Resumen Latinoamericano, 30 junio 2020
El Gobierno derogó la reforma de Mauricio Macri
El macrismo había abierto la puerta para la incorporación de tareas de seguridad interior. Un decreto vuelve a limitar la actuación del Ejército a la agresión extranjera.
Imagen: Bernardino Avila
La reforma de las Fuerzas Armadas que había puesto en marcha la gestión de Mauricio Macri –y que permitía su incorporación a tareas de seguridad interior, con apoyo logístico, principalmente en las fronteras, control de narcotráfico y terrorismo – , fue derogada por el Gobierno a través de un decreto que lleva las firmas del presidente Alberto Fernández, el jefe de Gabinete Santiago Cafiero, y el ministro de Defensa Agustín Rossi. De esta forma se volvió a las reglamentaciones que regían durante las presidencias de Néstor y Cristina Kirchner, que limitan la actuación del Ejército ante las agresiones extranjeras. El regreso al DNU 727⁄06 establece que las “agresiones de origen externo” están enmarcadas en “el uso de la fuerza armada por un Estado contra la soberanía, la integridad territorial o la independencia política de nuestro país, o en cualquier otra forma que sea incompatible con la Carta de las Naciones Unidas”.
“Emociona escuchar los aplausos que recibió personal militar del Ejército Argentino en el barrio San Jorge, de Tigre. Estos gestos se multiplican en todo el país en reconocimiento al enorme trabajo que están realizando las Fuerzas Armadas en tiempos de pandemia”, escribió el ministro Rossi.
El Ministerio de Defensa tiene un plazo de seis meses para elaborar una “propuesta de una nueva directiva de política de Defensa Nacional”, que a partir de ahora tendrá que ver sólo con objetivos relacionados a agresiones externas. Los decretos 683⁄2018 y 703⁄2018, que firmaron Mauricio Macri, su jefe de Gabinete Marcos Peña y el ex ministro de Defensa Oscar Aguad, eran parte del plan de reestructuración militar para las Fuerzas Armadas. En el segundo decreto, Macri establecía la “Directiva de Política de Defensa Nacional” (DPDN), la modificación del despliegue de unidades y el envío de militares a la frontera norte para combatir el narcotráfico.
Las directivas del DNU 727⁄06, emitido cuando Nilda Garré ocupaba el ministerio de Defensa, establecen que las Fuerzas Armadas son un instrumento militar de defensa nacional que debe ser empleado sólo ante agresiones de origen externo perpetradas por fuerzas armadas pertenecientes a otro Estado.
En los considerandos del nuevo decreto consta que para dilucidar las cuestiones de Defensa Nacional “se deberá tener permanentemente en cuenta la diferencia fundamental que separa la Defensa Nacional de la Seguridad Interior del Sistema de Defensa Nacional”. La modificación menciona que la reforma macrista “alteró ostensiblemente el criterio demarcatorio que separa la Defensa Nacional de la Seguridad Interior, porque el Decreto N° 683⁄18 omitió que la escisión de estos campos deviene del tipo y/o naturaleza de la amenaza, concluyendo que, como consecuencia de la evolución del entorno de Seguridad y Defensa, resultaba necesario establecer nuevos roles y funciones para cada una de estas instancias, lo que contraviene el sólido consenso normativo y doctrinario alcanzado desde la recuperación de la democracia en el año 1983”.
Agustín Rossi: “En seis meses tendremos que elaborar una nueva política de Defensa”
El ministro de Defensa, Agustín Rossi, adelantó en AM750 que en seis meses el Gobierno presentará una nueva política de Defensa. Lo hizo tras la derogación de la reforma de las Fuerzas Armadas que había impulsado la gestión de Mauricio Macri y que permitía su incorporación a tareas de seguridad interior.
“Lo que nos parecía que estaba mal era una
modificación que la gestión de Cambiemos había hecho a la reglamentación
de la Ley de Defensa que establecía que las FFAA solo podrían actuar
antes una agresión externa. Es decir cuando había una agresión de otro
país”, dijo Rossi en comunicación con Caími a las 6.
“Lo que hizo la gestión anterior fue eliminar los términos ‘Militar y estatal’ de la reglamentación. Mediante
esa definición difusa de agresión externa dejaban abierta la puerta
para que las Fuerzas Armadas puedan actuar en el combate contra el
narcotráfico y de esta manera meterlos en las cuestiones de seguridad
interior que nosotros no compartimos en absoluto”, sostuvo el
ministro de Defensa. ”Eso no tuvo buenos resultados en ningún lugar del
mundo”, agregó.
Rossi explicó que tras la derogación vuelve a
regir la política de defensa del 2015 y que en seis meses elaboran una
nueva que será la guía de acción para los próximos tres años de
gestión.