#ChileResiste·
Un puño sostiene el peso de más de 46 años de servidumbre, pero que al liberarse dedo a dedo, se acompaña de un salto evasivo vestido de uniforme y desnudo de miedo; atraviesa un torniquete como cruzando de una época a otra donde un territorio sonámbulo es despertando por sonidos de disparos, color a sangre adolescente y un olor a gas pimienta que alcanza a quemar la piel pero no logra tocar los pulmones que parecieran haber estado conteniéndose para este momento, el momento de respirar libertad …a cara cubierta, pero los ojos mas abiertos que nunca.