Berri-Otxoak se moviliza por una mayor difusión de las Ayudas de Emergencia Social (AES) en el barrio de Barakaldo que menos renta tiene
● La plataforma contra la exclusión Berri-Otxoak se ha concentrado para denunciar el nulo interés que tiene el equipo de gobierno de difundir la fecha de apertura del plazo de solicitudes para el acceso a las AES (lunes 15 de febrero) y exigen una mayor difusión de la misma en los barrios periféricos de la localidad
● Una persona residente en la barriada de El Cerco, en Cruces, tiene 8.600 euros menos de renta personal media disponible al año que una residente en la calle Gernikako Arbola
● Burtzeña, Lutxana, Cruces y Llano son las zonas con mayor densidad de personas en paro
Barakaldo, 10 de febrero 2021
La plataforma contra la exclusión Berri-Otxoak ha realizado una concentración y un reparto informativo en la barriada de El Cerco (Cruces), denunciando el nulo interés del equipo de gobierno local en anunciar la apertura del plazo de solicitudes para el acceso a las Ayudas de Emergencia Social (AES) el próximo lunes 15 de febrero, por lo que le exigen una amplia campaña de difusión de la apertura que garantice un alcance similar en los barrios más alejados respecto al centro del municipio.
Frente a la insuficiente partida presupuestaria, el Departamento de Acción Social ha preferido no informar sobre el inicio del plazo para solicitar las ayudas de emergencia social, recortar en un 20% la asignación a percibir por las familias con graves dificultades económicas y endurecer los requisitos de acceso en vez de encauzar sus esfuerzos a aumentar el presupuesto, visto que el impacto generado por la pandemia ha dejado a muchas más familias de la localidad sumidas en la precariedad.
La elección de la barriada de El Cerco para realizar esta denuncia no es casual; según la “Estadística de Renta Personal y Familiar” del Instituto Vasco de Estadística-Eustat, la renta media anual de esta zona es de 11.552€: 8.600 euros menos en comparación con la de las personas residentes en la calle Gernikako Arbola, cuya media anual asciende hasta los 20.144 euros.
El mismo informe oficial señala que el distrito número 8 de la localidad, formado por los barrios de Burtzeña, Llano y Lutxana, está un 7,70% por debajo de la renta media disponible en Barakaldo, siendo así el distrito con la renta más baja. El distrito 8 percibe una media de 13.953 euros anuales: 1.200 euros menos que la media local y 6.191 euros menos que la de la calle más rica de la anteiglesia.
Burtzeña, Lutxana, Cruces y Llano son los barrios con mayor densidad de población desempleada, razón por la que Berri-Otxoak ha exigido «medidas inmediatas que eliminen la discriminación informativa sufrida por la población de Cruces, Burtzeña, Llano y Lutxana en relación al resto de la localidad”.
Mediante esta concentración y reparto, la plataforma contra la pobreza reclama a los responsables políticos municipales “un plan integral urgente que saque a Barakaldo de la pobreza, la precariedad y que acabe con el agravio comparativo para los barrios de la periferia».
El equipo de gobierno local no ha insertado anuncios en medios de comunicación, repartido hojas informativas, revistas, comunicaciones, bandos en domicilios, comercios o en la vía pública de la localidad para anunciar el día de apertura del plazo de acceso a las ayudas de emergencia social, negando a los familias más necesitadas de la localidad la información necesaria para ejercer su derecho de solicitud. La ausencia de información sobre la apertura del plazo de solicitud de estas prestaciones de gestión municipal contrasta con la de otras acciones llevadas a cabo por el equipo de gobierno que, sin ser de carácter urgente, han sido ampliamente difundidas.
Por este motivo, Berri-Otxoak desarrollará una intensa campaña informativa a lo largo y ancho del municipio que consistirá en distribuir 32.000 hojas informativas sobre las AES y otras prestaciones por plazas, domicilios y paradas de metro.
Al respecto, el colectivo social ha destacado que “el Ayuntamiento, lejos de no hacer nada contra la discriminación económica de las personas residentes en los barrios con una mayor tasa de desempleo y precariedad, las castiga y responsabiliza completamente de su situación al negarles información sobre las prestaciones sociales a las que tienen derecho, impidiéndoles así la única posibilidad de la que parten para desarrollar una vida digna y condenándolas a la exclusión social».
La asociación barakaldesa contra la pobreza también ha denunciado las consecuencias de la falta de personal (trabajadoras sociales y personal administrativo) en el “equipo de ayudas económicas”; lo que provoca demoras de hasta 7 meses en la atención, tramitación y resolución de las solicitudes presentadas por las familias de la localidad.