x BorrokaGaraia
Hace cuatro años en el 2012 escribí cuáles eran los en mi opinión peligros del proceso de fundación de Sortu de asentarse diversos planteamientos y formas de trabajo. Lo que en definitiva no me hubiera gustado en aquel tiempo que cobrara forma. Estos son los cinco puntos que anoté:
- No me gustaría que Sortu fuera el punto de encuentro de ninguna estrategia sino el punto de encuentro de los independentistas y socialistas de este país que diseñan estrategias, las compartan o no compartan en diferentes grados. Pudiendo modificarlas, eliminarlas o crear nuevas. Sin ningún tipo de límite ni de barrera.
- No me gustaría que Sortu fuera homogénea. Ya que la izquierda abertzale no lo es. Conviven sectores posibilistas y socialdemócratas, con socialistas revolucionarios, marxistas e incluso libertarios. Buscar la cohesión ideológica global en la unidad popular hace que los mínimos común denominadores a acordar se conviertan a la larga en máximos.
- No me gustaría que Sortu promocionara el personalismo ni el discurso único. Una de las taras históricas que además cada día es de más peso es la creación de autómatas o loros de estructura que se limitan a trasladar información de un lado a otro sin análisis por el camino.
- No me gustaría que Sortu intentara abarcar más de lo que es. No me gustaría que Sortu fuera igual a MLNV. El MLNV es un movimiento político de liberación nacional y social con trabajo en diversos ámbitos, con diversas organizaciones. Romper la flexibidad organizativa y seguir un modelo clásico burgués de partido aunque se tengan buenas intenciones está abocado a ser parásito de las dinámicas populares y centrado en un ombliguismo institucional y electoral siendo el camino directo más rapido hacia la integración en el sistema.
- No me gustaría que Sortu fuera el centro de nada sino el receptor de todo. Un Sortu endógeno a todos los niveles pondría al servicio de una estrategia institucional limitada por el sistema el caudal de lucha popular y la energía del movimiento popular en buena parte neutralizandolas.
Pasados cuatro años desde entonces cabe señalar que prácticamente casi todo lo que no me hubiera gustado en aquel tiempo que cobrara forma ha ido cobrando forma de una manera bastante escrupulosa. Siendo este aspecto una de las claves que a mi entender explica la situación actual de crisis de la izquierda abertzale y de bloqueo y retroceso general del proceso de liberación nacional y social.
Pese a que la teoría dijera lo que dijese, el proceso abian de alguna manera según algunas interpretaciones quería dar respuesta a esta situación de crisis de la izquierda abertzale y según otras asentar la apuesta y aunar fuerzas entorno a ella sin cambios trascendentales, pasada la tercera fase del debate hay que decir que los resultados no solo no han puesto los mecanismos para superar esa situación de crisis sino que posiblemente se hayan puesto las bases de un colapso aun mayor del proyecto de la izquierda abertzale como movimiento de liberación y el enquistamiento del impasse de la situación política.
Las consecuencias políticas del continuismo a tres a nivel organizativo y la acaparación y absorción de poderes en Sortu asienta el camino recorrido en los últimos años y agrava hasta su límite todas las consecuencias negativas que ha tenido:
- Definitivamente se produce la desaparición ya total de la Unidad Popular de la izquierda abertzale llevando el proceso de rodillo y homogenización de las diversas expresiones y espacios políticos diferentes que serían trasvasados por filtro y embudo a EH Bildu mediante Sortu.
- Ernai a corto o medio plazo tendrá que enfrentarse al peligro absoluto de convertirse en juventudes de partido y perder por tanto su carácter de organización revolucionaria como su autonomía en un proceso de dependencia constante. En LAB por su parte ese proceso de dependencia tenderá a acentuarse.
- La izquierda abertzale finalmente deja de ser un movimiento político de liberación para pasar a ser un partido político institucional y centralizado que se otorga la dirección y centralización de todos los ámbitos de lucha en Sortu, suprimiendo la unidad popular de la izquierda abertzale y desde un solar eminentemente institucionalista, por tanto incapaz de dar cuenta de todos los retos y también incapaz de aunar a todo el caudal social y político de la izquierda abertzale.
- Este proceso organizativo y de dirección es calcado a casi todos los vividos por los ex-movimientos revolucionarios y de liberación en Europa que dieron paso al eurocomunismo y propuestas similares que colapsaron y se integraron en el sistema hace muchos años.
- El propio Sortu con el tiempo tenderá lentamente a su desaparición una vez asentada y desplegada EH Bildu como eje central del institucionalismo y prioritario en la estrategia y desmantelado para tal fin el MLNV troncal.
Un comentario
Egixe. Sortu eta nazio askapeneako mugimendu ezin diz gauza bat eta bera ixan. Horrek, alojamiento anitzetan banatzen dan fronti, alderdi baten interesan menpe lagako leuke.