4 DE OCTUBRE, DIA DE LA MEMORIA A LAS VICTIMAS DE YELTSIN
Las masas moscovitas movilizadas en contra de Yeltsin y del capitalismo
Los bandidos de Yeltsin y Grachov agrediendo a soviéticos para imponerles el capitalismo criminal
Desde los primeros dias de octubre en muchas ciudades de la Federación Rusa se están celebrando mítines y concentraciones en recuerdo a los caidos en defensa del Soviet de la Federación Rusa, en los dramáticos acontecimientos que tuvieron lugar en Moscú durante la llamada Segunda Revolución de Octubre, en septiembre-octubre de 1993.
En la ciudad de Leningrado, el mitin fue el pasado dia 3, realizado en memoria de los que cayeron en la lucha contra la restauración capitalista, en el levantamiento popular en Moscú de 1993.
Aquellos terribles dias mostraron al mundo de qué bárbara manera fueron consolidando su poder quienes querían imponer el capitalismo a los pueblos soviéticos y mostraron cual es su concepto de democracia, cuando los tanques a las órdenes de Yeltsin, tras recibir autorización de Washington, dispararon contra los diputados del Parlamento de Rusia, elegidos según la ley al Soviet de la Federación Rusa y los miles de trabajadores que acudieron en su defensa.
Las acciones de condena y recuerdo a las víctimas en el 17 aniversario de la masacre se sucedieron en las ciudades de toda Rusia. En Leningrado, los comunistas organizaron una caravana de coches a lo largo de la Avenida Lénin y terminaron con un mitin en el Campo de Marte, donde se encuentra el Memorial a los caidos en la Revolución de Octubre de 1917.
Intervinieron miembros del PCFR y otras organizaciones populares de la ciudad, que relacionaron el triunfo del sangriento régimen de Yeltsin, con las actuaciones del actual gobierno ruso.
«La situación de crisis que atraviesa Rusia es consecuencia directa de los acontecimientos de octubre del 93. La situación actual nos muestra que el régimen de Yeltsin solo podía sostenerse sobre los escudos de sus fuerzas represivas (los OMON), los tanques de los traidores y la violación de la ley», indicó el segundo secretario del comité del PCFR de Leningrado. Al terminar el acto, los asistentes depositaron flores en el Memorial a los caidos en la Revolución de 1917 y 1993 en el que está escrito en piedra:
» La voluntad de los tiranos es enfrentar a los pueblos unos contra otros.
Pero tu te levantaste Peterburgo Trabajador y fuiste el primero en iniciar la
guerra de todos los oprimidos contra todos los opresores, para así destruir
la misma semilla de la guerra «.
Los héroes de octubre de 1993, que perdieron su vida en desigual combate en defensa del Soviet de Rusia, bajo las bombas de los tiranos de Yeltsin a las órdenes de Washington, nunca serán olvidados.
En aquellos acontecimientos, el que fue vicepresidente de Rusia desde julio de 1991 hasta el 4 de octubre de 1993, Alexander Rutskoi, fue nombrado Presidente de Rusia en oposición a Yeltsin, por el Soviet ( Parlamento ) de la Federación Rusa. Pero éste, contando con el apoyo de la OTAN y todas las cancillerías occidentales, decretó ilegal su destitución y el nombramiento de Rutskoi y ordenó a la milicia a su servicio rodear el Parlamento y detener al nuevo Presidente.
Durante varias semanas los diputados resistieron en el interior, cercados y sin electricidad, mientras que cada día la movilización popular en su apoyo iba creciendo rápidamente, hasta que decenas de miles de moscovitas, bajo la consigna de » Todo el poder a los Soviets «, consiguieron romper el cerco de las fuerzas especiales ( los odiados OMON ) y unirse a los defensores del Parlamento. En ese momento, el nuevo Presidente de Rusia hizo un llamamiento al pueblo a tomar los edificios públicos moscovitas. Las masas fueron tomando al asalto uno tras otro los edificios mas emblemáticos de la Capital rusa, entre los que destacaron la torre de televisión de Ostánkino (lugar dónde esa noche hubo feroces combates contra los blindados de Yeltsin ) y el edificio del COMECOM. Al mismo tiempo, Rutskoi exortó a todo el país a no obedecer las órdenes del borracho del Kremlim.
El ejército permaneció neutral en el enfrentamiento, hasta que la división Dzerzínskaya, estacionada en las afueras de Moscú, intervino en favor de Yeltsin y atacó fieramente a los leales al Soviet de Rusia, de los que perecieron mas de 300 defensores entre diputados, paramilitares comunistas, patriotas y civiles. Rutskoi, que era coronel de la fuerza aerea y con gran prestigio entre sus colegas por su actuación en Afganistán, llamó desesperadamente a la aviación a bombardear el Kremlim de Moscú, desde donde Yeltsin transmitía sus órdenes directamente recibidas de Washington, pero los mandos de la fuerza aerea le desoyeron.
Yeltsin se impuso con un baño de sangre. De los fieles a Yeltsin destacó el ministro de defensa Grachov, que tan solo exigió que la órden de bombardear el Parlamento le fuera emitida por escrito.
Si apenas dos años antes, en los acontecimientos de 1991,el lider del GKChP, Yanayev, tembló a la hora de ordenar a las fuerzas leales que intentaban evitar la destrucción de la URSS, disparar contra las fuerzas movilizadas por la CIA y Yeltsin, por temor a causar víctimas entre civiles y militares, las fuerzas traidoras anticonstitucionales yeltsinistas y procapitalistas no dudaron un instante en disparar contra el pueblo de Moscú y causar una matanza. Pero Yeltsin desató su cruel furia contra el pueblo despues de recibir la aprobación del presidente norteamericano. Así fue y es la cobardía de los corruptos restauracionistas, fuertes contra su propio pueblo y sumisos ante sus amos de EEUU.
Pero la historia aún no ha terminado y el movimiento comunista, que crece sin parar en los territorios del Espacio Soviético, tomará buena cuenta del pasado para restablecer el Poder del Pueblo y hacer justicia con los políticos corruptos y los degenerados nuevos ricos que han amasado su fortuna sobre el robo y la expoliación de la propiedad colectiva que tanto costó levantar.