La distancia entre Madrid y Nueva York es de 5.924 kilómetros, unos 4.500 kilómetros menos que entre Madrid y Pekín. Sin embargo, la relación entre el Tesoro Público y los chinos es más cercana que la del organismo de financiación del Gobierno y los americanos. Y es que el saldo vivo de deuda pública española que está en manos de los primeros ha aumentado de forma considerable en los últimos años, mientras que apenas lo ha hecho en el caso de los estadounidenses.
En este sentido, se podría decir que, en los numerosos road shows o presentaciones entre institucionales que ha realizado el Gobierno a lo largo del año, Soledad Núñez, directora general del Tesoro Público, ha sabido ganarse mejor a los inversores chinos que José Manuel Campa, secretario de Estado de Economía, a los estadounidenses. Sin embargo, la respuesta a la pregunta de Por qué nos compran deuda los chinos y no los americanos es mucho más compleja.
Según datos del Tesoro a 30 de septiembre, China tiene un importe neto invertido en deuda pública española de unos 43.146,72 millones de euros. El interés por los títulos del Tesoro ha aumentado en los últimos años, principalmente desde 2008. Han pasado de tener unos 5.136 millones de euros (4% del saldo de deuda que se encontraba en manos de inversores no residentes en 2005 ó 128.410 millones) a en torno 43.146 millones en septiembre de 2010 (19% de un volumen actual entre extranjeros de 227.088 millones).
Por su parte, los americanos apenas han aumentado su exposición. En estos momentos, cuentan con poco más 4% del total del importe de deuda en manos de inversores foráneos: unos 9.000 millones de euros. “Los chinos tienen dinero, mientras que los americanos lo deben todo”. Así de tajante se muestra José Carlos Díez, economista jefe de Intermoney. “Los americanos tienen unas tasas de ahorro más bajas y no quieren correr riesgo de cambio. Y en China, tanto los bancos centrales como los fondos soberanos o algunos bancos y aseguradoras estatales tienen varios billones de dólares de ahorro líquido”, añade Guillermo de la Dehesa, presidente del CEPR (Centre for Economic Policy Research).
Reservas
Las reservas de China, las mayores de todo el mundo, aumentaron en 194.000 millones de dólares (en torno a 139.640 millones de euros) en el último trimestre, hasta alcanzar un récord de 2,65 billones de dólares. “La mayor demanda por parte de los inversores asiáticos puede deberse a la necesidad de diversificar sus reservas en diferentes monedas, lo que ayuda no sólo a España, sino al euro en general”, indica Silvio Peruzzo, economista de RBS. En este sentido, China se mostró dispuesta este fin de semana a ayudar a Portugal para que salga de la crisis.
Ni siquiera en los momentos más tensos de la deuda soberana, los chinos, en este caso la Administración Estatal de Divisas de China (Safe, en sus siglas en inglés) le ha dado la espalda al Gobierno español. Se quedó con el 9% de una emisión de 6.000 millones a diez años que ejecutó con éxito el Tesoro el pasado 6 de julio, es decir, con unos 540 millones, y durante los días siguientes realizó nuevas compras en el mercado secundario, hasta los 1.000 millones.
“Es difícil convencer a los americanos porque no conocen bien el mercado y no se atreven a invertir mucho dinero fuera”, explican fuentes de Economía. “Se ha hecho campaña en los dos sitios, pero en China está Safe, que tiene un músculo financiero importante y supone una vía rápida para obtener financiación”, añaden fuentes del Servicio de Estudios de un banco español. Éste es, sin duda, un apoyo importante en un momento en el que el Gobierno continúa con su ardua tarea de reducir el déficit. En 2010, ha emitido más de 185.000 millones entre letras, bonos y obligaciones y, según los Presupuestos de 2011, colocará otros 192.000 millones el año que viene.