En las afueras de la capital Tegucigalpa, unas 3.000 personas, entre las cuales una mayoría de miembros del zelayista Frente Nacional de Resistencia Popular (FNRP) cortaron el paso hacia el sur del país, en la localidad de Germania, exhortando con altavoces a la población a firmar una declaración a favor de la formación de una Asamblea Constituyente.
“Yo, … hondureña (o) con número de identidad: …, expreso mi voluntad soberana en esta Declaración, que firmo libre y voluntariamente para que nos convoquemos a Asamblea Nacional Constituyente”, anotaba el formulario que iban firmando los participantes en la movilización.
La constituyente “deberá instalarse con mayoría popular, en la que redactemos y aprobemos una nueva Constitucion de la República que garantice de manera efectiva los derechos colectivos e individuales fundamentales de las hondureñas y hondureños, democratizando de forma participativa la vida política, económica, cultural y social del país”, agregó.
Los organizadores esperan recabar para el 28 junio, primer aniversario del golpe de Estado, 1.250.000 de firmas, dijo a la AFP durante la protesta el coordinador del Frente, Juan Barahona.
Zelaya fue derrocado y expulsado del país el 28 de junio 2009 por los militares en alianza con los demás poderes del Estado, los empresarios, las iglesias y otros sectores influyentes.
El ex-presidente hondureño fue acusado de 18 delitos, entre ellos traición a la patria por pretender cambiar la Constitución.
“También estamos exigiendo el regreso al país de Zelaya y del padre Andrés Tamayo” ‑un colaborador del ex gobernante, de nacionalidad salvadoreña‑, “que fueron expulsados por la oligarquía”, añadió Barahona.