Chi­le. Al Ejér­ci­to le preo­cu­pa que incen­dien monu­men­to a Baque­dano pero no que dece­nas de jóve­nes pier­dan los ojos por balas de Carabineros

Ejér­ci­to tras el incen­dio de monu­men­to a Baque­dano: «Los cobar­des des­adap­ta­dos que come­tie­ron este acto indig­nan­te y repu­dia­ble son antichilenos»

Ejército tras vandalización de monumento a Baquedano: «Los cobardes desadaptados que cometieron este acto indignante y repudiable son antichilenos»El monu­men­to a Baque­dano este vier­nes | Foto: Cap­tu­ra de video.

Del comu­ni­ca­do del Ejér­ci­to pino­che­tis­ta chileno

Cate­gó­ri­ca­men­te, la enti­dad inclu­so se refi­rió a los hechos con duras pala­bras hacia sus res­pon­sa­bles. «El día de ayer los chi­le­nos hemos sido tes­ti­gos, una vez más, de otro delez­na­ble aten­ta­do, esta vez incen­dia­rio, al monu­men­to ecues­tre que el Esta­do y Pue­blo de Chi­le eri­gie­ron en home­na­je al vic­to­rio­so Gene­ral Manuel Baque­dano por su lide­raz­go en la Gue­rra del Pací­fi­co», se lee en el ini­cio del comu­ni­ca­do públi­co que este sába­do está sien­do masi­va­men­te comen­ta­do en pla­ta­for­mas digi­ta­les como Twitter.

«Los cobar­des des­adap­ta­dos que come­tie­ron este acto indig­nan­te y repu­dia­ble para todos nues­tros com­pa­trio­tas son anti­chi­le­nos, por­que des­co­no­cen la his­to­ria y en su igno­ran­cia, son inca­pa­ces de des­cu­brir el extra­or­di­na­rio apor­te que el Gene­ral Baque­dano jun­to a miles de sol­da­dos chi­le­nos le entre­ga­ron al país», se lee a ren­glón segui­do en el escri­to que expre­sa la moles­tia de la enti­dad cas­tren­se fren­te a lo suce­di­do ano­che.

«En reite­ra­das opor­tu­ni­da­des el Ejér­ci­to ha pues­to en aler­ta acer­ca de la nece­si­dad de reti­rar y tras­la­dar el monu­men­to para evi­tar su van­da­lis­mo. Hoy es urgen­te some­ter­lo a repa­ra­cio­nes y res­tau­rar­lo ade­cua­da­men­te, de mane­ra que recu­pe­re la dig­ni­dad que mere­ce una figu­ra tan rele­van­te en la his­to­ria nacio­nal», dice a con­ti­nua­ción el docu­men­to deri­va­do de una nue­va jor­na­da de pro­tes­tas en la capital.

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¿Quién fue Manuel Baque­dano? El gene­ral que enca­be­zó gue­rras con­tra los mapu­che y el pue­blo peruano

Por Gabriel Muñoz (Licen­cia­do en Historia)

El epi­cen­tro de las pro­tes­tas en la capi­tal de San­tia­go se han con­cen­tra­do en lo que popu­lar­men­te se lla­ma­ba Pla­za Ita­lia (refun­da­da como «Dig­ni­dad») y se han carac­te­ri­za­do por tomar el monu­men­to al Manuel Baque­dano. Miles han tre­pa­do por sus espal­das y sobre su caba­llo levan­tan ban­de­ras mapu­ches y todo tipo de con­sig­nas ¿Quién es este des­co­no­ci­do per­so­na­je? Una his­to­ria bas­tan­te oscu­ra carac­te­ri­za a este gene­ral del Ejér­ci­to de Chile.

La revuel­ta social en Chi­le ha trans­for­ma­do el espa­cio públi­co. Aho­ra varias pla­zas en varias ciu­da­des se lla­man «Resis­ten­cia» o «Revo­lu­ción». Se han derri­ba­do esta­tuas de mili­ta­res y figu­ras polí­ti­cas liga­das al Esta­do de Chi­le. Por ejem­plo, En Temu­co se derri­bó la esta­tua de Pedro de Val­di­via, el con­quis­ta­dor que bus­ca­ba escla­vi­zar al pue­blo mapu­che. Sim­bó­li­ca­men­te los mani­fes­tan­tes lle­va­ron a Val­di­via y lo ubi­ca­ron a los pies de la esta­tua de Lau­ta­ro. Líder mapu­che y prin­ci­pal enemi­go del espa­ñol. La revuel­ta tam­bién tras­to­có los sím­bo­los y pare­cie­ra que quie­re sacu­dir­se de los héroes glo­ri­fi­ca­dos por el Estado.

Pla­za Ita­lia o Pla­za Baquedano

Chi­le reci­bió un rega­lo del gobierno ita­liano en 1910, el monu­men­to lla­ma­do el Arcán­gel, que está com­pues­to por un ángel jun­to a un león, éste fue dona­do a pro­pó­si­to del cen­te­na­rio de la inde­pen­den­cia chi­le­na, de ahí el nom­bre Pla­za Ita­lia a lo que antes era cono­ci­do como Pla­za Colón. En la déca­da del ´20 fue rebau­ti­za­da como Baque­dano y la Pla­za Ita­lia con su Arcán­gel pasó a ser el ban­de­jón que está para­le­lo a Pla­za Baque­dano por el Norte.

Manuel Baque­dano fue pues­to allí por un Dictador

La esta­tua que coro­na lo que antes era cono­ci­do como Pla­za Ita­lia en el cen­tro de la ciu­dad de San­tia­go, epi­cen­tro de las pro­tes­tas san­tia­gui­nas de la rebe­lión popu­lar, fue cons­trui­da en la déca­da de los ’20. Está con­fec­cio­na­da en bron­ce y su base está com­pues­ta por pie­dra ver­de. Fue inau­gu­ra­da por Car­los Ibá­ñez del Cam­po en 1928 cuan­do ejer­cía el poder de pre­si­den­te por medio de una dic­ta­du­ra mili­tar. Este mis­mo suje­to creó Cara­bi­ne­ros de Chi­le en esos mis­mos años como un cuer­po espe­cial de repre­sión de la pro­tes­ta y la huel­ga obrera.

¿Quién fue Manuel Baquedano?

El gene­ral Baque­dano es una pie­za cla­ve en la his­to­ria del Esta­do de Chi­le por eso los gober­nan­tes de este país le die­ron su nom­bre a la pla­za más impor­tan­te del país. La roton­da de la lla­ma­da zona cero se lla­ma real­men­te «Baque­dano» en un inten­to por macha­car la memo­ria con su figu­ra ¿Quién fue real­men­te? Nació en 1823 en el seno de una fami­lia mili­tar. Esca­pó de su casa para alis­tar­se en el Ejér­ci­to de Chi­le para com­ba­tir con­tra paí­ses veci­nos en la Gue­rra con­tra la Con­fe­de­ra­ción Perú-Boli­via­na en 1838. Des­de enton­ces siguió la carre­ra militar.

En 1851 su par­ti­ci­pa­ción fue útil para el Pala­cio de la Mone­da cuan­do se des­ató una rebe­lión. Desem­pe­ñó un papel deci­si­vo en la con­fron­ta­ción con las tro­pas que se rebe­la­ron el 20 de abril de dicho año con­tra la elec­ción de Manuel Montt como pre­si­den­te. Un pre­si­den­te auto­ri­ta­rio y de la eli­te. Nue­va­men­te en 1859 el gobierno lo vol­vió a reque­rir para repri­mir otra rebe­lión con­tra Montt. Pos­te­rior a eso se desem­pe­ñó como gene­ral de bri­ga­da del Ejér­ci­to de Chi­le en 1869 con­tra las tri­bus mapu­che en la Arau­ca­nía. Pro­ce­so que se cono­ce como Ocu­pa­ción (usur­pa­ción) del Wall­ma­pu (terri­to­rio mapu­che). Un pro­ce­so san­grien­to y al ser­vi­cio de expan­dir la fron­te­ra capi­ta­lis­ta hacia el sur. Esas labo­res lo man­tu­vie­ron en Arau­ca­nía por cer­ca de 7 años.

Duran­te la Gue­rra del Pací­fi­co fue desig­na­do Coman­dan­te en Jefe del Ejér­ci­to de Chi­le, por desem­pe­ñar un papel pro­ta­gó­ni­co en las cam­pa­ñas terres­tres de Ari­ca y Tac­na. Pos­te­rior­men­te diri­gió en per­so­na las bata­llas de Mira­flo­res y Cho­rri­llos, dos actos de ocu­pa­ción en don­de el Ejér­ci­to de Chi­le reali­zó saqueos, vio­la­cio­nes e incen­dios con­tra la pobla­ción civil. Hay fuen­tes que ates­ti­guan la cruel­dad de la ope­ra­ción, que cul­mi­nó con la toma de Lima.

Tras enca­be­zar con­tra revo­lu­cio­nes, una gue­rra de ocu­pa­ción con­tra el pue­blo mapu­che y una gue­rra de rapi­ña con­tra boli­via­nos y perua­nos, Baque­dano espe­ra­ba jubi­lar­se y poder admi­nis­trar su hacien­da ubi­ca­da en Los Ánge­les que ante­rior­men­te ya esta­ba rin­dien­do jugo­sas ganan­cias. Pero el Esta­do nue­va­men­te pidió su apo­yo. En 1891 el pre­si­den­te José Manuel Bal­ma­ce­da era depues­to por una gue­rra civil que enfren­ta­ba a dos sec­to­res de la eli­te chi­le­na. Baque­dano se ubi­có del lado de los triun­fa­do­res y asu­me el poder como «pre­si­den­te inte­ri­no». Con el obje­ti­vo de evi­tar una revo­lu­ción y entre­gar el poder a la oli­gar­quía, que repre­sen­ta­ba en Chi­le al capi­tal inglés.

Se tra­ta enton­ces de una figu­ra enemi­ga del pue­blo tra­ba­ja­dor, de los veci­nos pue­blos de Perú y Boli­via, y del pue­blo mapu­che, que qui­zás la pro­pia revuel­ta ter­mi­na­rá por remo­ver, a menos, que Piñe­ra logre esta­bi­li­zar la situa­ción polí­ti­ca en Chi­le y vol­ver a legi­ti­mar a los héroes del cues­tio­na­do Estado.

Biblio­gra­fía:

Ála­mos, Mag­da­le­na «Manuel Baque­dano: La his­to­ria del gene­ral cuyo nom­bre lle­va la pla­za que ha sido el cen­tro de las pro­tes­tas socia­les», 2019.

Ben­goa, José. His­to­ria del pue­blo mapu­che, siglo XIX y XX, San­tia­go : LOM Eds., 2000.

Car­mo­na, Jor­ge. «Baque­dano». San­tia­go. Biblio­te­ca del Ofi­cial, Vol. LIX. Edi­to­ra Gabrie­la Mis­tral, 1978.

Vial Correa, Gon­za­lo. Chi­le­nos del bicen­te­na­rio: Manuel Baque­dano Biblio­te­ca del Con­gre­so Nacio­nal de Chile.

Villa­lo­bos, Ser­gio (2004). Chi­le y Perú, la his­to­ria que nos une y nos sepa­ra, 1535 – 1883 (2 edi­ción). Chi­le: Edi­to­rial Universitaria

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