En el Estado español es común que periódicamente aparezcan organizaciones “revolucionarias” ‑con mayor o menor numero de adeptos- que bajo una verborrea marxistoide pretendan apuntalar ese fracasado proyecto burgués de estado-nación llamado España.
El recurso a la “unidad” de la clase trabajadora es recurrente. Tanto más se usa en lo discursivo, más se niega en la práctica el derecho a la autoorganización de la clase trabajadora vasca, catalana o andaluza, por ejemplo. Y por consiguiente el ejercicio práctico de la autodeterminación ‑esto es- a la libre separación de los pueblos.
En Euskal Herria llevan un tiempo operando unas siglas denominadas ELAK/PCTE que ayer condenaban, a través de su cuenta de Twitter, las pintadas que en varias sedes del PSOE y Podemos han aparecido estos días denunciando la situación del preso político vasco Patxi Ruiz en la cárcel de Murcia II.
Ojo, rechazaban las pintadas, no la difícil situación en la que se encuentra Ruiz, desde hace once días, en huelga de hambre y sed por el trato recibido por los carceleros en dicha prisión.
Lo cierto es que llueve sobre mojado, puesto que este “partido comunista” se solidarizaba a finales de enero con la candidata (también de Elakarrekin Podemos) por lo que consideraban que era una “campaña racista” y que no resultó ser más que un error de traducción en las declaraciones en euskera de un dirigente de Sortu, que fueron interpretadas como un “insulto” por la prensa del Régimen del 78.
No hay dos sin tres. Y tenemos que recordar la postura de esta cuenta de Twitter (cuya implantación real en Euskal Herria como organización parece reducidísima) a raíz de la huelga general vasca realizada en enero, donde acusaban al sindicalismo independentista de “dinamitar la unidad”. La unidad “española” hemos de entender, habida cuenta de que en la denominación del dicho partido la “E” significa “España”.
Para algunos sigue estando de moda aquella canción de Luis Lucena, el valenciano que cantaba “Españolear” en pleno desarrollismo franquista: