Colom­bia. Diri­gen­tes sin­di­ca­les denun­cian ame­na­zas de muerte

Resu­men Lati­no­ame­ri­cano, 27 de octu­bre de 2020.

La Con­fe­de­ra­ción Sin­di­cal de tra­ba­ja­do­res de las Amé­ri­cas (CSA) denun­ció este mar­tes, en una car­ta públi­ca, las ame­na­zas de muer­te de las cua­les ha sido obje­to el expre­si­den­te y actual eje­cu­ti­vo de la Fede­ra­ción Colom­bia­na de Tra­ba­ja­do­res de la Edu­ca­ción, Car­los Rivas.

De acuer­do a Rivas, quien acom­pa­ñó su denun­cia con evi­den­cia foto­grá­fi­ca, a las 10H30 local (13H00 UTC) del lunes 26 de octu­bre, lle­gó en un taxi a su casa una coro­na de flo­res fúne­bre con este men­sa­je: «Des­can­sa en paz». 

Asi­mis­mo, reci­bió rosa­rios y velo­nes con cin­ta negra y 15 libros litúr­gi­cos con los nom­bres de varios de los eje­cu­ti­vos de la Fede­ra­ción Colom­bia­na de Edu­ca­do­res (Feco­de), uno de los cua­les incluía el nom­bre de Dió­ge­nes Orjue­la, pre­si­den­te de la Cen­tral Uni­ta­ria de Tra­ba­ja­do­res (CUT).

Por esos acon­te­ci­mien­tos, los sin­di­ca­lis­tas lla­man la aten­ción del Gobierno de Iván Duque, a quien con­si­de­ran res­pon­sa­ble de las vidas de estos tra­ba­ja­do­res. De igual for­ma, le exi­gen a Duque que garan­ti­ce «el dere­cho a la pro­tes­ta, a la lucha social», debi­do a que es «un aten­ta­do con­tra la vida de los diri­gen­tes sin­di­ca­les, esta es una adver­ten­cia para que nos que­de­mos calla­dos, pero no lo vamos a hacer».

Entre­tan­to, Dió­ge­nes Orjue­la ase­gu­ró que estos hechos no cons­ti­tu­yen nada nue­vo. El pre­si­den­te de la CUT recor­dó que «a fina­les del año pasa­do y a comien­zos de este año tam­bién lle­ga­ron ame­na­zas de las Águi­las Negras, dos veces, don­de inclu­yen nom­bres, tam­bién se incluía el nom­bre mío. Nun­ca se sabe quién, de dón­de ni cómo lle­gan (las amenazas)».

El Minis­te­rio de Edu­ca­ción, por medio de un comu­ni­ca­do, recha­zó las ame­na­zas a diri­gen­tes sin­di­ca­les y recor­dó que el Gobierno nacio­nal tie­ne el com­pro­mi­so ins­ti­tu­cio­nal para dar garan­tía de la “pro­tec­ción a la vida, la segu­ri­dad y la inte­gri­dad de los edu­ca­do­res y sus familias”.

La CSA, por su par­te, en su car­ta públi­ca expre­só «su ple­na soli­da­ri­dad» con Orjue­la. Tam­bién exi­gió a Duque la adop­ción de medi­das para «pro­te­ger la vida y la inte­gri­dad de los líde­res socia­les de Colom­bia» y lla­mó a la «soli­da­ri­dad del sin­di­ca­lis­mo internacional».

Fuente:Telesur

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