Ecua­dor reci­be de la OPS 5.000 fun­das para emba­la­je de cadá­ve­res por COVID-19

Resu­men Lati­no­ame­ri­cano* /​6 de abril de 2020

Ecua­dor reci­bió de la Orga­ni­za­ción Pan­ame­ri­ca­na de la Salud 5.000 fun­das para emba­la­je de cadá­ve­res, infor­mó el minis­tro de Salud Públi­ca, Juan Car­los Zevallos.

«La sema­na pasa­da reci­bi­mos de la Orga­ni­za­ción Pan­ame­ri­ca­na de la Salud (OPS) 5.000 fun­das y están dis­po­ni­bles para todas las per­so­nas que des­afor­tu­na­da­men­te han falle­ci­do», dijo el ministro.

La ciu­dad cos­te­ra de Gua­ya­quil (oes­te), capi­tal de la pro­vin­cia del Gua­yas, se ha con­ver­ti­do en el cen­tro de la pan­de­mia de COVID-19 en Ecua­dor, con 1.732 casos posi­ti­vos repor­ta­dos ofi­cial­men­te has­ta el momen­to, es decir un 68 por cien­to de casos de la pro­vin­cia y un 46 por cien­to de todo el país.

A los pro­ble­mas que des­de hace varios días expe­ri­men­ta Gua­ya­quil por la demo­ra en el reti­ro de los cadá­ve­res, sean o no a con­se­cuen­cia del COVID-19, se suma una satu­ra­ción de los ser­vi­cios fune­ra­rios y una esca­sez de ataú­des, por lo que en esa ciu­dad se comen­za­ron a fabri­car ataú­des de cartón.

Dece­nas de per­so­nas repor­ta­ron en medios loca­les que aun­que tenían con­tra­ta­dos los ser­vi­cios fune­ra­rios, inclui­do el res­pec­ti­vo ataúd, tenían que ente­rrar a sus muer­tos en fundas.

Ante las denun­cias y la acu­mu­la­ción de cadá­ve­res en calles, mor­gues y fune­ra­rias por la seve­ri­dad del COVID-19, y por­que algu­nas fune­ra­rias deja­ron de tra­ba­jar por temor de que sus emplea­dos se con­ta­gien, el domin­go la alcal­día de Gua­ya­quil comen­zó a repar­tir ataú­des de cartón.

Un pri­mer lote de 200 cajas mor­tuo­rias de car­tón pren­sa­do ya fue­ron entre­ga­dos, de un total de 2.000.

En un ini­cio, el pro­to­co­lo para mane­jo de cadá­ve­res esta­ble­cía que los cuer­pos de los falle­ci­dos por COVID-19 debían ser inci­ne­ra­dos, inclu­so las auto­ri­da­des anun­cia­ron la cons­truc­ción de una fosa común. Tam­po­co había la sufi­cien­te capa­ci­dad de cremación.

Final­men­te se esta­ble­ció que la cre­ma­ción no era nece­sa­ria, pero los pro­to­co­los esta­ble­cen la nece­si­dad de uti­li­zar fun­das, por lo que empe­zó a sur­gir un comer­cio clandestino.

Zeva­llos ase­gu­ró que el Gobierno tie­ne la obli­ga­ción de pro­veer a los deu­dos de las fun­das para emba­la­je de cadá­ve­res, por lo que no es menes­ter que las com­pren por su cuenta.

Rati­fi­có que el uso de las fun­das para envol­ver los cuer­pos no solo es reco­men­da­ble sino «abso­lu­ta­men­te nece­sa­rio» y que Minis­te­rio de Salud las puso a dis­po­si­ción de la ciudadanía.

La alcal­de­sa de Gua­ya­quil, Cinth­ya Vite­ri, anun­cio que el muni­ci­pio está cons­tru­yen­do dos cemen­te­rios en la ciu­dad, uno al sur y otro al sur­oes­te, con capa­ci­dad para 12.000 tumbas.

Has­ta el lunes 6 el núme­ro total de con­ta­gia­dos en Ecua­dor era de 3.747 per­so­nas. 

Sput­nik*