Resumen Latinoamericano, 03 de agosto de 2020.
Las naranjas argentinas contenían residuos del insecticida prohibido Clorpirifós, en una proporción de 0’028 miligramos por kilo, además de Imazalil con una presencia en las naranjas de 1’7 miligramos por kilos y de Propiconazol, del que se detectaron 2’1 miligramos por kilo. El pasado 6 de diciembre la UE prohibió totalmente el Clorpirifós por su peligrosidad.
Las autoridades aduaneras españolas han rechazado la importación de naranjas procedentes de Argentina, ya que contenían una excesiva presencia de residuos de pesticidas, según ha podido saber Hortoinfo a través del Sistema de Alerta Rápida para Alimentos y Piensos (Rapid Alert System for Food and Feed, RASFF).
Según la notificación del RASFF se trata de un hecho grave, pues las naranjas contenían residuos de Clorpirifós, un insecticida cuyo uso prohibió totalmente la Unión Europea (UE) el pasado día 6 de diciembre debido a su alta peligrosidad, además de una excesiva presencia de residuos de otros dos pesticidas, Imazalil y Propiconazol.
El Clorpirifós se encontraba en las naranjas en una proporción de 0’028 miligramos por kilo, mientras que la presencia de Imazalil era de 1’7 miligramos/kilo y la de Propiconazol de 2’1 miligramos por kilo.
Los análisis, según la notificación del RASFF, fueron realizados el pasado día 20 de julio.
Clorpirifós
Se trata de un insecticida organofosforado, con un amplio grado de control y alto poder de penetración, que actúa sobre los insectos por contacto, ingestión e inhalación. Controla un amplio espectro de insectos chupadores y masticadores.
Hay que recordar, como publicó Hortoinfo, que el pasado día 6 de diciembre de 2019 la Comisión Europea (CE) prohibió totalmente por su peligrosidad el uso de Clorpirifós.
Un grupo de investigadores de las facultades de Farmacia y Bioquímica y de Medicina de la Universidad de Buenos Aires (UBA), junto con científicos de la Universidad Nacional de Comahue (Argentina), han comprobado que la exposición a bajas dosis de Clorpirifos (CPF) produce cáncer de mama.
Imazalil
El Imazalil es un fungicida sistémico inhibidor de la biosíntesis del ergosterol. Controla un amplio espectro de enfermedades producidas por hongos en frutos, vegetales y plantas ornamentales.
Propiconazol
Se trata de un triazol sistémico con actividad fungicida, de aplicación foliar y acción preventiva y curativa. Se utiliza para la protección de pastos, cultivos de setas, maíz, arroz salvaje y otros.
Descubren que el Clorpirifos a bajas dosis produce cáncer de mama
25/02/2016.- Hasta ahora eran bien conocidos los efectos tóxicos de los organofosforados, como el Clorpirifos (CPF), que a dosis altas producen efectos neurotóxicos por inhibir la acetilcolinesterasa, indispensable para el funcionamiento del sistema nervioso central. Pero los resultados de esta investigación han permitido comprobar que, la exposición a bajas dosis, como la presencia superior al LMR en hortalizas y frutas, actúa como las hormonas esteorideas, es decir como un estrógeno.
Un grupo de investigadores de las facultades de Farmacia y Bioquímica y de Medicina de la Universidad de Buenos Aires (UBA), junto con científicos de la Universidad Nacional de Comahue (Argentina), han comprobado que la exposición a bajas dosis de Clorpirifos (CPF) producen cáncer de mama, según ha informado la propia universidad bonaerense y la Agencia Iberoamericana para la Difusión de la Ciencia y la Tecnología.
La doctora Claudia Cocca, profesora adjunta de la cátedra de Física en el Laboratorio de Radioisótopos de la Facultad de Farmacia y Bioquímica (FFyB) de la UBA e investigadora adjunta del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), ha indicado que «son bien conocidos los efectos tóxicos de los organofosforados, como el clorpirifo (CPF). Dosis altas producen efectos neurotóxicos por inhibir la acetilcolinesterasa, indispensable para el funcionamiento del sistema nervioso central. Pero qué efectos producen en bajas dosis, consideradas ambientalmente relevantes, y con tiempos de exposición prolongada, no estaba suficientemente estudiado», señala.
Cocca tabajó en colaboración con expertos del Laboratorio de Efectos Biológicos de Contaminantes Ambientales, Departamento de Bioquímica Humana, Facultad de Medicina de la UBA; y del Laboratorio de Investigaciones Bioquímicas y Químicas del Medio Ambiente (LIBIQUIMA), IDEPA, CONICET, Universidad Nacional de Comahue, Neuquén.
Los investigadores analizaron, justamente, qué ocurre a bajas dosis, como a las que están expuestas la población general. Observaron que el CPF actúa como disruptor endócrino y produce efectos similares a los estrógenos, por ejemplo induce alteraciones en la estructura de la glándula mamaria.
«El objetivo –concluye Cocca– fue estudiar en profundidad los efectos de la exposición a muy bajas dosis de CPF, dado que la mayoría de la población está expuesta a estas dosis –notablemente menores a las tóxicas– al consumir vegetales o frutas fumigadas”, indicó la investigadora.
De ahí la importancia de los rechazos que se producen en las fronteras, al detectarse hortalizas y frutas con residuos superiores a Límite Máximo de Residuos (LMR), lo que puede generar un problema de salud pública, motivado por la fumigación poco controlada con estos compuestos.
Fuente: Hortoinfo