Resumen Latinoamericano/Russia Today - “La guerra de EE.UU. contra el Estado Islámico es una gran mentira”. Así empieza su artículo Michel Cossudovsky, un economista canadiense, escritor y profesor emérito de la Universidad de Ottawa, Canadá, publicado en la página web del Centro de Investigación sobre la Globalización.
Después de investigar centenares de documentos, el profesor saca una serie de conclusiones que a primera vista parecen una paradoja: toda la política de EE.UU. relacionada con la lucha contra el terrorismo en realidad sirve a los intereses yihadistas que, a su vez, están apoyados y financiados por el Gobierno estadounidense. En 26 conceptos Cossudovky explica cómo ha llegado a esta opinión.
Historia de Al Qaeda
1. Al Qaeda y sus organizaciones afiliadas recibieron todo el apoyo de EE.UU. hace casi 40 años, al iniciarse la guerra afgano-soviética (1979−1989).
2. En un período de diez años comprendido desde 1982 hasta 1992 unos 35.000 yihadistas procedentes de 43 países fueron reclutados para la yihad afgana en los campos de entrenamiento de la CIA (Agencia Central de Inteligencia de EE.UU.) en Pakistán. Miles de anuncios pagados por EE.UU. aparecieron en los medios de comunicación de todo el mundo para motivar a los jóvenes a unirse a la yihad.
3. La Universidad de Nebraska, EE.UU., publicó libros yihadistas para difundirlos en las escuelas de Afganistán de aquel tiempo.
4. Osama bin Laden, el terrorista “número uno” para EE.UU., fue reclutado por la CIA en 1979 cuando inició la guerra yihadista patrocinada por EE.UU. contra la Unión Soviética en Afganistán. Tenía 22 años al terminar su entrenamiento en el campo de guerrillas de la CIA.
5. Ronald Reagan, cuadragésimo presidente de EE.UU., llamó a los terroristas de Al Qaeda “luchadores por la libertad”. El Gobierno estadounidense suministró armas a las brigadas islámicas para su lucha contra la Unión Soviética. El cambio de régimen llevó a la desaparición del gobierno secular en Afganistán.
El Estado Islámico (EI)
6. El Estado Islámico fue inicialmente una entidad afiliada a Al Qaeda creada por la inteligencia estadounidense con el apoyo del MI6 británico, el Mossad de Israel y las inteligencias de Pakistán y Arabia Saudita.
7. Las brigadas del EI participaron junto con EE.UU. y la OTAN en la guerra civil en Siria dirigida contra el Gobierno de Bashar al Assad.
8. La OTAN y los altos funcionarios turcos fueron los responsables del reclutamiento de los militantes del Estado Islámico y al-Nusra (grupo radical islámico sirio) desde el inicio del conflicto en Siria en el 2011.
9. En las filas del EI hay una representación del Ejército y la inteligencia de los estados occidentales. Así, el MI6 británico ha participado en el entrenamiento de los rebeldes yihadistas en Siria.
10. En una información de CNN de 9 de diciembre de 2012 un alto funcionario de EE.UU. y varios diplomáticos de alto rango admitieron que “EE.UU. y algunos aliados europeos entrenan a través de especialistas militares a los rebeldes sirios para que se hagan con arsenales de armas químicas en Siria”.
11. La práctica del EI de las decapitaciones formaba parte de los programas de entrenamiento de yihadistas implementadas en Arabia Saudita y Qatar.
12. Arabia Saudita, aliado de EE.UU., liberó de sus cárceles a miles de reos con condena a condición de que se unieran al EI para luchar contra Assad en Siria.
13. Israel ha apoyado a las brigadas del EI y al-Nusra en los Altos del Golán, un territorio disputado por Israel y Siria. En febrero de 2014 el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, visitó un hospital en la frontera con Siria donde apretó la mano a un rebelde sirio herido.
Siria e Irak
14. El EI actúa como avanzadilla militar de los intereses de EE.UU. y sus aliados ya que causa destrucción y caos político y económico en Siria e Irak.
15. El actual senador de EE.UU. John McCain se ha reunido con los líderes terroristas yihadistas, militantes del EI incluidos, en Siria.
16. El Estado Islámico, que supuestamente resiste los bombardeos de la coalición liderada por los EE.UU., continúa recibiendo ayuda militar secreta de los estadounidenses.
17. Los bombardeos de EE.UU. y sus aliados no van dirigidos al Estado Islámico sino a la infraestructura económica de Irak y Siria incluidas fábricas y refinerías de petróleo.
18. El proyecto del califato cabe perfectamente en la agenda de la política exterior de EE.UU. desde hace muchos años para repartir Irak y Siria en tres territorios separados: una república de Kurdistán, un califato islamista sunita y una república árabe chiíta.
“La guerra contra el terrorismo”
19. “La guerra contra el terrorismo”, una campaña de EE.UU. iniciada en 2001 y apoyada por algunos miembros de la OTAN, se presenta como “un choque de civilizaciones” cuando en realidad persigue objetivos económicos y estratégicos.
20. EE.UU. apoyó de manera secreta a diversas entidades afiliadas de Al Qaeda en Oriente Medio, África Subsahariana y Asia para crear conflictos internos y desestabilizar a los países independientes.
21. Entre tales grupos se puede nombrar a Boko Haram en Nigeria, el Grupo de Combate Islámico de Libia o Jemaah Islamiya en Indonesia.
22. Las organizaciones afiliadas a Al Qaeda en la región autónoma de Xinjiang Uigur, China, también reciben apoyo estadounidense. El objetivo declarado de estas entidades yihadistas es establecer un califato islámico en el oeste de China.
“Nuestros” terroristas
23. La paradoja consiste en que mientras el EI ha crecido gracias al apoyo estadounidense, el objetivo “estratégico” de EE.UU. es la lucha contra el islamismo radical del grupo yihadista.
24. La amenaza terrorista es una creación puramente estadounidense que es promocionada por otros gobiernos occidentales y medios de comunicación. Bajo el supuesto objetivo de la protección de la vida de sus ciudadanos se violan las libertades civiles y la privacidad.
25. La campaña antiterrorista contra Al Qaeda y el Estado Islámico ha contribuido de manera drástica a la “demonización” de los musulmanes, a los que se asoacia con las crueldades de los yihadistas.
26. Cualquiera que cuestiona “la guerra contra el terrorismo” es declarado terrorista y sometido a las numerosas leyes antiterroristas aprobadas en la última década en EE.UU.