Bolivia. Al borde del estallido social frente al coronavirus (videos)

Boli­via. Al bor­de del esta­lli­do social fren­te al coro­na­vi­rus (videos)

Tabla de contenidos

Por Veró­ni­ca Zapa­ta, Resu­men Lati­no­ame­ri­cano 2 de abril de 2020

En el depar­ta­men­to del Beni rom­pen la cua­ren­te­na por­que la gen­te tie­ne hambre. 

El día mar­tes 31 de mar­zo, la pobla­ción de Ribe­ral­ta y Tri­ni­dad, del depar­ta­men­to del Beni, al nor­te del país, cer­ca con la fron­te­ra con Bra­sil, deci­dió rom­per la cua­ren­te­na y salir a las calles a recla­mar el cum­pli­mien­to de la entre­ga de la canas­ta fami­liar que pro­me­tió el gobierno de fac­to, y que no ha cum­pli­do has­ta la fecha.

La pobla­ción se con­vo­có para mar­char en pos de hacer oír sus recla­mos para exi­gir comi­da y tra­ba­jo. Los mili­ta­res fue­ron reba­sa­dos y no pudie­ron con­te­ner a la gen­te que no pue­de cum­plir con la cua­ren­te­na debi­do a que se ven obli­ga­dos a salir a bus­car comi­da. Recor­de­mos que, en Boli­via, un alto por­cen­ta­je de su pobla­ción vive de la ven­ta ambu­lan­te y sus empren­di­mien­tos, y depen­de de ello para subsistir. 

El sec­tor de mono taxis­tas avan­zó en la mar­cha a boci­na­zos, recla­man­do que les dejen tra­ba­jar al menos medio día, ya que argu­men­ta­ban que el gre­mio vive al día. Una seño­ra de Tri­ni­dad exi­gió: “Que la pre­si­den­ta no se olvi­de de su pue­blo, por­que aquí se la apo­yó. Aho­ra no tene­mos que comer, no nos dejan tra­ba­jar y nues­tros hijos nos piden todos los días pan”. Beni es el depar­ta­men­to don­de nació Jea­ni­ne Áñez y don­de tuvo un apo­yo polí­ti­co impor­tan­te en el pasa­do, que empe­zó a res­que­bra­jar­se hace un tiem­po y con la lle­ga­da de la pan­de­mia, se acen­tuó sin vuel­ta atrás. Otra seño­ra sos­tu­vo “Ten­go a mi hijo que tie­ne tres añi­tos y me dice que quie­re comer (…) No pue­do salir afue­ra (…) por­que ten­go mie­do que me deten­gan y si soy dete­ni­da: ¿Quién va a velar por mi hijo? Recla­mo que me dejen salir a bus­car comi­da para mis hijos, por­que si no se van a morir de ham­bre, no de la enfermedad”.

El alcal­de de Ribe­ral­ta, Enzo Roca se des­en­ten­dió de la situa­ción y afir­mó: “Esa no es potes­tad mía, es potes­tad de los mili­ta­res, ellos son los que hacen cum­plir el decre­to”. A lo que fue incre­pa­do: “Noso­tros ya no pode­mos espe­rar. Esto no es polí­ti­co, es el pue­blo boli­viano que no tie­ne que comer”.

En los recla­mos de las y los benia­nos obser­va­mos que se exi­ge poder tra­ba­jar media jor­na­da para sub­sis­tir, por­que la gen­te no tie­ne otra opción, aún expo­nién­do­se al con­ta­gio del coro­na­vi­rus. De par­te del gobierno de fac­to, no reci­ben nin­gu­na ayu­da eco­nó­mi­ca, el esta­do en Boli­via está total­men­te ausen­te para la gen­te humil­de. De esta for­ma, se hace impo­si­ble que la gen­te pue­da cum­plir con la cua­ren­te­na por mucho tiem­po más como úni­ca for­ma de evi­tar con­ta­gios median­te el ais­la­mien­to y el dis­tan­cia­mien­to social.

El gobierno de fac­to no solo no ayu­da eco­nó­mi­ca­men­te a la pobla­ción boli­via­na, sino que ade­más ha pro­fun­di­za­do la vio­len­cia hacia el pue­blo que se expre­sa en la dure­za de las mul­tas exce­si­vas por vio­lar la cua­ren­te­na, que osci­lan por enci­ma de los 100 dóla­res. Ade­más, han sido ame­na­za­dos con has­ta 10 años de cár­cel para quie­nes vio­len la medi­da como lo sos­tu­vo el minis­tro de fac­to, Artu­ro Muri­llo recien­te­men­te. Esta situa­ción social que atra­vie­sa Beni, se repli­ca en cada depar­ta­men­to de Boli­via, pero aún no ha explo­ta­do en todo el país y ello pare­ce cues­tión de tiem­po. Por este moti­vo se pide fuer­te­men­te la renun­cia de Jea­ni­ne Áñez median­te cace­ro­la­zos que todos los días el pue­blo boli­viano lle­va adelante.

Este pano­ra­ma de cri­sis polí­ti­ca y social, que ya exis­tía debi­do el gol­pe de esta­do, y que se ha pro­fun­di­za­do con la pan­de­mia, se suma a la cri­sis sani­ta­ria que atra­vie­sa el país don­de obser­va­mos que el gobierno de fac­to no cuen­ta con un plan estra­té­gi­co serio de cómo afron­tar la pan­de­mia, no se sabe la can­ti­dad de res­pi­ra­do­res que tie­ne el país, de test para detec­tar la enfer­me­dad, no hay capa­ci­ta­ción pro­fe­sio­nal al res­pec­to, no hay insu­mos y equi­pos de bio­se­gu­ri­dad para el per­so­nal de la salud, no hay cen­tros de ais­la­mien­to, no hay plan de repa­tria­ción serio, etc., y se da el lujo de recha­zar ayu­da de los médi­cos cuba­nos que el pue­blo boli­viano implo­ra. Tan­to el per­so­nal de salud como las y los boli­via­nos están sien­do aban­do­na­dos por el gobierno de fac­to a su suer­te y rei­na un “sál­ve­se quien pueda”.

No obs­tan­te, Jea­ni­ne Áñez no ha para­do de hacer cam­pa­ña pro­se­li­tis­ta y apro­ve­cha la cua­ren­te­na para empa­pe­lar y pin­tar las ciu­da­des con publi­ci­dad de su par­ti­do, lo que demues­tra que no se toma en serio la pan­de­mia y el poco valor que le da a la vida de las y los boli­via­nos. Has­ta el Dia­rio Pági­na 7 de la dere­cha, ha cri­ti­ca­do esta acti­tud soli­ci­tan­do la renun­cia a su candidatura.

Boli­via está fren­te a una encru­ci­ja­da, que solo podría abor­dar­se asu­mien­do la res­pon­sa­bi­li­dad que le com­pe­te a un gobierno de tomar las medi­das polí­ti­cas ade­cua­das para cui­dar a su pobla­ción, como por ejem­plo el gobierno argen­tino lo está hacien­do. Con­vo­car a la unión de los dife­ren­tes sec­to­res de la socie­dad, dejan­do de lado las dife­ren­cias ideo­ló­gi­cas para afron­tar un momen­to de emer­gen­cia social y sani­ta­ria, aun­que para ello Áñez care­ce de legi­ti­mi­dad por ser un gobierno que no sur­gió de la volun­tad popu­lar. Pare­ce lejano ver a Áñez asu­mir este reto que le com­pe­te como pre­si­den­ta de Boli­via. De cómo vaya evo­lu­cio­nan­do la cri­sis polí­ti­ca y la cri­sis sani­ta­ria en el país, se pue­den des­atar con­se­cuen­cias impre­de­ci­bles. Esta situa­ción, ade­más se encuen­tra enmar­ca­da en un con­tex­to en que E.E.U.U. no deja de velar por sus intere­ses en Boli­via, por lo que en enero pasa­do Mike Pom­peo, secre­ta­rio de esta­do del impe­rio, dio orden a Jea­ni­ne Áñez de no dejar entrar al país a los médi­cos cubanos.

Ante los recla­mos, Áñez puso fecha de entre­ga de la canas­ta familiar.

Duran­te la mar­cha del día mar­tes 31 de mar­zo la gen­te gri­ta­ba: “Que sal­ga la pre­si­den­ta”, lo que suce­dió final­men­te en T.V. para poner fecha a la entre­ga de la canas­ta fami­liar que será en efec­ti­vo para no seguir demo­ran­do la entre­ga: “Este vie­nes 3 de abril comen­za­re­mos a entre­gar en dine­ro efec­ti­vo la canas­ta fami­liar que pro­me­ti­mos. Entre­ga­re­mos 400 boli­via­nos a los hoga­res de menos recur­sos. (…) Reci­bi­rán estos recur­sos en efec­ti­vo más de un millón de ciu­da­da­nos (…) Esta canas­ta en efec­ti­vo es: 1) Para las per­so­nas que reci­ben la ren­ta dig­ni­dad, pero que no reci­ben nin­gu­na otra ren­ta o jubi­la­ción. 2) Para las madres que reci­ben el bono Jua­na Azur­duy. 3) Para las per­so­nas con dis­ca­pa­ci­dad. (…) En la segun­da sema­na de abril, entre­ga­re­mos otra ayu­da en dine­ro a las fami­lias, el bono fami­lia, es un bono de 500 boli­via­nos por hijo que reci­bi­rán todas las fami­lias que ten­gan hijos estu­dian­do en ciclo ini­cial, o sea, pre kín­der y kín­der, en la pri­ma­ria, en las escue­las fis­ca­les, para­le­la­men­te y como ya se anun­ció, rati­fi­ca­mos que se reba­ja la luz y el agua por tres meses, pero ade­más hoy agre­ga­mos a estas ayu­das la reba­ja al gas domi­ci­lia­rio del 50 % y del mis­mo modo rati­fi­ca­mos que se pos­ter­gue el pago de impues­tos y de cré­di­tos para las familias”.

Lue­go del men­sa­je de Jea­ni­ne Áñez en redes se des­ata­ron recla­mos al res­pec­to, ya que estas medi­das siguen sien­do insu­fi­cien­tes, solo lle­gan a un sec­tor redu­ci­do de la pobla­ción por­que deja afue­ra, por ejem­plo, al trans­por­te libre que tam­bién se con­vo­có hace ins­tan­tes a rom­per la cua­ren­te­na y marchar.

El gobierno de fac­to, recien­te­men­te reci­bió de par­te del Ban­co Cen­tral de Boli­via un prés­ta­mo de 1000 millo­nes de dóla­res, por lo que obser­va­mos que dine­ro no le fal­ta para inver­tir en salud y en ayu­da social. Lo que fal­ta es la deci­sión polí­ti­ca de que­rer cui­dar la vida de las y los boli­via­nos ante la pan­de­mia, toman­do medi­das para enfren­tar la emer­gen­cia en salud y la ayu­da eco­nó­mi­ca que implo­ra el pue­blo. En vez de ello, lo que suce­de es que se refuer­zan las polí­ti­cas de repre­sión. Por otro lado, en ple­na cua­ren­te­na en el mun­do, cuan­do ya se adver­tía la lle­ga­da del virus a Boli­via, se invir­tió 5 millo­nes de dóla­res median­te el decre­to 4168 en la com­pra de arma­men­to para repri­mir a la población.

El gobierno de Evo Mora­les ha deja­do un P.B.I. de 40.581 millo­nes de dóla­res, el más alto de la his­to­ria del país y se con­so­li­dó por seis años como la eco­no­mía de mayor cre­ci­mien­to (2009, 2014, 2015, 2016, 2017 y 2018) de Suda­mé­ri­ca. En este cua­dro favo­ra­ble, se auto­pro­cla­mó pre­si­den­ta Áñez, que aca­ba de reci­bir un prés­ta­mo millo­na­rio del Ban­co Cen­tral de Boli­via, y tie­ne las puer­tas abier­tas del F.M.I., lo que demues­tra que no es un tema eco­nó­mi­co el pro­ble­ma del gobierno de fac­to para afron­tar la pan­de­mia, sino de cues­tio­nes neta­men­te políticas. 

Itu­rria /​Fuen­te

Twitter
Facebook
Telegram

Artikulua gustoko al duzu? / ¿Te ha gustado este artículo?

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *