Medios israelíes ha señalado que fuerzas terrestres del Ejército israelí han comenzado a retirarse de la Franja de Gaza después de los duros golpes que han sufrido a manos de la Resistencia palestina.
Según diversas informaciones, los vehículos militares israelíes se han retirado de las localidades de Alzenh y Juzaa, cerca de la ciudad de Jan Yunis, al sur de la Franja de Gaza.
El diario Haaretz señaló que el gabinete israelí ha decidido retirar a las tropas de Gaza debido a “consideraciones políticas y de seguridad” renunciando así al objetivo de derrotar a Hamas que se ha revelado como demasiado costoso en bajas para los israelíes.
El Ejército de ocupación israelí confirmó el domingo por primera vez oficialmente que varias de sus unidades estaban abandonando la Franja de Gaza, pero no precisó el número de soldados que estaban emprendiendo la retirada. El portavoz militar israelí Peter Lerner, dijo que se trataba de una “retirada parcial”.
“Nos estamos retirando de ciertas zonas en el interior (de Gaza)”, señaló.
La retirada israelí ha dado pie al regreso de los habitantes de ciertos sectores a sus hogares.
El primer ministro israelí, Benyamin Netanyahu, dejó entender el sábado por la noche que la agresión contra Gaza estaba entrando en “una nueva fase” y afirmó que la operación terrestre “terminará probablemente en las próximas 24 horas”.
Sin embargo, en un intento de minimizar el fracaso, Netanyahu pretendió que “la misión prosigue. No ha terminado”.
Por su parte, Hamas ha contestado que continuará su resistencia contra la ocupación sionista. El jefe del Buró Político de Hamas, Jalid Meshaal, ha afirmado que no aceptará ningún cese el fuego sin una salida de las tropas de ocupación israelíes desplegadas en Gaza.
“Toda presencia de las fuerzas israelíes es una agresión”, señaló. Él manifestó que Hamas tenía derecho a la autodefensa y que así se lo había hecho saber al secretario de Estado estadounidense, John Kerry.