Paula Huenchumil/Resumen Latinoamericano, 4 de noviembre de 2020
Mauricio Lepin Aniñir, quien aparece en la cima de la estatua con la wenüfoye ‑una de las bandera mapuche- aceptó la candidatura que le ofreció el Frente Amplio, “pero voy como independiente”, dice a INTERFERENCIA. Lepin postulará por el distrito 22 de Malleco. “Quiero luchar contra las injusticias que vivimos. También voy por el tema mapuche, para que respeten a nuestro pueblo”, añade.
“La verdad lo único cuerdo que le he escuchado a la derecha fue cuando la esposa del Presidente, Cecilia Morel, dijo ‘tendremos que compartir nuestros privilegios»’, dice Mauricio Lepin.
Mauricio Lepin Aniñir (28 años) es quien aparece en la cima de la estatua de la Plaza Dignidad, con la wenüfoye ‑una de las bandera mapuche- que flameó en la marcha más grande de Chile el 25 de octubre 2019. La foto tomada por la actriz Susana Hidalgo es catalogada como histórica.
Según relata Lepin, la semana pasada el Frente Amplio le ofreció una candidatura para integrar la Convención Constitucional. “Después de analizarlo mucho, decidí ir como candidato por el distrito 22 de Malleco. Voy como independiente, pero respaldado por el Frente Amplio”, dice a INTERFERENCIA.
“A finales de octubre casi perdí una pierna cuando recibí un disparo de lacrimógena a un metro de distancia de Carabineros, estuve casi tres meses con muleta”, señala. Esa tarde vestía su trarilonko (cintillo tradicional mapuche). “Quiero un mejor futuro para mi hijo – de 8 años- por eso voy a las marchas. En honor a mis abuelos, se llama Weliwen ‘nuevo amanecer’. Mi hijo sabe que es mapuche, de dónde venimos y lo que significa esto», reflexiona.
Mauricio Lepin nació en Galvarino, en la comunidad mapuche Pelantaro, Región de la Araucanía. Estudió en una escuela rural que fue gestada por su abuelo que era lonko (autoridad ancestral). Su abuela era machi. Cuando ellos fallecieron fue adoptado por unos tíos y en la enseñanza media emigró a Temuco donde estudió en el Internado Indígena, ahí comenzó a participar en organizaciones como Wechenewen (fuerza de los jóvenes) donde se dedicaban principalmente a fortalecer su cultura, tal como relató en la entrevista Habla el protagonista de la foto histórica de la bandera mapuche en Plaza Italia: “Estoy orgulloso que haya sido un mapuche quien la sostenía”
Con 18 años Lepin se trasladó a Santiago a estudiar para técnico en logística en el Instituto Los Leones, además de trabajar. Dentro de lo que le ha permitido la pandemia, viaja al sur para participar en nguillatun (ceremonia tradicional) o actividades en su comunidad.
-¿Por qué aceptó el ofrecimiento del Frente Amplio?
Mi principal motivación es luchar contra las injusticias que vivimos y que no se pueden volver a repetir. También voy por el tema mapuche, para que respeten a nuestro pueblo, que tengamos más derechos, que tengamos justicia, porque pasan los años y para el mapuche no hay justicia
-¿Siente algún tipo de desconfianza hacia los partidos políticos y, en este caso, del Frente Amplio?
Por lo mismo no quise ser parte del partido, no milito en ningún partido. Como primera instancia obviamente me ofrecieron ser constituyente perteneciente al partido, pero dije tajantemente que no, porque no congenio con los partidos en general porque van literalmente donde ‘calienta el sol’. Hasta la derecha se ha subido al carro de la victoria y ahora todos quieren ser constituyentes, parece que como dijo el ex ministerio de Salud (Jaime Mañalich), todos se convirtieron en buenas personas.
-¿Por qué decidió postular por el distrito de Malleco?
Porque pertenezco allá, y por lo mismo creo que puedo aportar más que siendo candidato en Santiago. Conozco la realidad de allá, como son las cosas, las injusticias y represiones que hay hacia la gente de campo.
Además hay pocas oportunidades para estudiar y para trabajar y yo viví eso, por eso siento que puedo aportar en ese sentido. Viví esa experiencia. Viví la discrimación, pasé por el internado para poder estudiar y he luchado contra la discriminación en la ciudad.
Por ejemplo, si escribimos una Nueva Constitución tenemos que prohibir que nos pueda volver a robar nuestras tierras, que nuestras machis y lonkos sean respetados como cualquier autoridad espiritual y no sean violentados, al igual como respetan al Papa, tiene que ser así para todos los pueblos indígenas, no sólo para los seres espirituales del pueblo chileno.
-¿Entonces cree que uno de los grandes problemas de la clase política es su desconexión con la realidad?
Está claro que es así y que tampoco escuchan a la gente. No saben ponerse en el lugar de otro, yo creo que ningún político ha pasado hambre. Por eso ahora tiene que llegar gente nueva y que entienda la realidad, porque ya quedó claro que los mismos de siempre no pueden seguir en el poder.
Pese a que algunos políticos ya se quieren postular a constituyente, la gente ya se dio cuenta que los mismos de siempre no van a dar soluciones, quizás uno tampoco va a solucionar la vida, pero va a luchar por buscar más equidad.
Ojalá que para este proceso participe gente de afuera, que no tengan conexiones con personeros políticos. Hay gente que sabe mucho más que los políticos. Tiene que ser gente de abajo, de juntas de vecinos, gente que haya pasado por experiencias que crean que eso se puede llegar a cambiar, por eso los mismos apellidos ya no se pueden repetir, tenemos que cambiar el esquema.
-Tras el triunfo del Apruebo, señaló a Interferencia que «la protesta va a seguir” (El Apruebo arrasa con un 78% y una preocupada élite sale rápidamente a intentar marcar la pauta) Con su próxima candidatura, ¿sostiene lo mismo?
Por supuesto. Queda mucha agua que tiene que pasar por el puente todavía, las calles no se tienen que soltar por ningún motivo, porque el hambre todavía está, la discrminacion y la desigualdad todavía están. Lamentablemente hay mucha gente sin trabajo y el gobierno no quiere responder, por eso la única forma de hacer presión es estando en las calles.
Los de arriba y Piñera se están quedando solos, renunció el ministro de Interior, se dieron cuenta que el pueblo alzó la voz y por eso están asustados. La verdad lo único cuerdo que le he escuchado a la derecha fue cuando la primera dama dijo “lamentablemente tendremos que compartir nuestros privilegios”, eso es algo que deberían haber hecho hace tiempo, por eso la gente se cansó.
Lo bueno también es que ahora la gente no se deja influenciar por la televisión y se dan cuenta que los verdaderos valientes están en las calles, que no somos delincuentes los que protestamos. Gracias a la gente que manifestó se logró por ejemplo el 10% que no es ni siquiera un beneficio, pero por fin pudimos tocar nuestra plata. Gracias a las presiones de la calle, de los estudiantes, de la presión de la movilización, por lo mismo, menos ahora que soltar las calles, sino nos van a meter el dedo en la boca y pasará lo mismo de siempre.
-Usted dice “valientes”, pero distintos sectores la política tradicional insiste con señalar que “no es la forma”, ¿qué piensa de ello?
Que vean con sus propios ojos cómo empieza la violencia, que la televisión comience a grabar antes o que los mismos ministros bajen a la plaza porque es fácil juzgar detrás de una pantalla. La violencia no la comienzan los manifestantes y el gobierno sigue respaldando a carabineros.
Están asustados porque se les acabó la gallina de los huevos de oro, y van a tener que compartir sus privilegios, porque nosotros les pagamos el sueldo a ellos. Espero que la gente se informe antes de votar, que no se deje llevar por las personas que hablan bonito.
FUENTE: Interferencia