Resumen Latinoamericano, 20 de diciembre de 2020.
En los últimos días se ha reafirmado una dura polémica sobre el tema de las candidaturas para las elecciones de alcaldes y gobernadores de 2021. Entre esas noticias está una que generó mucho revuelo: en un ampliado en Cochabamba hubo agresiones, gritos y abucheos contra algunos dirigentes, especialmente dirigidas al ex ministro Romero. También hubo un lanzamiento de objetos varios y algunas sillas contra la mesa que presidía el presidente del MAS Evo Morales. Para hablar de esto y de otros temas que se están dando en la interna, entrevistamos al ex cónsul boliviano en Argentina, Antonio Abal Oña, analista profundo de la realidad de su país y un militante consecuente de la causa revolucionaria.
-El tema de las elecciones de candidatos en Bolivia, ciertamente tiene muchas anécdotas, anteriormente al hecho que señalás, en un municipio rural, en el departamento de Chuquisaca, se dio un hecho de desacuerdos con Evo Morales. Unos dirigentes de una central provincial, que es bastante grande en Chuquisaca, le dijo a Evo que no estaba de acuerdo con la forma en la que estaban eligiendo. Luego tuvimos incidentes en Potosí donde Evo tuvo que salir del lugar rápidamente, también por el cuestionamiento de los candidatos. Se diría que esto es una anécdota que siempre ocurre en estos casos, pero específicamente, el hecho de que haya sucedido en Cochabamba, en el corazón del Chapare, ha tenido gran repercusión. Por otro lodo, se produjo un desmentido por parte de quien lanzó la silla. Él dijo «no lancé la silla a Evo, sino al otro que se acercaba agresivamente a Evo». Bueno, ha tenido cobertura este desmentido, pero la primera imagen siempre queda. Los medios de comunicación en Bolivia mantienen esta línea de trabajo muy crudamente anti-Evo. Generalmente, los podemos catalogar de antidemocráticos, le dieron mucho vuelo a este hecho, diciendo que hay diferencias internas en el MAS. Hay que conocer bastante qué es el MAS, qué características tiene, para entender la situación. Entonces eso puede ayudar a ver mejor las confrontaciones que se están dando en estas ciudades. Falta definir la candidatura oficial de la ciudad de El Alto, clave para cualquier partido político. Ese es un poco el escenario actual.
-Mas allá de los desmentidos, lo que se nota desde afuera es que hay como cierta desanimo de algunos militantes del MAS con respecto a qué papel está jugando Evo allí. no es lo mismo Evo como presidente, no es lo mismo Evo retornado a Bolivia en el marco de multitudes, que este Evo que opina en la interna. Por supuesto que tiene derecho a hacerlo ya que fue uno de los principales artífices de esta movida poderosa que significa el MAS. Esto genera ciertos disgustos. Por otro lado, también a lo largo de estos días se pudo escuchar a dirigentes comentar que están «cansados que el entorno de Evo vuelva a tener peso». ¿Crees que hay un problema allí, entre el gobierno de Lucho Arce y Choquehuanca y los movimientos que viene haciendo Evo Morales, que tiene peso propio en cada actitud que tome?
-El panorama es el siguiente, podemos ver cómo tres fuentes de poder en Bolivia en este momento. Las tres absolutamente legítimas. En primer lugar, el gobierno encabezado por Luis Arce y Choquehuanca, este es el ejecutivo, que esta gobernando el país. Por otro lado, tenemos que el Pacto de Unidad, las organizaciones más poderosas del movimiento sindical de Bolivia, principalmente de pueblos originarios que demostraron su poder con los bloqueos de agosto. Finalmente tenemos el Movimiento Al Socialismo como estructura política y a la cabeza Evo Morales, que no olvidemos que es el presidente del movimiento político del MAS. Los estatutos le permiten esas prerrogativas, definir candidatos cuando existen controversias. En este momento se han dado estas declaraciones de la compañera ejecutiva de las Bartolinas (Segundina Flores, de la Confederación de Mujeres Bartolina Sisa) que fue una de las primeras que hizo público su descontento, llamando la atención del gobierno, señalando que debía haber cambios, que no debería haber gente que ya haya estado en la gestión del gobierno. Últimamente han reiterado estas declaraciones, que tiene que salir toda la gente que había colaborado con el golpe. Porque se sabía en varios ministerios que existe gente que está en niveles de dirección y no son trabajadores subalternos, sino que ocupan cargos de directores, de autoridades y han sido artífices también de las denuncias y persecución de personas de esos ministerios. Ser parte del Pacto de Unidad es cuestionar y hacer frente a lo que se puede llamar resabios del golpe que están en el poder ejecutivo. ¿Por qué las Bartolinas? Porque recientemente posesionado el ejecutivo de la CSUTCB (Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia), que es la organización de los varones, están recién reordenándose, es costumbre que cuando llega una nueva directiva esta tenga que dar un periplo a nivel nacional para ver el comportamiento de las Federaciones departamentales. Por eso, todavía no ha habido declaraciones referidas al gobierno por parte de la CSUTCB, pero en conjunto el Pacto de Unidad está reflejando el malestar que vos señalabas respecto del gobierno. Y segundo, respecto también de los candidatos y procesos de elección.
Hay un pequeño apunte: en las áreas rurales principalmente, este pedido de que sea gente nueva, que nos sea gente que ya ha pasado por función pública, ha caído como un búmeran, porque las quejas de los municipios rurales son de otro tipo. «Hemos hecho reuniones, dicen, y el sindicato decidió que tal compañera sea candidato a alcaldesa, pero ha venido la gente dirigente del MAS y trajeron una abogada de la ciudad y ha dicho que tenía que poner gente nueva, gente que conozcan las leyes”, y entonces ese es otro punto de confrontación. Estas pequeñas roscas que se han organizado en las provincias no están obedeciendo a lo que están saliendo de Ampliados y de Congresos regionales. En ese proceso las que están saliendo perjudicadas, son las mujeres, las candidatas de base, porque hay compañeras que se quejaron de ser discriminadas por ser «de polleras». «Por eso no nos han elegido y prefieren elegir una señorita de pantalón y que sea profesional”,señalan. Tenemos esos problemas internos muy fuertes que obedecen a las contradicciones que se están generando al interior de MAS
-Hay otro tema, hubo hace unos días una concentración de los Ponchos Rojos en Plaza Murillo, en La Paz. Cuestionaban algunos cargos y nombramientos del gobierno, como el de Diego Pary, el ex Canciller. Están jugando fuerte los Ponchos Rojos en este punto, con las críticas.
-Si, han tenido un personamiento muy crítico. Tenemos que esperar una declaración oficial respecto a cómo van a ser las relaciones, entre los movimientos sociales, el gobierno y el Instrumento Político. Porque se ha dado una figura que no se capta bien. Ha habido un compromiso de Luis Arce y de Choquehuanca con el Pacto de Unidad de aceptar que los candidatos y nombramientos sean gente nueva, se han comprometido en una reunión pública que salió en los medios. Pero ese compromiso fue con el gobierno, pero no con el Instrumento Político. Entonces, Evo hizo declaraciones estando aun en Argentina y claramente señaló que «algunos compañeros se han equivocado que la gente de mi entorno no debería estar”, y el señaló claramente «David Choquehuanca y Luis fueron de mi entorno», dijo, saliendo a retrucar las declaraciones que habían hecho. Entonces, Evo Morales está funcionando como organización política que no tiene el compromiso que sí lo tiene el gobierno, y eso es complejo. Es un triángulo de poder que se formó en Bolivia y ahora tiene que tener una sola y clara señal porque sino vamos s tener estas manifestaciones regionales como el caso de los Ponchos Rojos o los de Santa Cruz que insisten en el apoyo al ex ministro Romero en contra de haber elegido un candidato oficial. En el sur estamos teniendo problemas en el departamento de Tarija, están surgiendo bloques regionales organizados que no están obedeciendo la línea política del MAS. En Bolivia tenemos una palabra para definir estos momentos: se llama «chenco», que sería un revoltijo de cosas que no termina de aclararse. Estamos en momento de «chenco» y eso quedará hasta el momento de inscripción de los candidatos. Uno de los voceros que tiene el MAS en La Paz señaba que en la política no está definido nada hasta el último momento. Eso es muy cierto, sabemos que los candidatos a senadores y diputados hasta el último momento, es decir a las 11.59 de la noche aparecen en otras listas y no en las que habían aprobado, eso ocurre con frecuencia.
-Este revoltijo que contabas se trasladó a Buenos Aires, han habido movilizaciones a la Embajada en rechazo al nuevo embajador Ramiro Tapia ¿Esto también es parte de lo mismo?
-Si por su puesto, hay servicios en el exterior que están teniendo problemas respecto a los mecanismos que tienen que restaurar nuevamente delegaciones diplomáticas que habían sido cerradas definitivamente en el gobierno anterior, como Cuba, Nicaragua Venezuela, pero este no es el caso e Argentina. En Argentina se mantuvo abierto tanto el consulado como la embajada, pero la embajada no puedo nombrar un embajador, por lo que se recurrió a la figura del «agregado de negocios». El representarte de Añez en Argentina era un agregado comercial. Ahora, el Sr Tapia ha ido con ese cargo a Buenos Aires. No es el correspondiente a embajador, pero es el que corresponde a la máxima autoridad de la embajada. Para ser designado oficialmente, tiene que ser nombrado por el presidente de la República. Pero la figura de este momento que está vigente es esa, el agregado de negocios, agregado comercial y tiene que sacar al de Añez. Esto añade confusión porque parece que hay resistencia a la persona de Tapia. Resistencia que está generando división a la complicada representación de la comunidad boliviana en el exterior. En Argentina siempre ha habido diferentes asociaciones y representaciones de las colectividades de Bolivia. Recordemos que en Bolivia somos un estado plurinacional, entonces esa plurinacionalidad se expresa en la unidad de los residentes en el exterior. Es algo que tendrán que calibrar las autoridades diplomáticas, pero es algo muy complejo, ya que hay que conducir una política en el exterior con desencuentros de las autoridades. Es que tienen que proteger derechos, en este caso sería el Consulado, en cambio el embajador tiene que mantener una relación de estado con estado, muy importante principalmente con el gobierno argentino. Creo que ahí están ocurriendo confusiones con los roles que se deben asumir. Creo que Tapia esta queriendo actuar como protector de derecho y ese rol lo tiene que asumir el Cónsul y no el embajador. Esto hace que las organizaciones de bolivianos residentes tengan sus peros y realicen movilizaciones por esta manera de actuar. Esperamos confirmaciones de las autoridades en el exterior, según tenemos información son solo cuatro los embajadores oficialmente nombrados.
-Antonio, gracias por la información. Nos queda claro que hay polémica, hay “chenco», como dicen ustedes, habrá que ver que esto no afecte y que la derecha no se aproveche. Generalmente cuando se divide el campo popular, la derecha saca ventajas.
-El peligro que yo veo de la situación es el siguiente, estas manifestaciones regionales pueden conducir a un «voto castigo», debilitando la presencia territorial del MAS en los gobiernos subnacionales. Vale decir que si pierde el MAS las gobernaciones y municipios esto debilita la capacidad de movimiento que tiene que tener el gobierno central para asumir medidas para salir de la crisis económica. Sabemos todos que se tienen que tomar medidas, algunas serán duras, pero precisamos concenso y eso se hace con gobernadores y alcaldes. Alcaldía perdida y gobernación perdida es el centro del conflicto político y acrecienta la dificultad de salir de la crisis económica. Por otra parte, estas crisis que son políticas y de elección de candidatos pueden transformarse en crisis de las organizaciones sindicales, es decir debilitamiento del Pacto de Unidad, eso es para mí lo más grave. La debilidad el Pacto de Unidad es debilitar la columna vertebral que ha sostenido los 14 años de transformaciones en Bolivia y la posibilidad de seguir construyendo el Estado Plurinacional. La única garantía clara y organizada que hay en Bolivia es el Pacto de Unidad y estos desencuentros pueden conducir a un debilitamiento interno