El pasado 18 de julio, en la plaza de toros Monumental de Barcelona, aparte de torturar hasta la muerte a seis toros en manos de sangrientos matarifes, ocurrieron otras atrocidades.
Una de las barbaridades fue una vez más el engaño que sufren muchos turistas, por parte de las mismas agencias de viajes, siendo llevados a ver un espectáculo dantesco en un matadero de toros pensando que iban a ver un espectáculo de “arte”, muchos de estos extranjeros salieron de la Monumental llorando e indignados.
Otra brutalidad, reiterada e ilegal, fue la permisividad de la entrada de niños menores de 14 años en dicha plaza de torturas, suponiendo una infracción de carácter muy grave según la ley catalana. Con el fin de evitar secuelas psicológicas, los niños (estén de acuerdo o no sus padres) están protegidos por la ley a no presenciar la violencia y el sacrificio brutal contra toros hasta la muerte. Es lamentable y vergonzoso ver como las autoridades competentes no impiden tal infracción cometida siendo alertados por los propios antitaurinos. Mª Rosa Quiñonero, abogado animalista del equipo LEGALFINAN, junto con dos compañeros, al ver la inoperancia de la policía, se presentaron ante la puerta de la Monumental, y mientras la abogado les recordaba la ley, uno de los compañeros grababa la entrada de menores,…
La última salvajada de la tarde sangrienta ocurrió al acabar la corrida de toros, cuando una decena de energúmenos siguieron al chico, que grabó la infracción de la entrada de menores, hasta una calle solitaria, fue acorralado recibiendo una brutal paliza y amenazas de muerte contra él y su pareja. La valentía de estos taurinos, después de una tarde sádica de Toros, se traduce en violencia de muchos hombres contra uno solo y su mujer,… estos son los que aplauden la matanza de un hombre armado contra un bovino mermado.
ACTYMA estará presente en la manifestación del día 25 de julio ante la Monumental de Barcelona, en contra de estos hechos.