Resumen Latinoamericano, 22 de febrero de 2021.
Versión 1: Si uno se atiene a la información vertida por la policía, todo se trató de que un patrullero acudió al barrio Malvín Norte por una denuncia de hurto, la gente del barrio los recibió a pedradas (por algo será) y a un uniformado que quiso grabar la escena parece que una vecina le tiró el celular de un manotazo. Luego ese u otro policía la «fusiló» de cerca hiriendola pero no de muerte.
Versión 2: La que ofrece el periódico «La Diaria», que cuenta más o menos lo mismo que la policía. O sea le da crédito a la institución represiva por excelencia y repite permanentemente el cronista de este diario que las balas que disparó el arma policial no tenía «munición letal», como disculpando el exceso. Si La Diaria, que suele posar de progre dice eso, ni qué hablar lo que dirá El País, de clara posición derechista.
Esta es la versión del periódico:
El domingo de tarde empezó a circular un video por Whatsapp en el que al principio se ve una discusión entre vecinos de Malvín Norte y efectivos de la Policía, que deriva en empujones y forcejeos. Luego un oficial le dispara a una mujer con munición no letal desde muy corta distancia. Después, los policías, que estaban en dos automóviles, se retiran.
El Ministerio del Interior (MI) emitió un comunicado sobre la situación. Informó que este domingo, cerca del mediodía, ingresó un llamado al servicio de emergencias 911 denunciando “un hurto en proceso” en Hipólito Yrigoyen y Arcos Ferrand. “Un móvil recorre la zona y avista a un hombre que se ajusta con las descripciones aportadas, por lo que se procede a realizar la revista del mismo”, se indica en el comunicado.
Según el MI, en ese momento, “personas que se encontraban en el lugar comienzan a apedrear el móvil policial, por lo que uno de los efectivos saca un celular para realizar un registro fílmico de los hechos, pero una mujer le arrebata el celular y se lo tira a una cañada de la zona, radicando el efectivo la denuncia correspondiente”.
En el comunicado del MI se señala que por eso se efectuaron disparos con armas de fuego con munición no letal “en forma disuasiva”, por los que “en primera instancia resulta lesionada una mujer de 56 años, que fue trasladada al Hospital Pasteur por un vehículo particular”. Luego, fuentes del MI señalaron a la diaria que hubo dos mujeres heridas más, que ya fueron dadas de alta, y “una de ellas se fue sin asistencia médica, por voluntad propia”.
El artículo 165 de la Ley 18.315, que establece el procedimiento policial, dice que el personal policial está autorizado para la utilización del equipamiento neutralizante no letal denominado stun guns y stun baton con función de “disuasión, defensa y protección”. “Dichos dispositivos podrán ser utilizados por el personal policial, previa capacitación, y en aquellos casos o situaciones en los que se requiera proceder a neutralizar a un individuo, ya sea por su peligrosidad o resistencia, a fin de evitar un daño propio o ajeno”, indica la ley.
Dado el uso de munición no letal que provocó lesiones, desde el MI se señaló a la diaria que se iniciará una investigación administrativa “para analizar el procedimiento”.
Según un instructivo de un cuerpo policial para el uso de escopetas al que accedió la diaria, los disparos disuasivos con munición no letal deben hacerse “mediante rebote hacia el piso a una distancia mínima de 10 metros, evitando impactar en forma directa sobre el cuerpo”.
Versión 3: Escrita por la Coordinadora contra toda la LUC (Ley de Urgente Consideración) votada por los politiqueros de derecha y no rechazada por los de «izquierda».
Ante los episodios en Malvin Norte
Todo el país ha podido contemplar a través de las redes y sus dispositivos móviles la acción criminal de la policía contra un grupo de vecinas del barrio Malvin Norte. El operativo presentado por la prensa nacional como uno que buscaba dar con el autor de un hurto es condimentado con un supuesto enfrentamiento en que los patrulleros habrían sido atacados a pedradas por pobladores del barrio. Las imágenes, sin embargo, hablan por sí solas: empujones y patadas por parte de la policía, disparos de escopeta y tres compañeras heridas. Uno de los videos muestra especialmente la provocación de los uniformados contra una de las vecinas que lo increpa por sus atropellos, “anda a aprender a leer” le dice en tono insultante el oficial.
El episodio viene a confirmar lo que venimos advirtiendo insistentemente desde la campaña por la anulación total de la Ley de Urgente Consideración, que no es otra cosa que un respaldo legal a los atropellos contra el pueblo trabajador y especialmente los de los barrios humildes. Estas tropelías de las distintas fuerzas de represión son moneda común en la periferia capitalina, a veces cobran más notoriedad allí donde se alcanza a registrar el momento.
La “mano dura” que prometían contra la “delincuencia” se ha transformado rápidamente en mano dura contra los que vienen sufriendo no solo la inseguridad, sino el desempleo, la miseria creciente y la incertidumbre sanitaria.
Desde la Coordinadora Contra Toda la LUC nos solidarizamos con las compañeras afectadas y lastimadas por este dispositivo irracional y criminal. Exigimos el pronunciamiento en el mismo sentido de todas las organizaciones del campo popular.