Resumen Medio Oriente /09 de marzo de 2021 – Una organización británica expone cómo el sistema judicial militar de Israel mantiene su ocupación ilegal en Cisjordania mediante la aplicación de leyes represivas a la población palestina; reprimiendo la disidencia, sofocando la resistencia a la ocupación y profundizando su dominio militar.
Un nuevo informe de la organización benéfica británica War on Want ha sacado a la luz el sistema jurídico racista de dos niveles de Israel en un análisis detallado del sistema de tribunales militares en la Cisjordania ocupada operado por el Estado sionista.
Bajo el título «Judge, Jury, and Occupier«, la organización benéfica contra la pobreza, con sede en Londres, expone cómo el sistema judicial militar de Israel mantiene su ocupación ilegal en Cisjordania mediante la aplicación de leyes represivas a la población palestina; reprimiendo la disidencia, sofocando la resistencia a la ocupación y profundizando su dominio militar.
Existen dos sistemas legales que operan en paralelo para los palestinos que viven en la Cisjordania ocupada, según el informe, explicando que existe «la ley palestina y la ley militar israelí, esta última codificada a través de miles de órdenes militares».
«Las órdenes militares israelíes son emitidas por el ejército israelí y tienen prioridad sobre la ley palestina. Las órdenes militares israelíes imponen la ocupación ilegal de Israel y no benefician a la sociedad palestina. Las órdenes militares de Israel sirven como un aparato de represión, tal y como han documentado y articulado los expertos en derechos humanos palestinos, israelíes e internacionales», afirmó War on Want al presentar su informe la semana pasada.
«Juez, Jurado y Ocupante» echa por tierra el mito común de que los palestinos gozan de autogobierno desde los Acuerdos de Oslo de 1993. Expone cómo los palestinos no tienen medios para escapar del sistema judicial militar racista de Israel, que ha creado una realidad «separada y desigual». Por ejemplo, los colonos israelíes detenidos en Cisjordania son juzgados en tribunales civiles dentro de Israel, mientras que los palestinos son juzgados en tribunales militares.
El tratamiento de las dos poblaciones de forma tan discriminatoria fue calificado recientemente de apartheid por B’Tselem en un histórico documento de opinión. Según el grupo israelí de derechos humanos, el Estado sionista es culpable de «promover y perpetuar la supremacía de un grupo ‑los judíos- sobre otro ‑los palestinos».
Israel considera a los palestinos como una amenaza para la seguridad desde su nacimiento, afirma el informe. Desde 1967, por ejemplo, Israel ha decretado ilegales más de 411 organizaciones palestinas, incluidos todos los principales partidos políticos palestinos. Los civiles palestinos son entonces procesados por «pertenencia y actividad en una asociación ilegal», una herramienta clave en la represión israelí del activismo contra la ocupación.
La consideración de los palestinos como una amenaza para la seguridad desde su nacimiento deslegitima toda oposición a la ocupación ilegal y sirve de justificación para criminalizar todo tipo de expresión. Según el informe: «El complejo entramado de leyes militares impuestas a la población palestina ocupada está diseñado para reducir el espacio de vida de los palestinos físicamente, crear traumas psicológicos y socavar su capacidad de actuar colectivamente como pueblo.»
Este informe examina el funcionamiento de los tribunales militares de Israel, así como de sus instituciones anexas, las prisiones y los centros de detención de Cisjordania, Jerusalén Este y del interior de Israel, donde se encuentran los detenidos palestinos que esperan ser juzgados y que cumplen condena. También analiza específicamente cómo este sistema de tribunales y prisiones mantiene y amplía la ocupación ilegal de Israel en Cisjordania y repercute en la vida de los palestinos en toda su patria histórica.
Instando a la gente a unirse a la lucha de War on Want contra lo que denomina «colonialismo, ocupación y apartheid», el informe expone las formas en que el sistema judicial militar de Israel está teniendo un impacto de gran alcance y profundamente discriminatorio sobre los palestinos.
Se dice que más de 800.000 civiles palestinos han pasado por los tribunales militares de Israel desde 1967, cuando comenzó la ocupación. Hay que poner fin a este sistema y a la profunda injusticia que supone para los palestinos, afirma War on Want.
Fuente: www.monitordeoriente.com