitario, «el día 28 de marzo se cerraron 50 camas del Hospital de Navarra,con previsión de estar clausuradas hasta el 11 de abril, y precisamente corresponden a las plantas pertenecientes a las áreas quirúrgicas. Llama la atención que el propio Departamento de Salud poco antes hubiera negado que se fuera a aplicar esta medida». Añaden además que han constatado que «se han empezado a derivar ingresos desde Urgencias a clínicas privadas ante la falta de camas en centros públicos».
Recuerdan que también se han iniciado recortes en atención primaria, con el cierre de dieciséis centros de salud los sábados por la mañana, centralizando toda la atención de Iruñerria en tres ambulatorios.
Ayer se realizaron concentraciones por este motivo, que reunieron a cientos de trabajadores que ya se habían movilizado el día 23. Además de la merma de servicios, temen que se van a acometer recortes de personal o que se va a producir una sobrecarga de trabajo. Instan a la consejera Kutz a «que no se ensañe con el personal trabajador y busque la causa en la deficiente gestión».
