Un año después de que Ilias T., un joven de 18 años, falleciese en el centro de menores ‘Tierras de Oria’ durante una maniobra de contención, este miércoles su familia ha vuelto ha pedir «justicia» y que la causa «no caiga en el olvido» ya que, tan solo medio año después de los hechos, el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Purchena la archivó.
Frente a la entrada de la Ciudad de la Justicia de Almería, Abdelmunime T, hermano mayor del fallecido, ha recordado que la Fiscalía se ha adherido al recurso de la familia y ha solicita que se revoquen los autos de archivo de la causa y se dicte uno nuevo para poder investigar los hechos. «Después de ver las grabaciones de los hechos tenemos nuevas pruebas y estamos muy seguros de que a mi hermano lo mataron. No fue un accidente como alegan tanto el centro de menores como la Junta de Andalucía. Pedimos que se haga justicia«, ha afirmado.
«Un año después todavía desconocemos de manera clara cómo sucedieron los hechos que desencadenaron en estas circunstancias», ha trasladado la familia en un comunicado, en el que también aseguran que el joven «no fue tratado con respeto ni con sus derechos fundamentales» ya que ello «habría evitado su muerte».
«No entendemos cómo se archivó la causa y por eso la hemos recurrido», ha insistido la familia, que ha asegurado confiar «plenamente» en la justicia española. «Reclamamos justicia. No se puede cerrar una causa tan grave, que supone la muerte de un menor, sin las suficientes investigaciones», ha incidido el portavoz de la familia, que ha exigido la «depuración de responsabilidades» así como la retirada del protocolo de contención mecánica al que este fue sometido.
Respecto al día de los hechos, Abdelmunime ha aseverado que «fue un asesinato» ya que la familia sostiene que existen versiones contradictorias sobre lo ocurrido antes de que a Iliass le aplicaran el protocolo para su contención, puesto que si bien la versión oficial apunta a que se mostró «agresivo» y fue necesario inmovilizarlo, la familia cuenta con testimonios que aseguran que el joven se encontraba «tranquilo».
«Alegaron que mi hermano puso resistencia a la hora del protocolo de contención mecánica y que fue con asistencia médica, cosa que, cuando nosotros hemos visto el vídeo nos ha sorprendido, porque mi hermano no opuso resistencia y no había presencia médica», ha recalcado antes de detallar las dificultades que tuvieron para acceder a la grabación.
La familia sostiene que se produjeron negligencias en la aplicación del protocolo que, en el momento de los hechos, era seguido por la entidad Ginso para realizar las contenciones al considerar que los vigilantes se echaron «encima de su cuello durante más de 14 minutos». «¿Cómo dice Ginso que tiene personal cualificado? ¿Dónde esta la cualificación de esas personas? Es imposible que esas personas no se den cuentan de que estaba muriendo», ha lamentado.
Igualmente, los allegados del fallecido echan en falta además informes periciales que detallen aún más la causa de la muerte de Iliass, pues, según sostienen que el cuerpo del joven presentaba signos de «tortura» que, según ellos, descartan pudieran ser autoinflingidos. Asimismo, desconocen la existencia directa de algún informe que muestre signos de asfixia.
En cualquier caso, el portavoz de la familia ha incidido en que su hermano fue puesto en tratamiento médico «sin permiso» de su madre, a la que un día antes de su muerte el joven aseguró que sentía «miedo» de estar en el centro. «Con todo el respeto a la justicia española y el Juzgado de Purchena, veo que no se ha hecho una investigación tan clara como la que se dice», ha opinado el joven, quien confía en que la Audiencia de Almería reabra el caso.
«No entiendo todo lo que está pasando con el caso de mi hermano. Me fio de la justicia y por eso pido que se reabra el caso y se vuelva a investigar porque seguramente va a cambiar la versión», ha finalizado.
Fuente: www.ideal.es
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