Fue en el día de ayer y había sido invitado a una reunión sobre la Cunsulta
populara naziunale en el convento de Saint-Antoine en Casabianca.
Efectivamente, un comando del Frente de Liberación Nacional de Córcega
(FLNC) aterrizó a media tarde de ayer, martes 14 de julio, en el convento de
Saint-Antoine de Casabianca, en Casabianca, a 50 km al sur de Bastia.
Los cuatros militantes del Frente de Liberación Nacional de Córcega (FLNC)
aparecieron armados, encapuchados y vestidos de negro. Cuando interrumpieron,
en el lugar se celebraba la mencionada mesa redonda sobre la reactivación de la
«Cunsulta populara naziunale», un organismo destinado a incorporar una
alternativa a las instituciones francesas.
Uno de los militantes comenzó a leer un texto redactado en corso y
reivindicó los disparos contra la gendarmería de Montesoro, en la noche del
lunes al martes en Bastia. Este atentado está siendo investigado por la
fiscalía nacional antiterrorista.
El comando del FLNC rindió de esa manera homenaje»a los combatientes que
han luchado durante dos siglos para defender a la nación» y pidieron
al gobierno, también, «que implemente un proceso real de reconocimiento
del pueblo corso y la descolonización».
Tras finalizar el discurso, un miembro del comando hizo varios disparos al
aire. También dejaron un folleto («texto del FLNC» firmado en un lugar
altamente simbólico. Cabe recordar que, el 14 de julio de 1755, Pasquale Paoli
fue elegido jefe general de la nación corsa en el convento de Saint-Antoine de
Casabianca.
En el folleto se puede leer: «Nosotros, los
patriotas corsos, hemos decidido unirnos para reconstituir el FLNC sobre la
base de su manifiesto histórico del 5 de mayo de 1976″.
Igualmente, expresa la necesidad de la enseñanza obligatoria del corso
desde el jardín de infantes hasta el CM2 o incluso la limitación del turismo
para duplicar la población de la isla durante los meses de gran afluencia.
Cabe recordar que el Frente de Liberación Nacional de Córcega (FLNC)
anunció el abandono de las armas en 2014, después de cuatro décadas marcadas
por la reivindicación de más de 4.500 atentados.
En septiembre de 2019, sin embargo, anunció su reorganización y la puesta en marcha de una campaña contra la venta de tierras a inversores extranjeros.
Fuente: insurgente.org
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