La criminalización de la protesta en Iruñea es una constante, y aumenta durante los Sanfermines. Como dato, alrededor de 30 personas se encuentran inmersas en procesos judiciales que les podrían llevar a la cárcel por exhibir pancartas e ikurriñas o participar en protestas ante la corporación municipal.
Pero quizás el caso más sangrante es el de los 5 jóvenes imputados por los incidentes ocurridos durante el Riau Riau del 2012, quienes próximamente podrían ser juzgados. Para tres de ellos se piden hasta 8 años y medio de prisión, mientras que para otros dos la fiscalía solicita 3 años de cárcel.
Aquel año, el alcalde de Iruñea Enrique Maya, se empeñó en recuperar el Riau Riau en contra de la opinión de los principales actores de la fiesta y de buena parte de la oposición del Ayuntamiento, que no veía condiciones sociales para ello.
El Riau Riau fue suspendido tras unos pequeños incidentes, y hasta 9 personas fueron detenidas. A decir verdad, apenas se produjeron unos forcejeos y algunos golpes entre personas que participaban en el Riau Riau, pero ello fue suficiente para la suspensión del acto. Todas las personas detenidas (menos una que fue apartada del proceso) eran de ideología abertzale, a pesar de que en las diferentes peleas participó mucha más gente y que algunas de ellas fueron provocadas por policías de paisano e incluso por los propios agentes de policía municipal, que llegaron a utilizar porras extensibles de metal, un armamento muy peligroso.
El juicio no tiene fecha, pero existe en marcha una campaña de criminalización contra los jóvenes imputados desde algunos medios de comunicación e instituciones. El ejemplo más claro es el de Mikel Auza, profesor de profesión, y cuya foto defendiéndose de una agresión a sido utilizada para acusarle en medios como Diario de Navarra de ser el principal promotor de un supuesto plan de boicot al Riau Riau. Incluso el Departamento de Educación ha solicitado personarse en la causa contra él. Aquel día, Mikel Auza, se enzarzó en varias peleas y discusiones, como se puede apreciar en las imágenes, pero fue él el agredido y quien se tuvo que defender ante los diferentes golpes que le proinaron personas sin identificar y que por supuesto, no han sido imputadas en la causa.
El sábado, concentración
Para protestar por estas peticiones fiscales y reivindicar unas fiestas sin represión, este sábado día 5, a las 12:30 (Delegación del Gobierno ha cambiado en el último momento la hora de la convocatoria) en la Plaza del Ayuntamiento, se celebrará una concentración y un acto político.