La ver­dad del Facebook

Las­ti­mo­sa­men­te las cosas bue­nas que unos hacen otros las apro­ve­chan para hacer el mal.

Esta sema­na en la tele­vi­sión hubo repor­ta­je todos los días con Joa­quín López Dóri­ga (perio­dis­ta mexi­cano) sobre Face­book, Hi5, Mys­pa­ce, Soni­co, etc y lo peli­gro­so que son. Vie­ne un repor­ta­je dia­rio en el perió­di­co MILENIO, sobre como los secues­tra­do­res tie­nen como fuen­te de infor­ma­ción direc­ta y con­fia­ble los blogs, el Face­book y el Hi5. 

Entre­vis­ta­ron a unos secues­tra­do­res y dicen que entran a la red y ven los ROSTROS, la casa, los carros, las fotos de via­je y saben el nivel social y eco­nó­mi­co que tie­nen quie­nes ahí aparecen.

Ya en tele­vi­sión uno de ellos había decla­ra­do que antes bata­lla­ban mucho para reco­no­cer a los can­di­da­tos a secues­tros, pero que aho­ra con el Face­book y la infor­ma­ción que pone­mos volun­ta­ria­men­te en la red, ya no se con­fun­den ni tie­nen que inves­ti­gar en don­de viven o en que escue­la estu­dian y a don­de via­jan y quie­nes son sus papas, her­ma­nos y ami­gos. Eso pasó con Ale­jan­dro Mar­ti, (Joven mexi­cano muer­to por sus secues­tra­do­res) que de todo ponía. La fami­lia aca­ba de cerrar su blog des­pués de dar­se cuen­ta de la can­ti­dad de infor­ma­ción poten­cial­men­te peli­gro­sa que el joven había pues­to ahí con ale­gría y sin sos­pe­char que esta­ba arman­do a quie­nes lo mata­ron. Pro­te­jan a sus hijos y pro­té­jan­se uste­des; ya no pon­gan infor­ma­ción peli­gro­sa en la red.

LA VERDAD SOBRE “FACEBOOK”

Face­book está ven­dien­do la infor­ma­ción de sus usua­rios al mejor pos­tor. Cito tex­tual­men­te: “Lo que muchos usua­rios no saben es que de acuer­do a las con­di­cio­nes del con­tra­to que vir­tual­men­te asu­men al hacer clic en el cua­dro “acep­to”, los usua­rios le otor­gan a Face­book la pro­pie­dad exclu­si­va y per­pe­tua de toda la infor­ma­ción e imá­ge­nes que publican.”

De hecho, resal­ta el exper­to, los afi­lia­dos “auto­má­ti­ca­men­te auto­ri­zan a Face­book el uso per­pe­tuo y trans­fe­ri­ble, jun­to con los dere­chos de dis­tri­bu­ción o des­plie­gue públi­co de todo lo que cuel­gan en su pági­na Web.” Los tér­mi­nos de uso le reser­va a Face­book el dere­cho a con­ce­der y sub-licen­ciar todo “el con­te­ni­do del usua­rio” a otros negocios.

Sin su con­sen­ti­mien­to, a muchos usua­rios les con­vir­tie­ron sus foto­gra­fías en publi­ci­dad, trans­for­man­do un comer­cio pri­va­do en endo­sos públicos.

De repen­te todo lo que sus afi­lia­dos publi­ca­ron, inclu­yen­do sus foto­gra­fías per­so­na­les, su incli­na­ción polí­ti­ca, el esta­do de sus rela­cio­nes afec­ti­vas, intere­ses indi­vi­dua­les y has­ta la direc­ción de la casa, se envió sin su auto­ri­za­ción expre­sa a milla­res de usuarios.

Hay que creer­le a Mr. Mel­ber cuan­do ase­gu­ra que muchos emplea­do­res grin­gos al eva­luar hojas de vida revi­san Face­book para cono­cer inti­mi­da­des de los soli­ci­tan­tes. La prue­ba que una pági­na en Face­book no es para nada pri­va­da se evi­den­ció en un sona­do caso don­de la Uni­ver­si­dad John Brown expul­só a un estu­dian­te cuan­do des­cu­brió una foto que col­gó en Face­book ves­ti­do de tra­ves­ti Otra evi­den­cia suce­dió cuan­do un agen­te del Ser­vi­cio Secre­to visi­tó en la Uni­ver­si­dad de Oklaho­ma al estu­dian­te de segun­do año Saúl Mar­tí­nez por un comen­ta­rio que publi­có en con­tra del presidente.. 

Y para col­mo de males, el asun­to no ter­mi­na si el usua­rio se deci­de reti­rar Aun cuan­do los usua­rios can­ce­lan la mem­bre­sía, sus fotos e infor­ma­ción per­ma­ne­cen abor­do, según Face­book, por si deci­den reac­ti­var su cuen­ta Es más, el usua­rio no es reti­ra­do inclu­si­ve cuan­do fallece.

De acuer­do a las “con­di­cio­nes de uso,” los dolien­tes no pue­den obli­gar que Face­book des­cuel­gue los datos e imá­ge­nes de sus deu­dos, ya que cuan­do el fina­do acep­tó el con­tra­to vir­tual le otor­gó a Face­book el dere­cho de “man­te­ner­lo acti­vo bajo un sta­tus espe­cial de con­me­mo­ra­ción por un perío­do de tiem­po deter­mi­na­do por noso­tros para per­mi­tir que otros usua­rios pue­dan publi­car y obser­var comen­ta­rios sobre el difunto.”

Sepan los usua­rios de Face­book que son par­tí­ci­pes inde­fen­sos de un esce­na­rio, los aca­dé­mi­cos cali­fi­can como el caso de espio­na­je más gran­de en la his­to­ria de la humanidad.

De paso se con­vier­ten de mane­ra incons­cien­te en los pre­cur­so­res del fenó­meno de “Big Brother” te está observando.

Alu­sión direc­ta a la intro­mi­sión abu­si­va del esta­do en los asun­tos pri­va­dos del ciu­da­dano común para con­tro­lar su com­por­ta­mien­to social, tema de una nove­la pro­fun­da­men­te pre­mo­ni­to­ria escri­ta en 1932 por el bri­tá­ni­co Aldous Hux­ley: “Un Mun­do Feliz.” 

Artikulua gustoko al duzu? / ¿Te ha gustado este artículo?

Twitter
Facebook
Telegram

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *