El ex primer ministro del gobierno de Hamás en Gaza Ismail Haniya ha asegurado este martes que en las próximas horas se anunciará un alto el fuego permanente que supondrá “la victoria de la resistencia palestina”.
“Estamos a las puertas de un acuerdo que premiará la constancia y el buen hacer de nuestra resistencia armada”, afirmó Haniye, citado por la agencia de noticias local Al Ray, vinculada al movimiento islamista.
La Autoridad Nacional Palestina (ANP) y Egipto han confirmado que existe una propuesta que podría entrar en vigor a las 19.00h de este martes (18.00 hora española).
Según una fuente del Ministerio de Información palestino, este acuerdo será tratado por el liderazgo palestino durante la reunión de emergencia convocada por el presidente de la ANP, Mahmud Abás.
Jaled al Bastah, representante en las negociaciones en El Cairo del grupo radical Yihad Islámica, afirmó, por su parte, que el acuerdo supondrá el levantamiento del embargo económico y el asedio militar que Israel impuso a la Franja en 2007. “Egipto nos ha informado de que Israel ha aceptado el acuerdo de alto el fuego conforme a las demandas y las condiciones de los palestinos”, escribió en un mensaje enviado a través del teléfono móvil.
De acuerdo con fuentes cercanas a la delegación palestina, el alivio del bloqueo será inmediato, con la ampliación de la zona de pesca, mientras que la discusión sobre la apertura del puerto y el futuro aeropuerto de Gaza se ha aplazado un mes. La propuesta incluye, además, la reapertura de la frontera con Egipto y la financiación para la reconstrucción de la Franja, según las citadas fuentes.
En la misma línea, Musa Abu Marzuq, representante de Hamás en la delegación palestina que negocia en El Cairo el cese permanente de las hostilidades en Gaza, afirmó que solo se está a la espera de los últimos flecos. “Estamos esperando solo la declaración final, que supondrá el punto de partida para el final de la agresión israelí contra nuestro pueblo”, afirmó.
Hasta el momento, ninguna fuente israelí se ha pronunciado sobre este anuncio. Y la ministra de Justicia israelí, Tzipi Livni, ha asegurado que el fin del conflicto en Gaza no debería suponer “ningún logro político para Hamás”.
Minutos después de que las milicias palestinas anunciaran la existencia de un acuerdo de alto el fuego inmediato con Israel, al menos tres palestinos han perdido la vida en un ataque israelí en Gaza, informaron fuentes medicas.
Ashraf al Quedra, portavoz del Ministerio de Salud palestino en la Franja, explicó que las tres víctimas mortales fueron alcanzadas por misiles en la ciudad meridional de Rafah, fronteriza con Egipto.
El intercambio bélico entre ambos contendientes se intensificó poco después del citado anuncio, con un aumento de los bombardeos israelíes y del lanzamiento de cohetes palestinos contra el sur de Israel. Intentos anteriores Las hostilidades entre palestinos e israelíes se reanudaron hace una semana después de que ambos contendientes se acusaran mutuamente de haber llevado el diálogo a un callejón sin salida y de haber roto la tregua entonces en vigor. Desde entonces, cerca de un centenar de palestinos y un niño israelí han muerto a causa de los bombardeos del Ejército de Israel y el lanzamientos de cohetes y morteros palestinos desde el interior de la Franja en esos siete días. En los cincuenta días de enfrentamientos han perdido ya la vida 2.120 palestinos, en su gran mayoría civiles y una cuarta parte de ellos niños. En el conflicto también han perecido 64 soldados israelíes en combates con milicias palestinas, dos civiles israelíes ‑uno de ellos un menor- y un trabajador asiático. Además, y de acuerdo con las cifras de la ONU, más de 450.000 personas se han visto obligadas a abandonar sus casas y a convertirse en desplazados internos, cifra que supone una cuarta parte de la población de la depauperada Franja.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, aseguró el domingo que Israel no pondría fin a su ofensiva bélica hasta que no hubiera conseguido lo que denominó como “sus objetivos de seguridad” y advirtió de que las operaciones militares podían prolongarse hasta septiembre.