20 años de la des­truc­ción del pri­mer Esta­do ale­mán de obre­ros y cam­pe­si­nos- Civi­li­za­cion Socialista

El 3 de octu­bre de 1990 el impe­ria­lis­mo ale­mán pro­cla­mó eufó­ri­ca­men­te la «reuni­fi­ca­ción» ale­ma­na. En reali­dad fue la cri­mi­nal des­truc­ción con­tra­rre­vo­lu­cio­na­ria de la glo­rio­sa Repú­bli­ca Demo­crá­ti­ca Ale­ma­na (RDA-DDR en ale­mán) y su ane­xión for­za­da por los mono­po­lios alemanes.

Tras la capi­tu­la­ción y derro­ta de la direc­ción del PSUA-SED, de la STASI anti­fas­cis­ta y del Ejér­ci­to Nacio­nal Popu­lar 30 mil vora­ces buró­cra­tas oes­tea­le­ma­nes se lan­za­ron a tomar bajo su con­trol todos los resor­tes de la eco­no­mía, la admi­nis­tra­ción, la edu­ca­ción, la jus­ti­cia y la socie­dad de la DDR. De octu­bre de 1990 a diciem­bre de 1994 el 75 % de la eco­no­mía del Esta­do socia­lis­ta más avan­za­do e indus­tria­li­za­do fue destruida.

El 90 % del empleo indus­trial fue liqui­da­do. El 85 % de las empre­sas de la DDR fue­ron toma­da por el capi­tal impe­ria­lis­ta ale­mán, el 9 % por el capi­tal de Fran­cia, Sui­za, Aus­tria, Rei­no Uni­do y Holan­da y sólo un 6 % que­dó en manos estea­le­ma­nas. 62 secre­ta­rios de esta­do de los diver­sos gobier­nos regio­na­les del Este eran oes­tea­le­ma­nes. Dere­chos socia­les bási­cos como el pleno empleo, la segu­ri­dad social ple­na, el depor­te y la cul­tu­ra gra­tui­tos, el acce­so a la vivien­da, la edu­ca­ción uni­ver­sal gra­tui­ta de alto nivel y otros fue­ron eli­mi­na­dos para siempre.