Eleak ha señalado en un comunicado que «no podemos ni queremos consentir que sigan boicoteando el nuevo escenario político, que pisoteen de esta manera las ilusiones y las esperanzas de los ciudadanos y ciudadanas de este país».
El movimiento por los derechos civiles reclama la «inmediata» puesta en libertad de Josu Esparza, entregado el 12 de diciembre, y de «cuantos permanecen encarcelados por motivaciones políticas».
Eleak ha trasladado ese mensaje contra la persecución política y en defensa «del respeto a los derechos civiles de todos los ciudadanos» a la delegada del Gobierno español en Nafarroa, Elma Saiz.
Según explica en su nota, al encuentro han asistido los padres de Josu Esparza y la parlamentaria de Bildu Bakartxo Ruiz, y en el mismo han denunciado que el joven navarro «ha sido encarcelado y dispersado como castigo por su trabajo político, desarrollado pública y notoriamente en el movimiento pro amnistía».
Eleak afirma que los gobiernos español y francés no pueden hacer «oídos sordos» a las voces que, ante «un nuevo escenario en Euskal Herria, exigen dejar de lado fórmulas y métodos del pasado».
Soria recalca que los estados español y francés «no pueden pretender que la sociedad permanezca de brazos cruzados» ante situaciones como la de Josu Esparza y de ahí que más de 600 personas hayan decidido autoinculparse «asumiendo como propias» las actividades que se le imputan.