Resumen Latinoamericano, 28 de febrero de 2021.
Convocados por Juntos por el Cambio, un grupo de personas se manifiestan en la Plaza de Mayo y otros puntos del país para cuestionar la campaña de vacunación y sacar redito de una situación que el presidente Alberto Fernández cortó de raíz. No faltan los carteles que enaltecen a los jueces ni las remeras con insultos al Poder Ejecutivo.
Imagen: Kala Moreno Parra
A pesar de que el presidente Alberto Fernández le puso fin a la discusión por las irregularidades en la campaña de vacunación tras el pedido de renuncia del ahora exministro Ginés González García, desde Juntos por el Cambio convocaron a una nueva marcha este sábado en todo el país, el 27F, con el objetivo de insistir en mantener el tema en agenda para sacar rédito político en un año electoral.
A poco de las 17 horas, comenzó a escucharse un aplauso sostenido entre la poca gente que se acercó a Plaza de Mayo, personas mayores, entre jóvenes y adultos, todos con banderas argentinas.
Entre los carteles de los asistentes se pudieron leer frases como «jueces valientes y dignos» y otro que dice «Bergoglio dejá de operar». Un señor se vistió con una remera que reza «qué gobierno de mierda», mientras que los barbijos que priman son los de animal print. También se observaron a mujeres con sombreros para protegerse del sol.
Si bien la concentración principal era en Plaza de Mayo y en el microcentro porteño, también se registraron protestas que fueron menos numerosas aún en otros puntos de la Ciudad de Buenos Aires: en la localidad bonaerense de Olivos, frente a la quinta presidencial, en Mar del Plata y plazas de algunas provincias como Mendoza y Córdoba.
En esta oportunidad se percibió una fuerte presencia de dirigentes de la oposición, como los diputados Mario Negri, Toty Flores, Maximiliano Ferraro, Cristian Ritondo, Waldo Wolff y Fernando Iglesias, entre otros.
Dentro de las figuras del «ala dura» estuvieron la líder del PRO, Patricia Bullrich, el presidente de la UCR Nacional, Alfredo Cornejo y el ex titular del Sistema Federal de Medios y Contenidos Públicos, Hernán Lombardi, a quien se lo vio junto al actor Luis Brandoni.
La marcha también fue difundida en redes sociales con el hashtag #27F y #27FYoVoy, mientras que otros sectores, como Republicanos Unidos, integrado por Ricardo López Murphy, Yamil Santoro y Darío Lopérfido, se sumaron a la convocatoria.
«La gente se movilizó por la indignación. Sobra inmoralidad política en el Gobierno. Lo que han hecho no se salva dictando una resolución», expresó Negri, quien participó de la movilización desde Mar del Plata.
A su turno, Lombardi afirmó que «toda la Argentina viene conmovida por los desaciertos del Gobierno» y que «hay que tener el estómago de acero para lo que hacen», mientras que desde Mendoza Cornejo pidió que «el Gobierno escuche el reclamo».
Los discursos de los dirigentes de Juntos por el Cambio se destacaron por el tono de indignación y las denuncias de corrupción. «Decidimos salir a la calle para acompañar a todas las personas mayores. Estamos decididos a ir contra la indicación que se lleven las vacunas para la oligarquía kirchnerista. Estamos totalmente indignados», enfatizó la exministra de Seguridad, Patricia Bullrich.
También se presentó el senador Martín Lousteau, quien le reclamó a Alberto Fernández que «pida perdón» por lo sucedido en la apertura de sesiones.
La convocatoria impulsada por la oposición se da luego de que el Gobierno profundizara el mensaje sobre mantener los cuidados sanitarios correspondientes para impedir el incremento de casos de coronavirus, por lo cual este tipo de actividades atentan contra las medidas correspondientes a seguir para frenar la covid-19.
En este sentido, el Presidente le solicitó a organizaciones sociales y sindicalistas que no convoquen a manifestarse en las inmediaciones del Congreso el 1º de marzo para respaldar a su Gobierno, ya que la pandemia «aún ataca».
La macabra instalación de bolsas mortuorias en la marcha opositora
La presentación frente a la Casa Rosada, que muchos asociaron a las prácticas de la última dictadura, fue repudiada por el presidente Alberto Fernández. «Esta acción lamentable solo demuestra cómo muchos opositores conciben la República», destacó en Twitter. Tildó lo sucedido como un «acto de barbarie».
Imagen: Kala Moreno Parra
Las marchas opositoras contra el Gobierno suelen dejar varias postales que generan repudio. Pero esta vez, a las remeras con insultos, discursos enrarecidos y consignas poco claras se sumó una instalación que generó el rechazo casi unánime, empezando por el propio presidente Alberto Fernández.
Algunos de los participantes del 27F, el nombre con el que la oposición llamó a la última concentración contra el Gobierno, instalaron frente a la Casa Rosada bolsas negras rellenas con forma de cadáveres a las que encima les imprimieron distintos nombres. En un cartel figuraba Estela de Carlotto, la titular de Abuelas de Plaza de Mayo, otro hacía alusión a «los pibes de La Cámpora» y también había uno que llevaba como etiqueta «El sobrino de Ginés».
El mensaje detrás de la macabra presentación, que muchos asociaron a las prácticas de la última dictadura cívico-militar, fue rápidamente cuestionado por el presidente Alberto Fernández. «La forma de manifestarse en democracia no puede ser exhibir frente a la Casa Rosada bolsas mortuorias con nombres de dirigentes políticos», escribió en su cuenta de Twitter. Allí tildó de «lamentable» la presentación y destacó que eso demuestra «cómo muchos opositores conciben la República». «No callemos ante semejante acto de barbarie», concluyó.
Poco antes, el Jefe de Gabinete, Santiago Cafiero también había recurrido a las redes para repudiar lo sucedido. «Es peligroso para nuestra democracia que sectores de la oposición insistan en profundizar los discursos de odio», escribió en Twitter y agregó: «¿Es odio lo único que tienen para ofrecerle a la sociedad?».
La diputada de la Ciudad Victoria Montenegro, presidenta de la Comisión de Derechos Humanos en la Legislatura de la Ciudad, también condenó la instalación de la oposición en la Plaza de Mayo
También el viceministro de Salud bonaerense Nicolás Kreplak criticó la intervención opositora: “Esta imágen me entristece y me hace reflexionar cuánto es el odio que tiene un grupo minoritario de la sociedad, que sin duda, está motorizado por dirigentes políticos que fundieron el país y siguen dando recetas de fracasos rotundos por 2 o 3 medios que también son responsables”.