El día 18 de julio de 1936 a las 20:20h fue asesinado el comandante de la Guardia Civil de Iruña José Rodríguez-Medel Briones, por Mantenerse Fiel a la Republica y oponerse al golpe fascista.
Despúes de hablar con sus hombres la intención que el tenia. Un cobarde disparo por la espalda acabo con su vida en la Calle Ansoleaga, en las inmediaciones de la Plaza San Francisco, lugar donde estaba situada en aquella fecha la Comandancia de la GC. Pasando a ser el primer asesinado de en Hegoalde.
Todavía hoy, desde el seno oficial del Instituto armado se continúa negando que este asesinato fuera un acto premeditado para eliminar a uno de los principales obstáculos para el éxito del golpe de Estado de 1936. Los restos del Comandante Rodríguez-Medel permanecen todavía enterrados de forma clandestina en el cementerio de Iruña.