TRABAJO TOMADO DE LA WEB CUBADEBATE
HAZAÑAS DE ESTE TIPO HAN VOTADO SÍ… PP, PNV Y PSOE
El ejército responsable de actos como estos ahora bombardea Libia en nombre de los derechos humanos. Se advierte que los enlaces de este artículo contienen imágenes altamente repulsivas.
La semana pasada, la revista alemana Der Spiegel fue la primera en publicar tres fotografías de un grupo de soldados estadounidenses que, entre juergas y drogas, posó con los cádaveres de afganosinocentes que habían matado.
El artículo de Der Spiegel era ya suficientemente inquietante, con fotos de varios soldados de EE.UU. que sostienen la cabeza de un cadáver, y otra foto de dos hombres afganos muertos, encubriendo los rostros de las víctimas.
17 fotos más han sido publicadas por la revista Rolling Stone este domingo (esta vez sin borrar los rostros de las víctimas) llevando el terror a un nivel superior.
El artículo de la revista Rolling Stone que acompaña las fotos se titula “The Kill Team Photos” (Las fotos del equipo de matar).
Una foto muestra a soldados de la 5 ª Brigada Mixta Base de Lewis-McChord de Stryker siguiendo el protocolo militar y cortando la ropa de Gul Mudin, un campesino afgano.
Un sonriente Capitán Jeremy Morlock y el soldado Andrew Holmes aparecen mostrando la cabeza de Mudin sostenida por el pelo, y posando con su cadáver en otras imágenes.
Otra foto muestra a un afgano que había sido apuñalado por el “Kill Team”.
La revista también señaló que el Ejército ha estado tratando de eliminar las pruebas de mala conducta del Tercer Pelotón. Una foto que puede haber sido tomada por otro pelotón muestra a dos hombres afganos muertos amarrados y colocados junto a una carretera.
Un cartel en el cuello de un cadáver dice: “los talibanes están muertos.”
Los fiscales del Ejército insisten en que la culpa de las muertes corresponde a Calvin Gibbs, jefe de escuadra en el Tercer Pelotón. Morlock, junto con otros cinco soldados, se declaró culpable la semana pasada de delitos menores a cambio de su testimonio.
Morlock ha sido condenado a 24 años de prisión. (Tomado de The Raw Story, traducción de La pupila insomne)