Todos los casos registrados desde el 16 de abril (241) son de personas vietnamitas repatriadas de países donde la situación epidemiológica era o es complicada o conciernen a investigadores, especialistas y empresarios extranjeros que tienen contratos en el país y que han regresado recientemente.
Entre estos últimos, según Prensa Latina , hay ocho ciudadanos rusos, que han elevado el número de personas infectadas a 381 en el país de la ex Indochina.
Si Vietnam no está completamente libre de síndrome respiratorio agudo severo, esto se debe en parte al hecho de que el gobierno ha cumplido su promesa de no dejar a nadie atrás y ha repatriado a miles de ciudadanos vietnamitas, un proceso aún en curso, y el regreso de especialistas extranjeros que el gobierno considera necesarios para el funcionamiento de la economía.
Dichas operaciones dan la “falsa impresión” de que el mal continúa extendiéndose, pero los contagios de la comunidad se detuvieron hace tres meses y los ciudadanos que regresan al país están sujetos a rigurosos procesos de cuarentena y vigilancia médica, para evitar propagación de la enfermedad entre la comunidad, subraya la agencia cubana. En este momento, más de 10,000 personas están ingresadas en centros hospitalarios o bajo observación en sus hogares.
El número de casos por millón de personas (de una población de 96 millones) estaba contenido por cuatro, uno de los más bajos entre los países con más de 80 millones de habitantes.
Además, Vietnam no tuvo que lamentar ninguna pérdida humana debido a la enfermedad y, del número total de personas infectadas, se recuperaron 353 (92,6%). Los 28 aún hospitalizados se encuentran en un claro proceso de recuperación y cinco ya han dado negativo una o dos veces en las pruebas para analizar el virus, según la comisión nacional responsable de contener la enfermedad.
“Si los resultados son estos, es porque desde el principio el gobierno no dudó en tomar medidas capaces de detener la propagación del SARS-CoV‑2 y advirtió que, aunque fueran persuasivos, se aplicarían al pie de la letra”. , dice Prensa Latina , que también destaca cuán ejemplar era la ciudadanía. “Cuando todavía no se sabía que las cosas iban a ir tan bien, la gente siguió todas las disposiciones al pie de la letra y solo en casos muy excepcionales fue necesario aplicar sanciones, ninguna de ellas extrema”, dice.
Sin muertes
El mayor triunfo de Vietnam sobre el síndrome respiratorio agudo es seguir siendo uno de los pocos países que, a pesar de registrar a más de 300 personas enfermas, no muere a causa de Covid-19. Y varios pacientes estaban al borde de la muerte.
Una de ellas era una mujer de 64 años que tuvo que ser tratada con oxigenación por membrana extracorpórea, una máquina de derivación corazón-pulmón (ECMO) que bombea sangre del cuerpo y la devuelve oxigenada, para que esos órganos descansen. En el proceso, sufrió tres ataques cardíacos, por lo que los médicos y las enfermeras tuvieron que trabajar duro para salvarla.
Otro ejemplo de la profesionalidad del personal médico vietnamita es el famoso paciente 91, un británico de 43 años contratado como piloto por Vietnam Airlines y considerado el caso más grave de todos los que fueron tratados en el país.
El hombre sufrió varias complicaciones adicionales (obesidad, problemas de coagulación y una respuesta inmune tan fuerte que actuó contra el cuerpo en lugar de defenderlo, entre otros), lo que hizo que fuera muy difícil salvarlo.
Durante dos meses, estuvo conectado a una ECMO y los especialistas consideraron someterse a un trasplante de pulmón, descartando esta posibilidad debido a la evolución positiva. En el proceso de rehabilitación integral, y luego de varios resultados negativos para el virus, el británico regresó a su país el domingo pasado, acompañado por un equipo de médicos locales.
«Nueva normalidad» y recuperación económica
En abril, el país asiático entró en una fase de “nueva normalidad”, que es visible en todas partes: la vida volvió a sus canales habituales, con personas con máscaras protectoras y observando ciertas medidas preventivas.
En este escenario, las autoridades no descuidan ni repiten las advertencias sobre la necesidad de protegerse contra la enfermedad y mantener ciertas medidas, como la suspensión de vuelos internacionales (con raras excepciones). Hace unos días, el primer ministro Nguyen Xuan Phuc pidió a sus compatriotas que hicieran todo lo posible para evitar una segunda ola de Covid-19 y recuperar la economía en el menor tiempo posible.
Xuan Phuc agradeció los resultados ante la pandemia, pero señaló que las pérdidas económicas fueron altas, hasta el punto de que el producto interno bruto (PIB) creció solo 0.36% en el segundo trimestre, el valor más bajo en 30 años.
En este sentido, defendió que, sin descuidar las medidas preventivas, “ahora es necesario concentrarse en revitalizar la producción, las exportaciones, atraer inversiones extranjeras, el turismo y otros contribuyentes importantes a las arcas nacionales”.
En vista de este escenario, dice Prensa Latina , «varias organizaciones internacionales prevén que la economía vietnamita, incluso si está abierta, será una de las menos afectadas por Covid-19 y que, si las cosas no empeoran a nivel mundial, casi se recuperará altos niveles de crecimiento en 2021 ».
Fuente: www.abrilabril.pt
Latest posts by Otros medios (see all)