Resumen Latinoamericano, 7 de noviembre de 2020.
Ya que va a haber expulsiones, ¿no será mejor que uno de los expulsados sea un tal Emmanuel Macron?
Introducción
Que el francés es un Estado terrorista es algo más que conocido. Cualquiera sabe de su implicación en guerras de rapiña en las que, precisamente, no participaron ni participan para repartir caramelos a la población atacada y saqueada. Ejemplos existen en abundancia.
Sin embargo, los gobernantes del país galo no se sonrojan a la hora de llamar terroristas a quienes, de alguna manera, les molestan o no se doblegan a sus dictados.
Si los migrantes a expulsar fueran futbolistas que meten goles para la selección nacional no correrían esa (mala) suerte. Pero no lo son.
¿Seguro que todos son “terroristas”, como aseguran? ¿No estarán aprovechando la coyuntura para deshacerse de gente que aborrecen porque, simplemente, no pertenecen a su clase social? Esta es una práctica tan deleznable como habitual en la Francia de la «Liberté, égalité, fraternité».
Y por último, ya que va a haber expulsiones, ¿no será mejor que uno de los expulsados sea un tal Emmanuel Macron?
La noticia
Francia está intensificando las iniciativas para mantener alejados de su territorio a los migrantes ilegales y que considera radicalizados. Dice que lo hacen para tratar de contrarrestar la amenaza terrorista; no la gubernamental, por supuesto.
Los tres ataques perpetrados en Francia en un mes entre finales de septiembre y finales de octubre, localizados frente a las antiguas oficinas de la revista Charlie Hebdo, el asesinato de un profesor por haber mostrado caricaturas del profeta Mahoma en clase y el ataque con cuchillo en una iglesia en Niza (sureste), han llevado al gobierno a intensificar las medidas en todos los frentes.
El jueves, el presidente Emmanuel Macron anunció que duplicará los dispositivos de las fuerzas de seguridad desplegados en las fronteras para hacer frente a la inmigración ilegal y las redes de traficantes “que están cada vez más vinculadas a las redes terroristas”.
Y este viernes, el ministro del Interior, Gérald Darmanin, inició una gira internacional sobre el tema de la “lucha contra el terrorismo y la inmigración clandestina”.
Su viaje comenzó hoy por la mañana en Roma, para discutir con su homólogo italiano sobre la reforma del sistema europeo de asilo e inmigración, entre otros. Posteriormente viajará a Túnez, Malta y Argelia.
El objetivo es “reactivar” las expulsiones hacia esos países, dijo a la AFP la oficina del ministro. Éstas se encuentran suspendidas por la crisis de covid-19, que obligó a cerrar las fronteras exteriores de la Unión Europea (UE).
Aunque se abordará el tema de la inmigración, en general, “se dará prioridad al tema de los individuos que representan una amenaza al orden público”, confirmaron las mismas fuentes.
Darmanin presentó recientemente una lista de 231 extranjeros en situación irregular fichados por supuesta radicalización, a los que quiere expulsar de Francia.
En esta lista, el 70% son del Magreb y de Rusia. El ministro del Interior tiene también previsto visitar “en los próximos días” este país.
Según el mencionado ministro, de estas 231 personas, 26 ya fueron expulsadas, y “más de un centenar” están en centros de detención administrativa, donde se encuentran detenidos los extranjeros en situación irregular a la espera de ser expulsados.
Fuente: Insurgente.