Con respecto al ataque llevado a cabo el lunes contra el Consulado de Venezuela en la capital de Colombia, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia insinuó que los propios funcionarios venezolanos habían tomado los materiales del lugar debido a la falta de pago de los salarios.
En respuesta a la sugerencia del gobierno de Iván Duque, el líder de la diplomacia venezolana, Jorge Arreaza, dijo el miércoles en su cuenta de Twitter que Colombia “se ha convertido en un experto en evadir sus responsabilidades y en tratar de pasarlas a terceros”. .
“Las imágenes de nuestro consulado saqueado en Bogotá hablan por sí mismas”, escribió Arreaza, quien acusó al país vecino de no cumplir con sus obligaciones bajo la Convención de Viena con respecto a la protección de las sedes diplomáticas y consulares en su territorio.
También ayer, en la misma red social, el Ministro de Relaciones Exteriores de Venezuela negó las acusaciones de su homólogo colombiano sobre presuntas acciones de vandalismo contra el Consulado de Colombia en Puertos Ordaz, en el estado venezolano de Bolívar.
Arreaza mostró material audiovisual que mostraba el buen estado de las instalaciones de la sección consular colombiana, mientras acusaba a las autoridades diplomáticas de Bogotá de crear casos falsos y mentir fácilmente.
«Mentir como política de Estado: no conocen los campamentos de mercenarios en su territorio, tienen botes desbocados, no son responsables por el fracaso de los acuerdos de paz, ni por los asesinatos de líderes sociales y masacres, no financian paramilitares, no aumentan la producción de drogas “, escribió Arreaza con ironía en su cuenta de Twitter.
El martes, Arreaza anunció que su país, por recomendación del presidente de la República, Nicolás Maduro, presentará una queja contra Colombia en las Naciones Unidas debido al ataque contra el consulado venezolano en Bogotá.
“Hacemos un llamado al Estado colombiano para que investigue, responda por sus obligaciones internacionales y compense a Venezuela”, subrayó el Ministro de Relaciones Exteriores.
Aliado de Washington en política intervencionista
Venezuela rompió relaciones diplomáticas con Bogotá en febrero de 2019, teniendo en cuenta las continuas agresiones contra la soberanía del país apoyada por Colombia, el principal aliado regional de Estados Unidos y uno de los principales aliados de la Unión Europea con respecto a la política intervencionista de desestabilización en Venezuela.
En línea con la hostilidad de Washington y sus lacayos europeos, la administración de Iván Duque no reconoció la legitimidad del presidente Nicolás Maduro, elegido en mayo de 2018 con el 67% de los votos, y expresó su apoyo a la autoproclamación del diputado del extremo. derecha Juan Guaidó como presidente interino de Venezuela, recuerda Prensa Latina.
Además, los funcionarios del gobierno venezolano presentaron pruebas abrumadoras de la complicidad y participación de Colombia en la organización de acciones de desestabilización contra Venezuela, incluida la frustrada incursión terrorista del 3 de mayo, la llamada Operación Gedeón.
Fuente: www.abrilabril.pt
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