Llega una nueva edición de Villalar, en un contexto de gran sufrimiento para la mayoría de la población provocado por la profundización del cambio de modelo social que padecemos, pero también de grandes oportunidades de cambio y transformación.
En Castilla nos encontramos ante un nuevo ciclo de ascenso de las movilizaciones, y aunque estas no tienen de momento la amplitud cuantitativa de los dos últimos años, tienen un calado y homogeneidad política mucho mayor y una preparación organizativa más elevada. Los nuevos instrumentos político-electorales no han dado los frutos esperados, y lejos de alejar a la gente de la calle, buena parte del activismo real sigue en la dinamización de la movilización popular. Desde el movimiento comunero del siglo XXI apoyamos y participamos en candidaturas municipales de diversas ciudades, pueblos y villas de Castilla, planteando que la participación electoral puede ser de utilidad solo si se enmarca en el contexto global de la lucha por el cambio de Régimen. La experiencia histórica de las últimas décadas en nuestra tierra y en el conjunto del Estado Español pone claramente de manifiesto que las únicas victorias que se consiguen, mayores o menores, son fruto de la movilización popular en la calle, y que sólo habrá auténticos cambios favorables a las clases trabajadoras y a los Pueblos bajo jurisdicción del Estado si se profundiza en la construcción del movimiento, la organización y la movilización del pueblo. Es por ello que a la vez que participamos en diferentes candidaturas electorales, nuestra principal línea de trabajo sigue consistiendo en trabajar activamente en los diferentes espacios, actividades y movilizaciones existentes, en particular en aquellas que son impulsadas por la Coordinadora 25S o las Marchas de la Dignidad.
Somos conscientes de las grandes oportunidades históricas que existen para la ruptura con el Régimen postfranquista del ’78, así como de las dificultades a superar. El movimiento popular castellano continúa desarrollándose, tenemos claro el papel que debemos jugar en este contexto, y es con esa perspectiva y con esa responsabilidad con la que venimos afrontando también las diferentes actividades comuneras que se vienen realizando en los últimos meses (como el homenaje a María Pacheco en Toledo, el realizado por primera vez en la historia en Oporto, el II Homenaje comunero en Mora, el Homenaje al Empecinado en Burgos, o la celebración del Día Nacional de Castilla en Villalar), que nos permiten contribuir en la recuperación de la memoria histórica de lucha y resistencia del pueblo trabajador castellano así como avanzar firmemente en la construcción de la Primavera Comunera que necesitamos,
¡Te animamos a participar en las actividades programadas en Villalar por las diferentes organizaciones del movimiento popular castellano! ¡La Primavera comunera la construimos entre todas y todos!