Por María Torrellas, Resumen Latinoamericano 23 de marzo de 2020
Kihili Kunturpilku es una poeta filósofa y como ella misma dice: «cocreadora de la divinidad. Hago poesía, y haciendo poesía le doy salida a mi vocación, y por lo tanto me deleito en algunos de mis placeres y realizo ser la piedra en el zapato, la pulga en la oreja y la garrapata en el culo del sistema». Vamos a presentar el primero de sus trabajos en forma de entrevista que le realizáramos en La Plata, donde reside actualmente, de sus poemas de decolonización , analizando lo que ha dado en llamar EL COLONIAJE.
-Uno de los pilares en los que trabajas y contra lo que combates es el COLONIAJE. ¿Qué significa para vos ese concepto?
–El Coloniaje es como un estado naturalizado de la ignominia. Quiero que sepas que ya me siento fuertemente tentada, impulsada, jalada, a empezar a usar palabras de aquellas que las redes sociales censuran hoy en día.
El Coloniaje es eso, es como un estado donde es natural que haya colonia, supremacistas que vivan de la sangre, las lágrimas y el sudor de los inferiores.
Un estado en el que supuestamente nosotros somos la raza o la especie superior y ninguna de las especies inferiores necesita luchar por la vida, a menos que sea domesticada, y nosotros la especie superior tenemos que matarnos para poder ganarnos una cosa que allá afuera llaman vida, una porquería.
No tiene sentido, no tiene pies ni cabeza. El Coloniaje existe porque nosotros le servimos y lo mantenemos, lo sostenemos y contribuimos, tributamos en su altar, le pagamos para que exista y para que nos joda.
Entonces, el coloniaje es un estado de la mente en el que se lame la pata que te patea, la bota que te patea, y no necesitas estar de rodillas lamiendo la bota, también puedes estar cómodamente sentado en tu poltrona mirando la telenovela del día.
-¿Es válido asociar Coloniaje con la conquista en el Abya Yala? ¿En qué época se puede decir que se insitucionaliza?
-En el Abya Yala sí, desde hace 518 años. Pero, no es un fenómeno nuevo en la faz de la gloriosa Madre Tierra, de la Globeta Madre Tierra. El Coloniaje inicialmente, y por naturaleza, es simbólico: Te ponen a pensar en conceptos ajenos, te ponen a actuar. De hecho, el primer acto de la invasión fue clavar el palo de la bandera de los Castilla y decir que se toma posesión en nombre de los reyes, de algo que ni siquiera se sospechaba qué podría ser.
Necesariamente está desde antes de nacer. El aprendizaje, la Educastración, no se inicia en la escuelita, ni siquiera en las familias nuclear. La Educastración viene imprimiéndose en nosotros desde una de nuestra recontra bistataratatara abuela, 24 generaciones y algo más. No podemos permitir que supere la 25 generación porque se volverá natural, en el subconsciente colectivo será así como debe ser la vida.
-Dentro de lo que fue la conquista, donde nos vamos a centrar porque estamos dentro del Abya Yala, y sos de Colombia, sos indígena.
-Soy mestiza, reivindico el mestizaje. La conquista y la invasión ya se habían dado, se dieron en casi todos los continentes. El único pueblo sobre la faz de la Tierra en la actualidad que no ha sufrido tasajos históricos es el chino. Es un árbol tan grande y tan grueso que ha sufrido algún tasajito por acá, pero no han tasajiado, no han derribado el árbol cultural de la China nunca, ninguna invasión ha podido hacer eso.
-¿En la conquista nace la supremacía?
‑No, aquí vienen los supremacistas, ellos ya lo eran. Eso también es una cosa compleja y densa: Es una característica conceptual del esquema conceptual colonial.
Ellos son superiores porque tienen la sangre azul, porque tienen la materia gris de un color de mierda, porque tienen la conciencia del color de lepra, por lo que sea. Entonces, los supremacismos se desarrollan y se manifiestan contextualmente.
Puede que seamos entre medio mestizos, medio blancos, uno más indio de mierda que el otro, más patirrajado que el otro. Así es, porque el supremacismo, y todos los ismos, son absolutamente machistas, patriarcalistas, capitalistas y todos los istas.
Por eso, se hace un poco complejo englosar porque es que todo es una sola cosa. Ahí hay también muchas diferencias culturales, como es colonialmente quien soy yo como animal, bestia biológica sexual genital andando y cantando, jodiendo y cogiendo. Eso también tiene mucho que ver, todo, no hay un pequeño aspecto de la vida que se le escape a la invasión colonial, lo permea todo, porque, ellos sí saben desde donde pueden imponer, viene impuesto desde la culpa.
-Hablas de los dos pilares de la conquista que son la CULPA y el MIEDO, y que nos persiguen hasta la actualidad.
-Primero, hablo de cuatro patas del COLONIAJE, bicho cuadrúpedo, obvio Macrobio, que son: la Inculpación, la Educastración, la Economiseria y la Farmafia.
La culpa lo único que puede producir es miedo, y el miedo, de una u otra manera, lo que produce es basura, el basurero en el que viven.
La Internet con su pornografía virtual.
La curia con su pornografía real.
La Reserva Federal con su especulación legal.
La sociedad “decente” con su hipocresía moral.
Y, hasta la estratosfera, actualmente, en tiempo real, es un basural.
Sobreabunda la basura, moral, ética y de todas las clases.
Obvio Macrobio, material también.
–También hablas del exceso de consumo, del expolio, justamente de donde viene esa basura.
-Pues, otra de las características inherentes a la invasión, es la codicia. Nace de ella.
‑O, más bien, es al contrario: La Invasión es consecuencia lógica y consustancial de la codicia.
– La codicia tiene una característica natural, su esencia, su naturaleza misma, es la insatisfactibilidad.
‑No es invento mío.
‑La codicia es insatisfactible si yo lo digo y si no lo digo, también.
‑Entonces, ante gente insatisfactible, codiciosa, plena de nanocodicias, y encima con miedo de haber sido inculpada, ¿qué le puede esperar?,
‑Tampoco puede generar más nada.
– No puede dar un mundo mejor. Ese es el mundo.
Hay temas, como esos de la codicia y del miedo, que no son explorados. Son investigados por altos especialistas del psicoanálisis o tal, pero la exploración no es instalada a nivel de la opinión pública. Y si son explorados, lo son bajo nombres anestesiantes; bajo sofismas, como pueden ser los “deseos”; el “yoqueyo-yoqueyo”.
Por eso no hay mucho con qué se pueda definir. No hay un lenguaje desarrollado para eso.
Ahora, la realidad colectiva es el resultado Mathésico del nivel de cultivo o desarrollo de la conciencia de la masa acrítica, para decirlo adornado de alguna manera. No puede haber otro.
Ese mundo que está allá afuera, absolutamente esquizofrénico, donde hay gente que, frente a un supuesto dios todopoderoso, teme por la estabilidad de sus intereses financieros; paga para que educastren a sus hijos y, al mismo tiempo, también paga para que los torturen, no puede ser de otra manera.
No se puede producir algo mejor que eso, si se parte de las mismas premisas, filosóficas, conceptuales, las que quieras, porque esa es Mathésis.
-Ahora tenemos el ejemplo del CORONAVIRUS.
-Un mundo en el cual, la clase media se ve a sí misma como “Todo el mundo”.
Entonces la èlite grita: “¡¡¡¡CORONAVIRUS!!!”! y “todo el mundo” queda secuestrado en sus casas.
Quienes carecen de casa, que son un inmenso gentío, no cuentan.
Les dicen: “CUARENTENA” y, quienes pueden, se toman vacaciones.
Se “necesita” mantener la higiene y cada quien cree que la solución es acaparar los insumos.
En el fondo, esa clase media desea que “los demás” desaparezcan.
El “Yoismo”, el individualismo, la mezquindad, son el común denominador de ese Estado de Inconciencia.
¿Cómo se podría esperar un mundo mejor?
“Creer” que se puede obtener algo mejor, desde esos niveles de abyección inhumana, sería una expresión de nuestra propia incoherencia.
Kihili Kunturpilku tiene un canal de youtube, y un facebook con su nombre.
Trascripción: Ana Guillermina R. Iturralde