Conociendo su apego por las guerras sangrientas, cabría preguntarse si el derechista ex presidente del gobierno español José María Aznar visita por estos días Israel con el propósito de alentar una eventual y peligrosa guerra de ese país y su aliado Estados Unidos contra Irán.
Aznar pronunció un discurso este miércoles en Jerusalén en la Asamblea General del Congreso Judío Mundial (CJM), en el que la emprendió, con su conocida verborrea ultraconservadora, contra el mundo musulmán, acusó a Irán de tener ambiciones nucleares, e incluso denunció que el presidente norteamericano, Barack Obama, socava la relación estratégica de Washington con Israel y Europa, al buscar nuevos nexos en el Medio Oriente y con Rusia.
Dijo además en su acostumbrado tono prepotente que Obama no será capaz de defender el “modo de vida occidental” porque “ha puesto en movimiento fuerzas que podrían causarnos grandes problemas”.
La visita a Jerusalén del ex líder del Partido Popular (PP) español y su tenebrosa intervención pública ocurren en momentos de especial tensión en esa región por el inminente peligro de agresión militar de Israel y Estados Unidos a Irán, hecho que podría desembocar en una guerra nuclear de incalculables consecuencias para la humanidad.
No es descabellado pensar que Aznar, muy ligado a los sectores más ultraconservadores norteamericanos, esté echando leña al fuego para que se desate una invasión a Irán, si se tiene en cuenta su abultado expediente guerrerista.
Vale recordar que el ex gobernante español aconsejó al ex presidente norteamericano Bill Clinton bombardear en 1999 la radio y la televisión serbias durante el conflicto en la antigua Yugoslavia, y dijo por aquel entonces textualmente: “si estamos en una guerra hagámosla completamente”.
De similar modo, Aznar implicó a los militares españoles en el conflicto de Kosovo, posteriormente en Afganistán, y en el 2003 constituyó uno de los protagonistas principales de la también sanguinaria invasión norteamericana contra Irak.
Fue junto al entonces inquilino de la Casa Blanca, George W. Bush, y al ex premier británico Tony Blair el trío de actores de la afamada foto de Azores, donde se decidió desatar la agresión a Irak.
Pero como si fuera poco, por orden de Bush, a quien obedeció hasta la sumisión, recorrió varios países latinoamericanos en busca de soldados carnes de cañón para llevarlos a la guerra en Irak.
Con esa “pasión” por la beligerancia es evidente pensar que Aznar visita Israel para alentar una nueva conflagración, esta vez contra Ir