1. Conflicto político y solución democrática
Este conflicto político ha quebrado los derechos de nuestro pueblo. En el año en el que se cumplen el 75 aniversario del bombardeo de Gernika y el quinto siglo de la ocupación del Estado vasco (Navarra), Francia y España mantienen su opresión.
La solución democrática del conflicto deberá permitir todos los proyectos políticos, incluida la independencia. El pueblo tiene la palabra y la decisión.
2. La elección política de toda la izquierda abertzale
La izquierda abertzale ha adoptado un posicionamiento político renovado, recuperando la iniciativa política y consiguiendo objetivos políticos, afianzando la unión de fuerzas políticas, institucionales y sociales.
Seguiremos profundizando en la estrategia y adoptando pasos decisivos. La petición y el mensaje de la sociedad vasca así lo reclama. Para ser eficaces y llevar el proceso hasta el último puerto, tenemos que diversificar la fuerza del pueblo e ir todos juntos
El colectivo de presos políticos vasco nos adherimos firmemente a la estrategia política de la izquierda abertzale
3. La decisión de ETA
ETA ha tomado la decisión histórica de abandonar el camino armado. La lucha de ETA ha dejado al descubierto la opresión que sufre este pueblo, desnudando la naturaleza no democrática de los estados.
El Colectivo de presos políticos vascos da por superado el tiempo de uso de la lucha armada como herramienta, amparando y respetando la decisión de ETA.
4. Las referencias políticas de Anoeta, Gernika y Aiete
Coincidiendo con el planteamiento de Anoeta (2006) (sic) esperamos que ETA tome parte en una negociación con los Gobiernos para establezcer los pasos y los acuerdos sobre la salida de los presos.
Reconocemos el Acuerdo de Gernika (2010) como la principal solución integral.
Consideramos la Declaración de Aiete (2011) como la hoja de ruta para estructurar el proceso de solución del conflicto y el camino de negociación.
5. La situación política
La recolocación estratégica de la izquierda abertzale ha hecho dar un vuelco desde sus raíces a la situación política, agrupando fuerzas del pueblo y dando cuerpo al cambio político.
El comportamiento de los Estados se basa en el bloqueo y, a través de él, provocar resignación entre la sociedad vasca.
Para que los Estados den pasos en el proceso democrático tenemos que conseguir una acumulación de fuerzas más efectiva. Hagámonos dueños de la situación histórica y política que estamos viviendo. Es la hora. Tenemos que pasar a la ofensiva política, reactivando el capital político que hemos estado acumulando en estos largos años para alcanzar los objetivos. Es tiempo de lucha.
6. Política penitenciaria
La politica penitenciaria es una respuesta de estrategia de guerra. El colectivo de presos vascos le ha hecho frente con firmeza, condenando al fracaso las intenciones de los estados. Esta nueva oportunidad política también es fruto del resultado de la lucha del Colectivo de presos vascos: la lucha nos ha traído hasta aquí, la lucha nos hará libres.
En la nueva situación, la política penitenciaria se está empleando como muro contra el proceso democrático, utilizando a los presos políticos vascos como rehenes. Tiene como base la fractura de los derechos, provocando muertes y mucho sufrimiento. Todas las medidas excepcionales, entre ellas la dispersión y la cadena perpetua, hay que levantarlas cuanto antes para que se reconozcan los derechos que nos corresponden.
El arrepentimiento-delación solo es un camino para destruir militantes y personas, lo que despreciamos y rechazamos. Las presiones, el chantaje y el intento de doblegamiento deben cesar ya, igual que usar los beneficios penitenciarios para negar derechos.
Somos el reflejo del conflicto político y su salida va unida a una solución integral: Amnistía-Autodeterminación. Poner en el camino de la solución las razones del conflicto, junto con la salida de todos los presos y no la creación de nuevos. Tenemos que suprimir los obstáculos para la excarcelación, para participar junto a Euskal Herria y los ciudadanos vascos en el proceso político.
De aquí en adelante, el colectivo muestra su voluntad de dar nuevos pasos en el futuro, si se dan condiciones para ello.
7. Las otras consecuencias del conflicto
El pueblo vasco y Euskal Herria son victimas de la opresión. Parte y consecuencia del conflicto, los presos y los refugiados políticos. El conflicto ha creado damnificados y víctimas. Nos adherimos a la declaración hecha en Gernika en diciembre (sic).
Nos damos cuenta del dolor de múltiples lados, con toda responsabilidad, porque lo hemos conocido en nuestra piel y en la de nuestros allegados de generación en generación. Sin embargo, ser comprensivos no nos ciega, pues el dolor se usa a favor de unos objetivos políticos. Como los que utilizan el problema de las víctimas para eternizar el conflicto. Contraponen a las víctimas y a los presos en vez de dar una solución propia desde las raíces a los dos problemas.
Entender las raíces del conflicto que ha creado tanto daño, desde el punto de vista de cada uno, será una obligación necesaria. Un trabajo profundo y doloroso, hecho desde la veracidad y la libertad, con la voluntad y la resolución de superar el conflicto.
La solución deberá analizar las consecuencias y completarlas.
8. Compromiso
Hacemos un llamamiento a los gobiernos de España y Francia para que, con valentía y responsabilidad histórica, hagan uso de la oportunidad que tienen delante. Que entren en el camino de la solución democrática. España, Francia y Euskal Herria ganarán. El pueblo ganará.
El colectivo de presos vascos mostramos nuestra predisposición completa a hablar sobre la situación de los presos políticos vascos y sus demandas. Recientemente ha sido seleccionado el grupo de interlocutores para esas labores.
Animamos a la Comunidad Internacional a que multiplique la implicación de los últimos tiempos.
Amnistía-Autodeterminación
Euskal Herria en nuestro corazón
Junio de 2012»