Miembros de colectivos sociales de Bizkaia se han concentrado en tanga ante las oficinas de la calle Alameda Mazarredo donde han revelado que el servicio vasco de empleo está derivando de forma obligatoria a las familias perceptoras de las prestaciones sociales a la Empresa de Trabajo Temporal Randstad, un “derroche de dinero público” que le ha costado a Gasteiz 224.200 euros.
Varios miembros de colectivos sociales de Bizkaia desnudos ataviados unicamente con un tanga han participado esta mañana en una concentración ante la sede de Lanbide de la calle Alameda Mazarredo para denunciar que el organismo dirigido por el Gobierno de Lakua ″tanga y vulnera los derechos sociales″.
Los participantes en la movilización de esta mañana han querido llamar la atención ante los ″recortes sociales promovidos por el Gobierno vasco y la deficiente asistencia que presta el Servicio Público Vasco de Empleo″. Además, han realizado una kalejira desde las oficinas de Lanbide hasta las oficinas centrales de la ETT Randstad.
El traspaso de la gestión de las prestaciones sociales de los servicios sociales municipales ‑y de los Departamentos de Acción Social de las Diputaciones- al nuevo INEM-Lanbide ″ha supuesto sumir en un autentico caos, y recortar los derechos sociales de las personas desempleadas o con empleos precarios″, que se acercan a este servicio público, han declarado mediante una nota los colectivos participantes en la movilización de hoy.
Según han indicado, existe una demora de más de un mes en la atención a las personas desempleadas y con empleos precarios que necesitan acceder a las prestaciones sociales para poder subsistir y llegar a fin de mes.
Además, ″se impide realizar la solicitud de inicio y apertura de expediente″, por lo que decenas de familias vizcaínas dejan de percibir las prestaciones sociales al no poder renovar su solicitud; o ven “extraviado” en Lanbide su expediente, el cual se encontraba en proceso de tramitación en el Departamento de Acción Social de la Diputación. En muchos casos, apuntan, se vuelve a exigir ″iniciar todo el proceso administrativo cuando se llevan meses de espera″.
Por si esto fuera poco, se está derivando de forma obligatoria a las familias perceptoras de las prestaciones sociales a la Empresa de Trabajo Temporal Randstad y, más en concreto, a sus oficinas de la calle Ledesma, para la realización de supuestos informes de empleabilidad e inserción socio-laboral.
Esta licitación ha supuesto un trasvase de dinero público a una Empresa de Trabajo Temporal; en concreto, “este derroche de dinero público le ha costado a Gasteiz 224.200 euros“, cuando Lanbide ya cuenta con un servicio propio de orientación laboral.
Estas iniciativas de Lanbide, y anteriores reformas para endurecer y recortar la cuantía de las ayudas sociales, ″esconden la intención de precarizar el mercado laboral″, denuncian.
El acto de hoy ha sido secundado por los colectivos Argilan, “Asamblea de Invisibles”, Berri-Otxoak (Barakaldo), Consejo de la Juventud de Euskadi, Danok Lan (Galdakao), Elkartzen, Mujeres del Mundo, Posada de los Abrazos y SOS Racismo.