A finales de 2011 ya denunciamos la supresión de esta ayuda a quienes lo solicitaran a partir de enero de 2012.
Ahora el gobierno español reduce la prestación de quienes consiguieron cobrarla, de 210 a 147€.
Y es que los 5.600 vascos que todavía cobran en la llamada renta básica de emancipación, o subsidio de alquiler dirigido a jóvenes de 22 a 29 años con contrato laboral, verán recortada su cuantía en un 30%. Si hasta ahora ingresaban 210 euros mensuales, en adelante percibirán 147, tal y como establece una disposición publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE).
Así lo han confirmado fuentes del Gobierno vasco, que gestionan esa prestación económica en la CAV a través del Departamento de Vivienda. Como decíamos, no es la primera vez que el Ejecutivo de Mariano Rajoy mete la tijera en la renta de emancipación. En enero pasado puso fin a la concesión de nuevas ayudas de 210 euros con un propósito: cerrar definitivamente la persiana y dejar que los subsidios que estaban vigentes en ese momento fueran expirando poco a poco, a medida que se agotara el plazo máximo de cuatro años para el que se concedieron.
Cuando se dejaron de aprobar más expedientes había 6.600 perceptores en la CAV, que representaban un gasto anual de 16 millones de euros para las arcas de las Administración central. Siete meses después, explicaron en la consejería vasca de Vivienda, un millar de ellos ya ha dejado de cobrar el dinero. Y los que quedan ingresarán 63 euros menos cada mes.
Colectivos sociales lamentamos en enero pasado la eliminación de la renta de emancipación, que fue introducida en 2008 por la entonces ministra de Vivienda, Carme Chacón. No obstante la iniciativa solo había sido «un parche» que no resolvía «el grave problema» del acceso de los jóvenes a un alojamiento digno. «Más allá de esa renta es necesaria una política integral».
Varios expertos han asegurado que es una equivocación haber incluido la renta de emancipación en el paquete general de recortes del Gobierno del PP, ya que «ese tipo de ayuda es la que funciona en Europa desde hace medio siglo».
La consejería de Vivienda del Gobierno Vasco ha señalado que en estos momentos carece de recursos económicos para sustituir de golpe la renta de emancipación, una fórmula que, desde su punto de vista, ha funcionado «razonablemente bien».