Ezequiel Flores Contreras/Resumen Latinoamericano, 2 de agosto de 2020
Un grupo armado ejecutó esta madrugada al reportero Pablo Morrugares Paraguirre en el interior de un bar de su propiedad, ubicado en pleno centro de Iguala.
Previo a ser asesinado, cerca de la medianoche, Morrugares Paraguirre realizó una transmisión en su página de Facebook llamada PM Noticias, donde aseguró que el grupo delictivo de Los Tlacos presuntamente tiene “sometido” al alcalde priista de Huitzuco, José Luis Ávila López, así como a taxistas y policías municipales.
Con este crimen, suman seis los trabajadores de medios de comunicación asesinados durante los cinco años que lleva la administración del gobernador priista, Héctor Astudillo.
A la fecha, ninguno de los crímenes contra periodistas ha sido esclarecido y todos permanecen en la impunidad.
Reportes oficiales indican que a la 1:00 de la madrugada, sujetos armados irrumpieron en el bar Bufalos y ejecutaron al dueño del establecimiento, identificado como Pablo Morrugares, así como a su escolta, un policía estatal de nombre Roberto Hernández.
Las víctimas estaban departiendo en el bar, ubicado sobre la calle Juan Aldama en pleno centro de la ciudad de Iguala.
El reportero había realizado una transmisión desde el lugar donde narró que horas antes había estado en el municipio vecino de Huitzuco porque reportaron el asesinato de un taxista pero que el cuerpo se lo habían llevado sus familiares.
Enseguida, Pablo Morrugares expresó textual:
“La gente está súper encabronada en Huitzuco porque la delincuencia, ósea Los Tlacos. La policía le servía a ellos y los taxis también pero no porque quisieran sino porque eran obligados” y remató.
“Huitzuco está súper caliente, el presidente (José Luis Ávila López), tiene negociaciones con los delincuentes y le ha ido mal”, afirmó el comunicador que sería ejecutado minutos después de lanzar esos señalamientos.
Pablo Morrugares estaba adherido al Mecanismo de protección a periodistas y defensores de derechos humanos del gobierno federal y el gobierno de Héctor Astudillo le asignó policías estatales como escoltas, indican reportes oficiales.
FUENTE: Proceso