Por paradójico que resulte, cuando Patxi López viaja al extranjero, la CAV sufre una inflación de lehendakaris, porque al que está fuera se le suma la «lehendakari en funciones», Isabel Celaá. Dos personas, al mismo tiempo, ostentan oficialmente el cargo de lehendakari y hacen uso del mismo para suscribir acuerdos internacionales en la lejanía o para firmar decretos en Gasteiz. Dos lehendakaris oficiales al mismo tiempo parecen demasiados aplicando sencillamente el sentido común.
Hasta que el PSE llegó a Ajuria Enea no se conocía una circunstancia de este tipo. En el Boletín Oficial del País Vasco sólo puede encontrarse un único antecedente prácticamente anecdótico que se retrotrae al 23 de mayo de 1983, cuando Mario Fernández firmó con el título de «lehendakari en funciones» un decreto de cesión de un solar al Ayuntamiento de Loiu mientras Carlos Garaikoetxea se encontraba en Venezuela. Un único antecedente en toda la historia del Gobierno autonómico y Celaá ya ha rubricado 26 decretos en apenas año y medio de Gobierno del PSE. Por cierto, entre ellos dos «habilitaciones de crédito» para su propio Departamento de Educación por valor de 403.435,6o euros.
En los anteriores ejecutivos de Lakua la cuestión estaba solventada por la existencia de la figura del o la vicelehendakari, que asumía sus funciones cuando el lehendakari no podía presidir el Consejo de Gobierno. Lo que diferencia esa situación de la actual es que mientras el vicepresidente asume alguna de las funciones del lehendakari, en este caso Isabel Celaá aparece nombrada lehendakari; en funciones, pero lehendakari.
Para «fallecimiento o incapacidad»
Isabel Celaá comenzó a sustituir al lehendakari en verano de 2009, cuando tras menos de tres meses en el cargo Patxi López decidió tomarse unas vacaciones. Pero una cosa es representar a Lehendakaritza en actos protocolarios, como recepciones, misas y desfiles, y otra firmar decretos.
No existe información oficial, o al menos no se ha publicado en el BOPV ni se ha transmitido al Parlamento, de por qué es Isabel Celaá quien ejerce las funciones del lehendakari. Según noticias periodísticas, se aplica el artículo 14 de la Ley de Gobierno, que establece un orden de prelación para «los casos de que el lehendakari tenga que ser sustituido», que acaba en la designación del consejero de más edad. Pero el artículo está previsto para imprevistos por «fallecimiento o incapacidad» del lehendakari.
Por otra parte, tampoco se ofrece información oficial pública de cuándo empieza y cuándo acaba de ejercer Isabel Celaá de «lehendakari en funciones».
Además de en sus periodos vacacionales, hay constancia de que Isabel Celaá ha sido «lehendakari en funciones» durante los viajes de Patxi López a Brasil en marzo, a EEUU en julio y a China en setiembre, porque en los tres casos Celaá ha firmado decretos con ese título. Y en el caso de los tres rubricados el 28 de setiembre, al mismo tiempo que Patxi López firmaba un acuerdo en Kunshan, provincia de Jiangsu. Un mismo día y dos lehendakaris.
En estos tiempos de comunicaciones internacionales instantáneas y con la existencia de la firma electrónica, resulta llamativo que el mero hecho de viajar por el mundo impida a un presidente tomar decisiones y autorizar decretos.
Si Patxi López tiene alguna duda de cómo se hace podría preguntar a su consejero de Industria, Bernabé Unda, que estaba junto al lehendakari en Kunshan el 28 de setiembre y, sin embargo, aparece como firmante del «decreto 249⁄2010, de 28 de septiembre, por el que se determinan los servicios y actividades susceptibles de ser retribuidos mediante precios públicos de la Administración de la Comunidad Autónoma del País Vasco y de sus Organismos Autónomos». A López le sustituye Celaá, pero Unda sí lo firma.
Fuente: Gara