Las ganancias por la producción de opio en Afganistán crecieron 133% el año pasado, a casi 1.400 millones de dólares, cerca de una décima parte del producto interno bruto (PIB) del país, informaron el viernes funcionarios de Naciones Unidas.
La Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) indicó en un reporte que enfermedades acabaron en 2010 con la mayoría de los cultivos, lo que resultó en un aumento en el precio.
Los campos de la planta regresaron en 2011 a los niveles anteriores a la plaga, pero el precio se mantuvo elevado.
Resulta difícil obtener estadísticas definitivas en Afganistán, país que aporta un 90% del opio del mundo, el principal ingrediente de la heroína.
La ONU y el Gobierno afgano han tratado durante mucho tiempo de erradicar del país el cultivo, que ha crecido con la presencia norteamericana en el país.
Las ganancias generadas por el opio también son utilizadas para ayudar a la insurgencia, financiando armas y equipo para el Talibán.